Capítulo 11 : Buena suerte vs mala suerte

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Kageyama podía oírlos, a los alfas, gruñendo a solo unos metros de distancia, pero no miró hacia atrás en caso de que los viera. No saben dónde estoy . En este momento, solo necesitaba alejarse de ellos lo más posible, así que se adentró más entre la multitud. Simplemente súbete a la primera atracción que veas, simplemente súbete a la primera atracción que veas. ¡Perfecto!

Y justo a tiempo, porque podía oler a Hansuke acercándose. El vagón que tenía delante se había detenido y el siguiente grupo de personas ya estaba subiendo a bordo cuando Kageyama llegó. Los vagones solo tenían capacidad para dos personas a la vez, por lo que la posibilidad de que se quedara atrapado con uno de esos alfas disminuía, pero el omega estaba más que asombrado cuando la pequeña dama de la fila le dijo que era el último en subir.

Ahora Kageyama no sabía si tenía suerte o no porque a pesar de las cosas buenas que estaban sucediendo, todavía estaba en una situación de mierda. Pero se decidió cuando subió al carruaje y vio a Oikawa sentado frente a él.

En el apogeo de todoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora