friends for drugs, OUTER BANKS

5; Ágatha

Los rayos del sol que entraban por la ventana de Sarah cameron hicieron despertarla junto a su amiga, habían tenido un sueño reparador se les notaba en el cabello despeinado y con un poco de resaca. Duraron un momento sin hablar y después de eso ambas decidieron bajar a desayunar.

— Buenos días, Señor. — dijo Aimée al observar al padre de Sarah, Ward Cameron.

— Buenos días Aimée no sabía que te habías quedado en mi casa.

— Una disculpa por no haberle avisado, fue de último momento y no quise salir tan noche, era un poco peligroso.

— Lo entiendo no te preocupes, eres bienvenida.

— Muchas gracias señor Ward

— Buenos días familia — hablo Rose apareciendo en la cocina y solo se dedicó a observar como Sarah, Wheezie, su esposo y Aimée se encontraban sentados en el comedor de la cocina  — y Aimée.

— Buenos días Rose — dijo Rafe tras de Rose, dándole a entender si posición a lo que Rose  volteó y se dio cuenta que este se encontraba atrás dándole paso para seguir su camino — gracias.

— Buenos días Rose, una disculpa por mi inesperada visita. — dijo Aimée viendo como Rafe se sentaba al lado de ella y Rose al lado de su esposo. Aimée solo hizo una cara de disgusto.

— El día se ve magnífico, ¿que opinan de desayunar en el jardín? — La sugerencia de Rose fue bien tomada por todos los
miembros presentes, así que todos fueron saliendo hacia el jardín para tomar un refrescante desayuno.

— Pasó, tengo cosas que hacer — dijo Rafe sin moverse del asiento, a lo que Aimée se aseguró que ningún adulto la mirara y miró a Rafe, haciendo un pequeño festejo, este solo le hizo una cara de disgusto a ese festejo.

Los Cameron decidieron ponerse a desayunar y platicaban un poco entre bocados. Al terminar el desayuno las personas que ayudaban en la casa de la familia levantaron la cosas y con esto toda la familia se levantó de la mesa haciendo cada quien sus cosas.

Aimée miró atentame a como Sarah se aceraba a su bote, eso no le llamó la atención, fue que John B estaba dentro de este. Vio que empezaron a platicar y ella supo que era momento de irse

Aimée dejó la pijama de Sarah en su cesto y se puso lo que ayer tenía, la morena se dispuso a salir de esa casa y tomar camino a la suya.

— ¡Oh por Dios!, pensé que habías muerto cielo — dijo Alessandra, madre de Aimée al
ver a su hija entrando a su casa, dejo de hacer lo que hacía y se acercó casi corriendo a ella para darle un abrazo y un beso. — Buenos
días Aimée.

— Buenos días Madre, te envié un mensaje de texto avisándote que me quedaría en casa de los Cameron. — excusó Aimée una vez que su madre la soltó y se dedicó a comer un poco de fruta mientras la escuchaba atentamente.

— Lo siento, no reviso mi celular creo que es un poco...— trato de buscar la palabra que quería decir mientras meneaba una uva en su mano. — nefasto.

— Lo se, perdón. ¿Y mi padre?

— Esta en busca de alguna foto tuya para poner una alerta de pérdida — su madre de quiso hacer la graciosa a lo que Aimée le dio una cara de que no le causaba risa. — buscaba unos papeles, no tarda en bajar, malhumorada.

— Disculpa, tengo un poco de resaca. — su madre volteó los ojos y se alejó de su hija ignorándola completamente.

— Hija mía! — escucho entrar a su padre a la cocina en el mejor momento. — ¿Como estás Cariño?

— Demasiado bien, ¿Ya desayunaste? — Le pregunto a su padre, mientras le brindaba una sonrisa sincera y un abrazo que necesitaba del hombre de su vida.

— Aún no ¿Quieres desayunar con nosotros?

— Desayune con los Cameron pero muchas gracias, provecho.

— Lo imagine cielo, date una ducha no te ves muy bien. — Aimée hizo caso a la orden de su padre y subió a su cuarto a darse una larga ducha que realmente fue reparadora.

Al salir de la ducha se asomo a la ventana y se dio cuenta que sus padres estaban junto a todos los kooks, quienes salían a ver sus botes y lo que El huracán Ágatha había hecho con Outer Banks.

Comenzó a Vestirse con un pantalón de lino blanco y un top azul marino, se puso sus tenis y arregló su cabello y rostro. Así que no tuvo más remedio que salir de su casa e ir a ver los desastres.

mientras caminaba y se acercaba cada vez más hacia su destino encontró a Kelce, Topper y Rafe hablando, mientras veían a Sarah haciendo malabares para llegar hacia una lancha, Aimée no entendía el contexto de la situación pero no le tomó tanta importancia y siguió acercándose hacia los chicos.

— Oficialmente eres su perra — escucho las palabras de Rafe hacia su mejor amigo, Topper.

— ¿Te sientes mal por no tener algo así rubio? — dijo Aimée metiéndose en la conversación mientras abrazada a Kelce por detras. - hola moreno guapo.

— Te ves linda — dijo Kelce mientras le devolvía el abrazo a esta.

— Hola Topp y tú — después del súper feliz saludo de Aimée hacia sus amigos, no espero respuesta de ellos y fue directo con la rubia que era su amiga.

— Hola de nuevo. — saludo Sarah al ver como Aimée se acercaba a ella.

— Hola pequeña electrocutada, ¿Qué tal con tu novio pogue? — Ambas chicas empezaron a caminar sin rumbo dijo.

— ¿De que hablas Aim?

— Tu y John B en tu barco, tal vez recuerdes lo de esta mañana — Aimée tenía ganas de burlarse un poco de alguien, y quien más si no era de Sarah. — ¿Acaso tú vieron un poco de sexo en el barco de tu padre Sarah? pequeña pilla.

— De que hablas Aimée, ¡Claro que no!

— Oh pequeña Wheezie entrometida — Aimée cambió el tema al darse cuenta que la hermana menor de Sarah estaba hablando a solas con Topper.

— ¿De que carajos hablas? — la morena apuntó hacia la direccion de Wheezie y Topper.

— Salva a tu hombre, mujer — Aimée se rio un poco y la empujó suavemente para que esta empezara a caminar hacia su hermana y novio.

— ¿Por que eres tan rara? — escuchó la voz del chico por el que tenía sentimiento un poco bipolares y naturalmente volteo los ojos.

— ¿Por que me observas? ¿Acaso de te gusto?

— Te ríes sola, eso es raro.

— Solo me sorprende lo increíble que puedo llegar a ser, creo que es algo que nunca te pasa a ti y entiendo totalmente el porque. — Aimée volteó a verlo, Rafe se encontraba mirándola con la misma cara que siempre tenía ese rubio. — Con permiso, tengo más cosas que hacer que hablar contigo.

Aimée golpeó suavemente el hombro de Rafe con su puño y le brindó una sonrisa para caminar hacia sus padres, su madre se encontraba platicando con Rose muy alegremente y a una distancia considerable veía a su padre con Ward.

Quien diría que mientras los kooks seguían tranquilamente con su vida, los pogues trataban de entender lo que pasó con el padre de John B.