NARRA CHRISTOPHER
Me sentí aliviado al ver que Emily estaba bien. La tomé del brazo y nos fuimos de allí.
Chris: ¿Estás bien?
Emily asintió.
Emily: Sí, gracias.
Me sentí protector hacia ella.
Chris: No hay problema. No dejaré que nadie te lastime.
Llegamos arriba y nos sentamos con los demás.
Mia se preocupó.
Mia: Emily, ¿qué pasó?
Emily sonrió.
Emily: Nada, solo Harrison siendo su usual idiota.
Oliver se enfureció.
Oliver: Lo voy a matar.
Emily se rió.
Emily: No, Oliver. No es necesario.
Me sentí agradecido hacia ella por calmar la situación.
Chris: ¿Quieres bailar conmigo?
Emily sonrió.
Emily: Me encantaría.
Nos fuimos a la pista de baile y comenzamos a bailar. Me sentí conectado con ella.
NARRA EMILY
Mientras bailábamos, sentí una conexión con Christopher. Era como si conociera su alma.
Emily: ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre?
Chris sonrió.
Chris: Me gusta jugar baloncesto y pasar tiempo con mi familia.
Me sentí emocionada.
Emily: ¡A mí también me gusta el baloncesto!
Chris se rió.
Chris: ¿De verdad?
Emily asintió.
Emily: Sí. Mi hermano juega en el equipo de la escuela. Así que me gusta
Chris se sorprendió.
Chris: ¿pero juegas?
sonrió.
Emily: pues no, pero soy la animadora
Chris: eso es genial
NARRA ALEX
Veía a Chris bailar con Emily y sentía frustración y celos, todos podían hacer lo que yo quería hacer.....ni siquiera defenderla de Harrison pude
Oliver: estas bien?
Alex: no me siento bien, me iré a casa
Oliver: noo, no puedes ir solo, Emily tiene ensayo mañana y ya son las 2, seguro quera ir a dormir, ve con ella y quédense en casa
Alex: seguro? Se ve muy alegre con Chris
Oliver: pues si, pero sabes que para ella primero son sus ensayos
NARRA CHRISTOPHER
Seguimos bailando y riendo juntos. Me sentí como si hubiera encontrado una conexión especial con Emily.
Chris: ¿Te gustaría ir a un partido de baloncesto conmigo?
Emily sonrió.
Emily: Me encantaría.
De repente, Alex se acercó.
Alex: Emily, Oliver dice que es hora de irse.
Emily miró su reloj.
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Un amor inesperado
RomansEn un mundo donde la realidad parecía separarlos, dos almas gemelas latían al unísono, sin saber que su destino estaba inexorablemente entrelazado. Christopher Ryder, un joven soñador con un corazón apasionado, había idealizado a la mujer perfecta...