world of women (volumen 1,2,3,4 y 5

volumen 4-cap 28

—Nos hemos detenido —observé mientras continuaba siguiendo a la joven que se parecía a Charlie.

Desde que entramos al castillo del Señor Demonio, habíamos estado caminando por un largo pasillo. El castillo era extremadamente grande y la información que había obtenido de mi parte de la herencia no contenía ningún registro claro o mapa de este lugar. En el mejor de los casos, tenía una vaga familiaridad con la decoración, pero eso podría haber venido fácilmente del último castillo del señor demonio por el que había caminado.

Hubo un beneficio que noté desde el momento en que entré al castillo. Tenía la sensación de que podía señalar directamente la herencia demoníaca. Mientras me concentraba en esa sensación, comencé a darme cuenta de que sentía una atracción similar a la de Lilith. ¿Estaban las herencias conectadas de alguna manera? Así debe haber sido como Lilith pudo encontrarme. No había podido detectarla antes. Ni siquiera me había dado cuenta de qué buscar hasta que pude sentir la atracción mucho más fuerte de este castillo.

Me pregunté si sería capaz de encontrar la última herencia. Solo podía suponer que cuando el castillo fue enterrado, se volvió inactivo y ella no pudo sentirlo. Una vez que el gobierno lo desenterró, el castillo debe haber comenzado a enviar esta atracción. Si esto era cierto, entonces esto explicaba muchas cosas. Explicaba por qué Lilith había sabido aparecer aquí al mismo tiempo que nosotros. Explicaba cómo los demonios habían sabido dónde buscar la primera mazmorra. Tal vez, si Lilith absorbía la herencia final, las dos juntas la harían más sensible a la última. En ese caso, no tendríamos que depender de la pura suerte para encontrar algún tipo de mapa dentro de esos recuerdos.

Para mí no fue lo mismo. Ahora podía sentir la atracción, pero era porque estaba muy cerca. Si la atracción era tan fuerte, entonces la habría sentido en algún momento cuando estaba en Amarylis. Lo mismo sucedió con Lilith. Habría sentido alguna conexión con ella. Mi extraña disposición debió haber debilitado de alguna manera mi capacidad para detectar esas señales, o tal vez era simplemente que no era bueno en eso. De cualquier manera, no había garantía de que si tomaba esta herencia pudiera detectar fácilmente la última.

—Estamos aquí —me respondió Jenji.

Parecía que el gobierno ya había llegado hasta allí. Había hileras de luces a lo largo de las paredes de piedra que iluminaban el lugar. La mayor parte del color parecía haber desaparecido del castillo con el tiempo, por lo que lo único que podía distinguir era piedra gris.

De vez en cuando, había alguna estatua de alguna bestia o criatura horrible. Protegidos del clima, estos artefactos conservaban más de su forma, y ​​de vez en cuando podía distinguir qué combinación de animales se había utilizado para inspirarlos. Por otra parte, tal vez criaturas como esas habían existido en este mundo durante la era de los demonios. Este mundo tuvo una era distinta en la que los monstruos eran algo real, así que quién puede decir qué existía.

Miré a un gran conjunto de puertas dobles que se abrieron a otra habitación.

"No podemos atravesar esta puerta".

"¿Y?", pregunté, decidiendo hacerme el tonto.

No tuve que actuar demasiado. No tenía ni idea de lo que ella esperaba que yo hiciera. Si ninguno de ellos podía abrir la puerta, ¿qué esperaban que yo hiciera?

—Pon tu mano ahí —dijo, señalando un agujero situado al costado de la puerta.

El agujero era una boca. En el agujero estaba tallado el rostro de una bestia demoníaca, y había que alcanzarla a través de sus afilados dientes. Bueno, los dientes se habían embotado bastante, así que probablemente ahora era más fácil alcanzarla que antes. La miré, pero ella permaneció allí de pie, confiada en que haría lo que me decía. Me pregunté qué pasaría si intentaba derribarla. Era solo una niña. ¿No podría adelantarla?