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Checo

Rode los ojos al mirar a ese tipo que estaba tocando el hombro de mi Maya.

No la tienen que tocar tanto, que aleje sus sucias manos de mi chica.

—Vas a matar a ese pobre chico con la mirada—se burlo fernando.

—Que mas quisiera yo—susurre sin quitarle la mirada.

—Carola va a empezar a sospechar si no lo dejas de mirar asi—susurro Sainz a mi lado.

Ah si, Carola.

¿Donde esta Carola?

Mire todo el lugar y no la encontraba.

—Y Carola—les pregunte y ellos se encogieron de hombros.

Frunci el ceño y busque por todos lados.

¿Ya se iria?

No creo.

No creo que me haya visto o algo, por que en toda la noche no me he acercado a Maya.

Logre encontrarla, estaba platicando con Kelly, no quise acercarme si me acercaba me iba a preguntar que queria y no se me ocurria nada que decirle.

Volvi a con Fernando y Carlos para tener una vista directa de Maya.

Que aun seguia hablando con Kika y ese tipo que no dejaba de tocarla, ahora la tenia de la cintura.

Estuve tentado a ir a quitarle el brazo de un manotazo pero me contuve.

Mire como Maya se alejo de sus amigos acercandose a la barra, era mi momento de hablar con ella.

Me puse a su lado.

—Puedes dejar de mirar a Milos como si fuera la cosa mas horrorosa del planeta—dijo con un tono molesta.

—Es la cosa mas horrorosa del planeta—dije obvio.

—Su mojito señorita—mire como el bartender le coqueteaba.

—Gracias—dijo Maya sin prestarle atencion.

Solo mirandome a mi.

—Le ofesco algo señor—dijo sin quitarle los ojos de encima a mi Maya.

—Whisky—pedi mirandolo mal.

Me recarge en la barra mirando a Maya.

—Por que estas tan molesto—pregunto tomando un trago de su bebida.

—No me gusta que ese chico este tan cerca de ti—susurre tensando la mandibula.

Quise tomarla de la cintura y abrazarla, pero no puedo.

—Es solo un amigo—susurro.

—No me gusta, parece que le gustas—aprete los dientes.

—¿Erik? Que buena broma—menciono.

—No estoy bromeando—dije frunciendo el ceño.

—Solo es un amigo amorcito—susurro en mi oido.

—Su whisky—dijo el bartender que le guiño un ojo a Maya.

—Nesesito besarte—susurre cuando se fue el bartender.

—Uy, lastima que estas casado y tu esposa esta aqui—se burlo.

—Estas jugando con juego preciosa—susurre

Ella me guiño un ojo y se fue riendose de mi.

—Ni la mires—amenaze a el bartender.

Eres mas que especialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora