Salimos a dar una vuelta, el pueblo era bastante turístico y lindo, pero el frío me dio rinitis. Caminamos hasta llegar a un puesto de postres cerca de la iglesia, intenté hacerme la boba, pero fue inútil.
- ¿Quieres fresas con crema hija? - preguntó mí papá -
- ¿No hay mango biche? Es que no quiero comer dulce, porque me mareo - mentí -
- ¿Te mareas? - asentí - bueno, mejor, el azúcar no es Tan buena mí amor.
- lo sé papi...¡Mira! Ahí hay un puesto de mango ¿Me compras uno?
- claro, mira - me dió un billete de 20 -
Fui por mí mango, que es mil veces más saludable que unas fresas con chocolate o con crema.
Volvimos al hotel, porque empezó a llover. Isa y yo quisimos dar una vuelta por el hotel, mientras mis papás se iban a la habitación.
- ¿Será que hay pelados lindos por acá? - preguntó isabella -
- Puros montañeros isita - dije poniendo una mano en su hombro -
Recorrimos el hotel y páramos en un café que quedaba dentro, pedí una limonada y ella un chocolate caliente, hablamos un rato hasta que un chico, alto, pelo negro rizado y muy lindo, la verdad.
Yo se, tengo a mí novio en Medellín esperándome, pero ¿Que tiene de malo tener amigos? El chico me miró y yo le sonreí a lo que el respondió con la misma acción.
- ¡Mariana! Ojo que usted tiene novio amiguita - me dijo Isabella riendo -
- ¿Que? Solo estoy siendo amable, no creo que el man venga para a... - no pude terminar la frase cuando el muchacho fue hacia nosotras -
- ¡Hola! - saludó con una sonrisa -
- ¡Hola! - dijimos Isa y yo al mismo tiempo -
- ¿Cómo van? - preguntó bastante amigable -
- Muy bien ¿Y tú? - le respondí -
- Súper bien - sonrió de nuevo - ¿De dónde son?
- De Medellín - dijo Isabella con simpleza -
- ¡Yo también! Estoy de viaje aquí
- igual nosotras
El celular de Isabella empezó a sonar, supongo que era su mamá. Se levantó de la mesa para contestar la llamada y yo me quedé sola con el man.
- usted está muy linda - dijo de una forma un lanzada -
- muchas gracias - sonreí sin mostrar los dientes -
- ¿Será que tiene novio? - dijo de una manera muy coqueta -
- Cómo le parece que si - dije en el mismo tono con el que el me habló -
- ¿Ah sí? - dijo más coqueto aún -
- Si ¿Algún problema? - volví a decir con ese tonito tan espantoso -
Sentí sonar mí celular ¡Si! Era Sebastián, contesté y lo puse en altavoz para que el man escuchara.
- ¿Alo?
- Hola mí vida - dijo él -
¡La cara que hizo el pelado fue demasiado chistosa!
- Hola mí amor - dije mirando al Man
- ¿Cómo te va por allá?
- Lo más de bien, pero hace un frío
- Ah sí, allá es Tierra fría
- Te extraño - le dije -
- Yo más, pero nos vemos el lunes
- Falta mucho
- Si, pero nos estamos hablando ¿Bueno?
- obvio
- Nos vemos linda, te quiero
- yo más - sonreí y colgué -
De verdad, la cara que hizo fue muy graciosa, se bajó de la nube en 5 segundos.
- ¿Que me decía? - le dije llendo el celular en entre mí abdomen y mí pantalón -
- Que lástima que tiene novio
- Bien por mí ¿No? - dije cortante -
¿Por qué no me iba de ahí? No lo sé, me daba risa el comportamiento del chico, eso le pasa por lanzado.
- ¿Y el novio la deja tener amigos?
- El no me controla, yo miraré si quiero amigos o no
- Si quiere podemos ser amigos - dijo amablemente -
- Esta bien, si quiere hablamos por instagram o no sé
- que pena, no le pregunté su nombre
- Mariana - dije con una leve sonrisa -
- Mí nombre es Santiago - asentí -
- un gusto
En ese momento Isabella me salvó la vida
- Isa ¿Vamos a la habitación? - le suplique disimuladamente -
- Sí, Vamos
- ¿Tan rápido se aburrió de mí? - dijo el fingiendo indignación -
- Me tengo que ir, hasta luego.
Pagamos y subimos al ascensor
- ¡Que Man tan cansón! - suspiré -
- ¿Que te estaba diciendo?
- que sí yo tenía novio, que yo tan linda y eso - dije molesta -
- pero usted tiene novio
- ¡Por eso! Eso le dije, es más, justamente me llamó Sebastián y al Man le tocó escuchar toda la conversación con mí novio
- muy bueno, me parece
- es que tan lanzado, así de una llega y se pone de coqueto y no gracias
Fue incómodo el momento, gracias a Dios no alcancé a darle mí ig o mí número, sino, ¿Quien se lo aguanta?
¿Saben algo? Desde que empecé a bajar de peso, los niños me miran más, cosa que no hacían antes, puede llegar a Ser molesto, pero así me doy cuenta de que cada vez me veo mejor.
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Primeras Veces
Teen FictionEsta es la historia de Mariana, una chica de 16 años, que lucha día a día con sus trastornos alimenticios, encuentra el amor de su vida, pero, por su enfermedad no la deja ser feliz y tener una relación estable. Su vida va a estar llena de primeras...