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"Siempre me preguntaré si sabías que estaba encantada de conocerte" - Enchanted, Taylor Swift


Al fin habían terminado de desempacar. Había sido una larga jornada de mudanza, Margarita y Pipe habían quedado completamente agotados. En sus dieciocho años de vida nunca habían tenido que mudarse, pero estaba bien, esto era lo que ellos querían ahora para sus vidas.

Eran los últimos días de enero, en diciembre los trillizos habían terminado el colegio y querían poder empezar vidas independientes. Margarita y Pipe querían empezar a estudiar, el tercero de ellos se encontraba viajando por el mundo.

Siendo completamente honestos, podrían haberse quedado en su casa y seguir estudiando, solo se habían mudado a una hora de distancia de sus padres. Pero, con todo el amor que les tienen, creían que era su momento de encontrar quienes eran sin ellos y empezar un camino a la independencia.

Por suerte, habían encontrado un lugar muy lindo. Contaba con cocina y living unidos, pero dos habitaciones con sus respectivos baños. Era suficiente para poder seguir compartiendo momentos juntos, como lo habían hecho siempre, pero si se cansaban tenían sus espacios privados. Tenían una mesa de comedor heredada, pero sabían muy bien que casi todas sus comidas iban a suceder en la mesita ratona al frente del televisor.

- Bueno, ya todas mis cosas tienen su lugar – comentó Margarita saliendo de su habitación. Pipe había terminado hace rato de acomodar y descansaba en el sillón – Tendríamos que ver que se puede cenar...

Cuando estaba terminando de armar su oración, tocaron el timbre. Raro, no esperaban a nadie, no conocían a nadie todavía.

Al abrir la puerta, los esperaba detrás de ella una chica de su edad.

- Hola! Me llamo Daisy, me mudé hace dos días. Todavía no había visto a nadie de mi edad y los vi subiendo sus cosas en la mudanza. Estoy viviendo aquí al frente, qué lindo conocerlos! Tenía miedo de que solo fuera un edificio lleno de gente grande, jajaja – se notaba que estaba nerviosa, y quien la culpa! No es tarea fácil conocer a tus vecinos, por suerte conoció a los hermanos más divertidos que pueden haber

- Ayyy, hola! – exclamó Margarita, mientras se acercaba a darle un abrazo – Yo soy Margarita, él es mi hermano Pipe. Qué hermoso conocer gente de nuestra edad por acá! Nosotros recién terminamos de acomodar todo lo de nuestra mudanza, vamos a ser grandes amigos! Justo íbamos a ver de cenar algo, querés comer con nosotros?

- Siii, me encantaría! Deben estar cansados del día de hoy, vi un lugar de pizzas en la esquina que podríamos probar.

Es así como caminaron a buscar comida. La química entre las Margaritas fue instantánea, como si se conocieran de toda la vida. Pipe se mantenía más callado, porque su hermana ocupada todos los espacios de silencio y... Daisy un poco nervioso lo ponía. Margarita y su intuición de trilliza tardaron poco en darse cuenta de la situación, de a poco iba a buscar como ayudar a su hermano.

Ya volviendo, Pipe logró soltarse un poco más y la conversación comenzó a fluir.

Los hermanos estaban muy felices de haber hecho su primer amiga, y más aun siendo que era su vecina. Descubrieron que tenían mucho en común, principalmente que habían crecido viendo todas las novelas de Cris Morena. Entonces, al llegar al departamento, se acomodaron en la mesita ratona para comer y escuchar los mejores hits de las novelas.

- Y que van a estudiar? Creo que hablamos de todo menos de eso, jajaja – preguntó Daisy.

- Mar empieza Letras la próxima semana, y yo Gastronomía.

- Que hermoso! Yo empiezo la semana que viene Psicología y el sábado empiezo a trabajar – Daisy no sonaba muy alegre con lo último – pero bueno, quiero comenzar a tener más independencia con mis gastos.

- Sii, yo también quiero empezar a tener mi propio dinero. Voy a tener las tardes libres, entonces voy a ver si consigo algún trabajo para después del horario de cursada. Así que si ven algún trabajo me avisan! – comentó Mar.

- Como será el destino Mar, todavía están buscando una mesera más para el café! Ya le escribo a mis jefes para que te tomen una entrevista, vamos a trabajar juntas!!! – la idea de ser compañeras le dio emoción a Daisy de empezar a trabajar.

La charla continuó por un par de horas más. Llegando las 2am, a los hermanos se le empezaron a cerrar los ojos. Había sido un día largo.

Daisy se despidió de ambos y cruzó a su departamento. Margarita y Pipe terminaron de levantar todo lo que había quedado de la cena.

- La verdad que es muy divertida Daisy – dijo Pipe.

- Ay si hermanito! No le podías sacar la mirada de encima jajaja.

- Shhh, no sé de qué estás hablando Mar – dijo su hermano desentendiéndose completamente de la situación y apurando a irse a dormir antes de que su hermana siguiera con el interrogatorio.

Margarita amaba las historias de amor en todos sus colores y formas. Desde la más simple, hasta la más épica. Los libros de romance y las canciones de amor más bellas de Taylor Swift eran su debilidad. Por eso, siempre estaba buscando alguna nueva para presenciar o escuchar. Todavía no había vivido una ella, pero siempre estaba segura de que la suya la esperaba a la vuelta de la esquina.

Mucho, Poquito o NadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora