Ya habían pasado dos días, faltaban horas para que Kawaki entrara al quirófano.Me sentía realmente mal por el, más porque comprendía perfectamente su dolor.
En esos dos días no había pasado mucho, eran aburridos, solo me quedaba acostada. Varias veces intenté hablar con Kawaki, pero eran pláticas de menos de 5 minutos. Solo entraban enfermeras para darnos el desayuno y 3 dosis diarias de la medicina para calmar las flores.
Kawaki estaba como de costumbre sentado en su camilla mirando por la ventana.
—Hoy será un día complicado para ti, tu vida cambiará por completo desde ahora.—Comente. Soltó un "tsk".
—Como si fuera muy emotivo, realmente no va a ser muy diferente.
—Una cosa es demostrar y otra sentir, tienes sentimientos Kawaki aunque no lo demuestres, o sino no estarías como estás.
Al momento siguiente entro una enfermera, creí que era para la dosis abitual de medicina, pero no era así.
—Kawaki, tienes una visita.
Tanto yo como Kawaki nos mostramos confundidos. La enfermera se fue para traer a la visita de Kawaki.
—¿Sera Hima o Hinata? Pero ellas no saben de mi enfermedad aún.—No tenía idea quien podría ser.
Cuando llegó la enfermera junto a la visita...Mierda.
—Hola Kawaki.—Miro Sumire al llamado, no podía describir la expresión de el con palabras, estaba sorprendido, asustado, nervioso...Transmitía todo a la vez.
—¿Que haces aquí?—Pregunto con palabras entre cortadas.
—Me enteré de lo que estás pasando, no sabes cuánto lo lamento, quise venir para que sepas que estoy para ti Kawaki, si nesecitas el apoyo de alguien me tienes a mi.—Claramente Sumire no tenía idea de que Kawaki con cada palabra tenía más ganas de entrar al quirófano.
—Sumire...Gracias pero vete.—Le dijo Kawaki sin mirarla a los ojos.
—Entiendo que quieras estar solo pero quiero ofrecerte mi compañía, tal vez pueda hacerte sentir mejo-
—Vete por favor.—No la dejo terminar, Sumire asintió.
—Llamame cuando me nesecites.—Luego Sumire me miró a mi, me sentí confundida, por obvias razones yo también quería que Sumire se marchara.
—Sarada, igual para ti. Últimamente hemos estado distanciadas pero sigo siendo tu amiga quien te acompañara cuando lo nesecites.—Era imposible odiar a un corazón tan noble, le tenía tanta envidia.
—Sumire, ¿Puedo preguntar cómo fue que te enteraste?—Esa era mi mayor duda.
—Boruto me lo dijo.—Al carajo, Boruto se había enterado de mi enfermedad...
—Bueno me retiro.—Sumire se inclino para despedirse y salio de la habitación.
Kawaki empezó a soltar quejidos, note que estaba presionando su pecho con mucha fuerza como si se le fuera a salir el corazón.
—¿Kawaki que te pasa?—Pregunte alarmada.
—Maldita sea...Sumire. Nesecito ir a ese puto quirófano ya.—Kawaki se desespero.
—Calma, no falta mucho para que venga mi madre.—Esperaba que llegará rápido, tenía una sospecha de quién le había contado a Boruto.
Kawaki hacia un esfuerzo para reprimir su dolor, decidí levantarme, vestía una bata blanca con puntos azules. Me sostuve de el tubo donde se sostenía la bolsa de solución salina. Fui saliendo de la habitación, debía hablar con mi madre.
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Que doloroso es el amor | Hanahaki Borusara
FanfictionSarada ha estado enamorada de su mejor amigo Boruto desde siempre pero nunca se lo ha mencionado a nadie, ella sabe que su amiga Sumire también está enamorada de este y eso le molesta pero prefiere no hacer nada, un día descubre que sumire tuvo las...