Nuestro Reencuentro

CAPITULO 54

Mientras que Brian y Tim se tomaban su tiempo, los otros dos pensaban qué hacer durante su ausencia y el destructivo aburrimiento que se estaba apoderando de sus mentes 

Tobías- ¿Crees que se tomen demasiado tiempo? 

Sarah- muy seguramente, es la primera vez que hacen eso juntos. Se van a tardar un muy buen rato, si le sumamos los besos y las caricias que se van a dar, podemos decir que tienen una hora y media fácil 

Tobías- no jodas, es muy, mucho tiempo... pero que lo disfruten, se lo súper merecen después de todo lo que pasaron para estar juntos. ¿Verdad? 

Sarah- sip, pero ahora tenemos que pensar en nosotros. ¿Qué podemos hacer mientras esos dos cogen? 

Tobías- no lo digas así, tonta!! No se supone que usemos esas palabras en la casa del homofóbico más grande de la historia 

Sarah- en vez de estar escuchando conversaciones ajenas, debería estarle chupando la verga a alguno de sus rivales para que se den de baja... desgraciado 

La muchacha se levantó de su silla y se dispuso a salir a caminar, por lo cual Tobías la siguió para acompañarla y platicar un rato. Después de todo, ya llevaban tiempo sin enfocarse en ellos, necesitaban decir su punto de vista en algunos aspectos. No es que puedan hablar con el caballero o con Hood, estos estaban pasando por mucho estrés y requerían tranquilidad. Así que por el momento, solo se tenían el uno al otro 

Platicaron un poco de cómo se sentían y de cómo la estaban pasando en la mansión Thomas, en lo que ambos concordaron que no era lo que esperaban. Cuando encontraron una banca, tomaron asiento para descansar un poco sus pies y para poder hablar con más comodidad. Tobías no quería arruinar el momento tranquilo que estaban teniendo, pero quería preguntarle algo desde hace ya mucho tiempo 

Tobías- Sarah, ¿Te puedo preguntar algo? 

Sarah- claro, no veo el por qué no lo respondería 

Tobías- bueno, durante estos días estuve pensando mucho, y me di cuenta de que ya casi no hablamos. Quería preguntarte cómo estabas, cómo te sentías con todo esto que nos estaba pasando... pero lo que pasa es que ya no me respondes los mensajes, y a veces siento que no estás bien. No quiero parecer chismoso, solo quiero saber si te sientes bien 

Sarah guardó silencio unos segundos, por más que supiese la respuesta a esa pregunta, no quería decirla. El único desperfecto en su técnica eran sus ojos a punto de desbordarse, porque siempre podemos mentir con las palabras o las expresiones faciales, pero los ojos son la fuente de verdad más grande que tienen las personas. Son lo único puro que conserva la raza humana, lo único que no puede engañar con tanta facilidad. Tobías notó eso, y le ofreció un abrazo a su amiga para que se sintiera mejor. Ella le dijo todo lo que pensaba, cómo se sentía con respecto a la situación en la que estaba y qué opinaba de todo, mientras que él solo la escuchaba y consolaba 

Estaba bien que la pareja se tome un tiempo para ser felices y demás, pero no a costas de la estabilidad del resto, no era algo racional en lo absoluto. Ahora podemos juzgar con un panorama completo, sabemos que la pareja está teniendo unas bonitas vacaciones, pero sus amigos no la están pasando bien. No es justo que algunos disfruten de los lujos y obliguen al resto a quedarse, por eso sacarían boletos de vuelta a su hogar. Aunque les pidan que se queden, ese no es su lugar... no tenían rencores y tampoco estaban enojados, solo estaban agotados de soportar esas tensiones familiares que no iban hacia ellos, estaban agotados de escuchar los lamentos de todos 

Después de esa plática tuvieron una linda tarde juntos, pero sintieron que fue demasiado corta. Visitaron una pequeña feria local y muchos puestos de comida, Sarah tomó como albañil de barrio y Tobi solo observaba como su amiga tomaba de forma excesiva. En cambio, Tobías solo se pidió un licuado de banana y frutilla, mientras disfrutaba un waffle con miel de maple