M*ldito Niñero (gay +18)

Tres.

-Tenias razon esta guapisimo- dijo Riche cerrando la puerta tras de si.

-Te dije- dijo Alexander -Pero es hetero, no se deja-

-¿Viste esos brazotes?- dijo Franco -¿Imaginas que te abrace?-

-Me eh imaginado eso todo el dia- dijo Alexander con tristeza -Pero no se podra nada-

-Si, yo lo invite- dijo Steve -No quiere-

-Si, eso veo- comento Richie -Pero vale la pena soñar-

No estaban en el cuarto de Alexander. Alexander tenia una recamara llena de blanco y cosas de varones. Abundaba el azul y ropa bien planchada pero esa noche no.

La alcoba de Roxana era de color rosa. En un rincon habia un tocador con muchos perfumes y lazos de color negro. Habia labial con brillitos y polvoreras en contenedores que parecian reliquias antiguas.

Pero lo que mas habia eran los peluches. En casa rincon de cada pared habia algun peluche brillante y afelpado. Alexander sabia que su hermana por ningun motivo llegaria a ser lesbiana alguna vez. Le encantaban los hombres pero sabia disimularlo. Alexander tambien.

Noches como esa podia soltarse.

Encendio el aire en el mismo segundo que Richie encendio la radio con una canción muy pop. Los cuatro se cambiaron lejos de la vista de los otros tres. Al final usaban medias largas, unos shorts cortos y camisas de algodon delgadas. Dieron un grito. Pusieron una pelicula en la tele, que no verian ya que su festin estaba en el maquillaje de Roxana. Esmaltes, labiales, sombras y pinceles. Y muchas risas.

...

La luces bañaba la calle. El se escondio detras de una pared en el momento que las sirenas llegaban. Pasaron de largo. Gustavo se escondio mas en el callejon, tiro un bote de basura que espanto un gato.

Los policias no regresarian de momento pero darian vuelta a la manzana. Tenia que esconderse antes de que llegaran. Maldición no debio meterse a ese barrio. Era demasiado rico y un chico como el llamaria mucho la atención. Hasta en el noticiero habia salido.

Salio y cruzo la calle. Corrio hasta el cruce y despues fue por la glorieta hasta el callejon. Habia una casa en completa oscuridad. Corrio hacia ella pero a ultimo minuto escucho las sirenas de policia. Gustavo huyo y dio en el jardin de la casa de enfrente. Subio por la reja y se escondio. Fue por la sombra hasta las enredaderas, sus viejas amigas. Trepo por ellas hasta llegar a una saliente, una ventana. Quedo en cuclillas mientras  abajo pasaban las patrullas. Sintio su corazon latir. Se escondio mas en la oscuridad.

Pero dentro del cuarto no habia oscuridad. Si no mucha luz y mucha musica. Escucho. Se escuchaban risas inocentes. Gustavo miro. Era una pijama. Era el cuarto de una mujer sin duda alguna.

Estaban teniendo una pelea de almohadas. Gustavo sintio un enorme morbo. Si era una pijama debian ser puras mujeres. Chicas jovenes. Miro un poco.

Se toco la entre piernas.

...

Estaban teniendo una pelea de almohadas. Chiquillos ridiculos. Subi al segundo piso y coloque el seguro al cuarto de esos niños. El ruido no venia de ahi. Venia del de Roxana. Como sea. Igual coloque el seguro.

-Comere toda la pizza cuando venga- dije -¿Me oyeron? Pizza solo para mi-

Me aleje.

-Lunaticos-

...

Gustavo escucho la voz de un hombre. Se escongio. Pero las chicas siguieron su juego de almohadas. Plumas volaban por todas partes. Vio que habia una mesita con dulces. Literamente dulces. Necesitaran algo mas salado chicas. Penso Gustavo.

Dudo.

Los policias habian estacionado e interrogaban a un pizzero de uniforme rojo. Gustavo dudo mas que nunca, se puso de pie y entro.

...

La puerta se abrio lentamente. La pelea (masculina) de almohadas se detuvo. Los cuatro giraron la cabeza. Steve habia perdido los lentes, veia bien pero se notaba extraño. Guapo y raro.

-¡Hola señoritas!- dijo una voz rasposa y nueva -¿Por que tan solitas...?-

Noto que no eran mujeres si no varones. Pero la puerta ya se habia cerrado detras de el. Y las luces de policia no se habian ido.

Continuara...