6. Fuiste tú

91 4 0
                                    

«La rabia y el odio, dos sentimientos que van de la misma mano».

[...]

CAPÍTULO 6.

-Karime Pindter-

Podemos elegir tantas cosas, pero jamás cómo nos vamos a sentir en momentos tan inesperados. Sentía que se me iba a salir el corazón por la boca cuando Gala estaba por besarme. En mi vida he experimentado sentimientos por otras chicas, pero no puedo negar que me atrae lo hermosa que son algunas, por ejemplo, mi mejor amiga. Estuvimos a punto de besarnos, y si no hubiera llegado Mariana estuviera arrepentida porque lo mío no son las chicas, -nunca han sido, ni lo serán-. Estoy segura que Mariana no va a decir nada cuando sabe perfectamente lo que me dijo aquella vez cuando estábamos en preparatoria. Ni en un siglo se va a exponer a que lo sepan.

-Espera, Karime- me detengo cuando escucho la voz de Fer- ¿Adónde tan apurada?

-Al salón, me necesita un profesor- le miento -¿Vienes?

-No, iré a verme con...- hace una pausa y sé perfectamente adónde va -Con el director.

Mentirosa.

-¿Segura?

-¿Dudas de mí?

Me responde con otra pregunta.

-No, solo andas bien rara, como si ocultaras algo, o a alguien.

-Ideas tuyas- me sonríe, dejando ver lo mal que se le da mentir. Maldito Potro -Nos vemos luego, te quiero.

-Yo también a ti, amiga.

Prefiero no seguir diciendo más nada. Hoy casi termino por meter las patas cuando dije que a Luigi no solo le gustaban los negros. Pensé que hablaba mentalmente, pero no. Mis amigos escucharon con claridad cuando abrí mi bocota.

¡Buena esa, Pindter!

Entró al salón. Levantó la mirada cuando escucho un ruido y es donde me doy cuenta que es Potro quien está acompañado de Matteo. Ahora mismo no sé si estaban hablando o follando como dos perros locos.

Me siento en mi silla evitando sus miradas.

-Pindter- miro a Potro que me ha llamado por mi apellido -¿Por qué tan sola, necesitas que un hombre te acompañe?

-¿Dónde está ese hombre? No lo veo por ningún lado- me pongo de pie, quedando a su altura casi. Sí señores soy chaparra... algo, mediana -¿Acaso eres tú ese hombre?

-¿Por qué no?- Se me acerca con intención de besarme y hago mi cara a un lado- Oh, no quieres que te bese, antes me rogabas por un beso.

-Antes, pasado- miro a Matteo que, me ve con media sonrisa -¿Qué me ves, te gusto o se te perdió una igual?

-Largo de aquí- se dirige a su amigo quien sin ojetear sale sin decir algo -Fuiste tú.

-¿Mmm?

-Eras tú quien me espiaba en el supermercado cuando yo estaba con Fer- afirma, sin duda alguna.

-No sé de qué hablas- me hago la desentendida -Te dejo solo y así aclaras tus ideas. Que hasta pena me das.

No alcanzo a llegar a la salida cuando de un jalón me deja contra la puerta y con sus manos sostiene las mías. Si alguien nos ve así pensará que tenemos algo.

-Eras tú quien estaba ese día en el supermercado, cómo no me lo imaginé antes. Pero te diré algo- con su rodilla roza la mía y con voz seductora me susurra -Abres tu boca y me las pagas, ¿entendido?

Amor Prohibido - garimeWhere stories live. Discover now