¡Pecas!¹ - Minsung

Capítulo 01

— Terminamos — la omega jadeo en sorpresa, apenas lo había saludado y salió con tal frase.

— ¿Disculpa? — preguntó confundida.

Lee suspiro y siguió caminando, escuchando a sus espaldas como aquella omega le seguía hablando.

Se preguntaran, ¿Por qué Minho decidió terminar con su novia? Bueno, la respuesta de simple: se había cansado. Minho no era de durar en sus relaciones y cuando tenía la oportunidad, las acababa, por simple que sonará, era cierto.

Aunque en el fondo, había una razón más profunda por la cual esa decisión llegó a su
azulada cabeza.

Una vez estuviera lejos de la zona, entro a la cancha de fútbol, donde sus amigos estaban en un partido amistoso. Se sentó en las gradas dejando su bolso a un lado, y un amistoso Seungmin le salto encima, haciendo gruñir a Lee.

— ¡Minho! Dios tenía tiempo sin verte por aquí — comento el omega alegre. Minho lo miró mal.

— Tu eres una de las razones por la que siempre falto — fue sincero, y aunque fuera rudo, Kim ya estaba acostumbrado, haciéndolo reír un poco. Teniendo como respuesta un fruncido de ceño de Lee.

— También te extrañe, hyung.

El peliazul hizo una mueca y miró al frente, Seungmin le comenzó a contar de su día y los anteriores a los que él no vino. Minho fingía que no escuchaba pero estaba un poco atento, solo un poco.

— ¡Ah! Y supuestamente habrá un nuevo ingreso en la institución. Un omega, como te gustan Minho — bromeo el rubio.

— No gracias, soy más de las omegas — comentó, recalcando el "las". — Además, ¿por qué me importaría?

— ¿Terminaste con Yuna, no? — Minho asintió — Por eso mismo, hyung. Ya estás otra vez soltero, muchas y muchos omegas querría estar contigo... aunque te temen. — Lo último salió más en un suspiro.

Minho sonrió satisfecho, tenía razón, a pesar de su atractivo visual, varios omegas le tenían miedo por su actitud tan friolenta. Ningún omega a intentado hablarle por lo mismo.

— No estoy interesado. — repitió.

***

El omega de pecas bajo apresurado del auto. Arreglo su despeinado cabello y miró la entrada de la institución, era su primer día y sentía que iba tarde. Comenzó a apurarse para adentrarse a la antigua estructura. Varios alfas, omegas y betas, caminaban por la institución unos que otros lo veían pero Jisung solo miraba su hoja con el nombre de un chico.

¿Acaso el sabrá que lo estoy buscando? Pensó el castaño.

Sus pasos eran apresurados y su mente estaba sumergida en como debía presentarse ante tal chico. Por su torpeza choco con una dura espalda, haciendo que sus libros se caigan.

Genial, Jisung. Primer día y pasando pena. Pensó el omega.

— L-Lo siento — pronunció con dificultad. Su coreano no era tan bueno como recordaba.

Se había agachado a recoger sus cosas de una vez, viendo como otra persona enfrente se había agachado a ayudarlo.

— No te preocupes — habló con dulzura un chico, supo que era omega por su agradable olor, aunque no era el olor que sintió cuando choco. Ambos se levantaron luego de qué Jisung tuviera sus libros en mano. — Soy Seungmin, por cierto.

— Soy Jisung, Han Jisung — se presentó. Ampliando su vista al grupo qué estaba detrás del omega.

Sus ojos pararon cuando vi a un chico de cabello azul qué lo miraba raro, ¿Acaso lo estaba mirando de arriba a abajo?

— Ohhh, ¿eres el nuevo ingreso? — preguntó el rubio omega. Jisung asintió dejando de ver al chico peliazul.

— Sí... soy de intercambio. — sonrió amable, estaba algo nervioso, pero no podía parar de ver el cabello de aquel chico.

Es lindo, me gusta Pensó su omega.

Minho lo miraba mal, ¿por qué lo veía tanto? ¿Acaso esperaba un saludo? Y ¿que es eso en sus mejillas, pecas? Son feas. El peliazul suspiro fastidiado llamando la atención de la mayoría del grupo.

— ¿Sabes donde puedo encontrar a... — Él castaño, busco en sus manos la hoja para leer el nombre — ¿Lee Minho?

Los chicos rieron un poco y Lee al escuchar su nombre, maldijo en sus adentros. Eso solo sería idea de su tía. Kim lo miró sorprendido pero decidió hablar.

— Sí, de echo es él. — había señalado a Minho y Jisung casi no sonreía más amplio por ver que era el chico que le llamó la atención. — Minho, creo que tendrás que acompañar a Jisung a la dirección.

Jisung no podría estar más que emocionado, cuando comenzó a seguir al alto chico podría sentir que su cola se movía de felicidad.

Por otro lado, Minho inventaba un nuevo idioma al insultar a su tía. Sabía que esto era obra de ella, jamás lo elegían para estás cosas, pero bastaba con que terminar con su novia para que le haga esto.

***

— Ahm, Minho — Jisung sentía que estaba trotando al tratar de seguir el paso del mayor, sus piernas eran más cortar y Minho estaba caminando muy rápido.

— ¿Qué?

— ¿Podría caminar menos rápido? No logró alcanzarlo. — habló algo tímido al tener la mirada fija del mayor en él.

Minho lo vio de de cabeza a pies, a pesar de cargar el mismo uniforme, se veía diminuto ante él, podía saber que era un omega y no por que Seungmin le dijo, sino por que olía a fresas con crema. Minho paro de caminar y lo volteó a ver.

Jisung, lo mira un poco desde abajo, con una pequeña sonrisa y sus pecas por la luz, brillaban más.

No, definitivamente no iba a llevarlo.

— Sigue de largo, luego cruzas a la derecha y estará la dirección — comentó para darse media vuelta caminar a sentido contrario.

Jisung lo miró confundido — ¿Qué? Hy-hyung..! — lo tomó del brazo para detenerlo. Minho se tenso al sentir su mano sobre él, lo miró mal. Jisung lo soltó suave. — No lo entendí nada, lo siento.

Debe ser una broma, pensó Lee.

— ¿Acaso no hablas coreano? — preguntó de mala gana. Jisung río avergonzado.

— Solo un poco, no es mi lengua principal.

Minho suspiró esta vez con fastidio y comenzó a caminar tomando de la muñeca al omega, obligandolo a caminar.

Luego de unos segundos en silencio, Jisung habló: — Hyung... ¿Puedo decirle algo?

Minho lo miró de reojo, tenía un perfil horroroso, para no decir que le pareció lindo. Su mirada bajo a su mano sujetando su muñeca, la soltó al percatarse de eso.

— ¿Ahora que?

— Bueno... no se si lo han dicho antes pero, — tomo una pausa para verlo — me parece muy tierno como frunce el ceño cuando esta molesto.

Minho quiso empujarlo, ¿como se atrevía a decirle tierno? Él era el alfa más temible de la escuela. No el "chico tierno" ¿que le pasaba a este chico?.

— ¡Oh! Y su cabello es muy lindo.

Minho jadeo en decepción, mirándolo, preguntándose qué le pasaba por su cabeza, ¿Acaso de donde venía no le enseñaron a callarse?