XI

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- Mami, mami – se retorcía en el regazo de su padre

- Tu mami no esta – toco la nariz de su pequeño – ven a dormir

- Ño – se cruzo de brazos – Mami mami

Soo Hyuk se rio por aquella acción de su pequeño.

- Emisario Hwang, aun falta a que mueran – reviso la hoja – Lee Soo Hyuk morirá cuando tenga 50 y Lee Chan – reviso la hoja – Aún le falta mucho ¿entonces a quien escoltaras? – ladeo su cabeza

- ¿Ryeon Noh? – leyó una de las hojas – morirá en una hora por causas naturales – solto aire – esta noche es triste – miro hacia arriba –

- ¿Por qué la escoltara usted? Yo podria hacerlo

- Por que Noh Ryeon, era mi madre en su vida pasada – finalmente la miro – Quiero escoltarla

- Oh – agacho su cabeza – Lo dejare solo – hizo una leve reverencia

- Nos vemos despues

El emisario camino lento por aquellos pasillos, teniendo consigo una carpeta negra, muy pronto la lluvia apareció dejando los pasillos solos, tan solo el buscando a su alma. Miro hacia su lado izquierdo viendo a la señora Noh con una mano extendida tocando el agua haciendo que le sacara una sonrisa, al emisario sintió un monton de emociones recordando a su madre jugar con el debajo de la lluvia, coloco sus manos en sus bolsillos para aproximarse a aquella persona.

- Buenas noches – hizo una reverencia lenta pero con respeto –

- ¿Quién es usted? – revisando la vestimenta del chico algo rara –

- Soy un Emisario

- Moriré hoy ¿No es así? – rio un poco – soy algo vieja y estoy cansada ¿Dolerá?

- No – negó con su cabeza – es como si se quedara dormida, después de eso la escoltare hacia el mas alla

- Que bien – sonrio – tal vez podría despedirme de alguien

- Si tiene una hora – reviso su reloj – la esperare aquí – hizo una corta reverencia.

La señora Noh camino lejos de él, no le temía a la muerte, sabía que iba a morir pronto. Suspiro al encontrarse en los aposentos del Rey Soo Hyuk, lo había criado desde pequeño como si fuera su propio hijo, le vistió y le enseño a caminar, le dio consejos y lo regañaba.

- ¿Señora Noh? – Soo Hyuk le miro con duda –

- Joven Soo Hyuk – sonrió – le quería ver

- Ohh – rio un poco – Lo podrías a ver hecho mañana, debería dormir – sugirió –

- Si eso debí hacer – se le escapo una risa – Joven

- ¿Si? – la miro gentilmente

- Nunca cambie, cuídese mucho – sonrió mientras se acercaba a el – Sea mas gentil con su reina

- ¿Señora noh se encuentra bien? – le tomo la mano

- Si me encuentro bien – sonrio – solo hazme caso, prométamelo

- Esta bien

- Pero le digo enserio, será mas gentil con ella – amenazo sin soltarle la mano

- Ay duele – se quejo por el apretón que le daba – si, si, lo hare – el contrario le soltó la mano – pero que fuerte – hizo puchero – duérmase y así se volverá mas fuerte

- Joven – le llamo nuevamente para tomarlo en brazos y sobarle la espalda con gentileza – Sea sano – cerro sus ojos con fuerza de no llorar – Buenas noches

SooHyuk no respondio por el sorpresivo abrazo de la señora, solo se limitó a corresponderle, se separaron vio la espalda de la señora Noh alejarse lentamente, hasta que las puertas se cerraron.

- Ryeon – llamo el emisario – Ya es hora

- El tiempo pasa rápido – rio al cerrar las puertas de los aposentos de soonyoung, se había despedido de los hijos de Soo Hyuk cuando estaban dormidos, con un beso y lindo buenas noches – Me falto a la reina

- Lo se.

- Ire a mis aposentos – dicho esto se dirigio a sus aposentos mas despacio que lo normal, al entrar vio su cama tendida, sonrio – estoy cansada.

- Le esperare aquí – dijo dándole la espalda mientras que la puerta se encontraba se cerraba

- Buenas noches, mis príncipes, mi reina y Joven Soo Hyuk. – sonrio mientras cerraba sus ojos derramando una gota de lagrima.

El emisario vio el reloj apuntando que ya era hora, suspiro incorporándose mejor, escucho la puerta abriéndose, viendo a la señora salir de esta.

- ¿Vamos? – le sugirió la señora –

- Claro – le extendió el brazo para que esta lo enganchara con el de ella –

- Me gusta caminar

- A mi igual

Ahora era su alma la que caminaba con el emisario Hwang.

 - Que hermoso – dijo la señora Noh al ver el camino de flores –

- Hasta aquí llegue yo – el emisario se detuvo – allí esta la puerta

- Oh – agacho su cabeza – nos veremos algún dia

- Si reencarna la vere – sonrio – ahora ve

- Esta bien – abrió la manija de la puerta – Adios.





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𝕸𝖞 𝕼𝖚𝖊𝖊𝖓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora