3 y media semanas después
El ambiente del bar/café estaba lleno de murmullos y risas, las luces suaves que parpadeaban sobre el escenario creaban una atmósfera casi íntima. A lo lejos, la banda ajustaba sus instrumentos mientras yo intentaba concentrarme en la conversación con los chicos. Pero, como siempre, Nick estaba pegado a mí, esta vez comportándose como un niño que no había encontrado otro entretenimiento que no fueran mis brazos.
—Boop, boop, boop — decía con esa voz juguetona, mientras sus dedos golpeaban mis antebrazos de manera repetida. Cada toque era suave, pero a estas alturas del día, mis músculos estaban demasiado adoloridos por el entrenamiento como para soportarlo mucho más.
—Nick, ya basta — le dije en un tono entre resignado y divertido. Me duelen los músculos,
Llevas haciendo esto todo el día. —
Nick, fiel a su estilo, negó con la cabeza mientras seguía tocando mi brazo, sin ninguna intención de detenerse.
—Nope, boop, boop, boop — respondió con una sonrisa, completamente inmerso en su pequeño juego.
Trent, que había estado observando la escena con una mezcla de diversión y algo de frustración, finalmente intervino.
—Nos toca, Nick. Deja de jugar y vamos al escenario.
Nick soltó un suspiro exagerado, como si le estuvieran pidiendo un sacrificio monumental. Se levantó lentamente del asiento, arrastrando los pies como si el peso del mundo estuviera sobre él.
Su cabeza estaba gacha, con los hombros caídos, y mientras caminaba hacia el escenario, fingía estar completamente ofendido, como si acabara de recibir la peor de las noticias.
Era obvio que estaba actuando, porque incluso en su aparente tristeza, echaba miradas de reojo, esperando una reacción de mi parte. Quería atención.
Solté un largo suspiro, sabiendo exactamente cómo hacerlo volver a la acción.
—Nick... si la canción sale bien, puedes hacerlo toda la noche si quieres — le dije, sabiendo que ese era el empujón que necesitaba.
El cambio en su postura fue inmediato. Nick, quien un segundo antes estaba arrastrando los pies como un alma en pena, se erguió por completo. Su cola, que había estado caída y floja, se puso rígida en una postura de entusiasmo. Y sin decir una palabra, caminó con una determinación repentina hacia el escenario, como si hubiera recibido una inyección de pura motivación.
—Vaya que lo tienes bien domado, Anon — dijo LJ, que se había sentado a mi lado, observando la escena con una sonrisa burlona en sus labios.
Me encogí de hombros, fingiendo indiferencia, pero sabiendo bien que era cierto. Había aprendido a leer a Nick. No era solo un dino fuerte, con una fachada de dureza. Había algo más profundo en él, algo que pocos parecían entender o notar.
—Una vez lo conoces y sabes qué botones oprimir... — respondí con una leve sonrisa, tratando de sonar casual.
LJ soltó una risa cálida, cargada de nostalgia.
—Como extraño ser joven — dijo, mirando a Nick mientras subía al escenario con una mezcla de diversión y ternura—. Nick ha cambiado mucho en tan poco tiempo.
Esas palabras me sorprendieron. Aunque sabía que Nick estaba pasando por algo complicado, hasta ese momento no había entendido realmente lo profundo del cambio que había experimentado en los últimos meses.
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My blue scaled Nick
RomanceLa historia inicia con Anon eligiendo sus materias, evitando que Naomi pudiera meter mano y usado en sus planes, ocasionando un efecto mariposa que provocara que Anon conozca y se una a otro grupo de amigos, provocando nuevas interacciones y un nuev...