Placer y tormento ©️[En Proceso] +18

Capítulo 12 🎪

Capítulo 12:

  Llevaba semanas sin visitar el lugar pactado con el espíritu. Comenzaba a ver mis arrugas, lo estoy perdiendo todo, no me importa entregar corazones e intestinos.

—Eugenio...— llamó.

—Amigo mío, llevaba tiempo sin darte de comer— comenté abriendo el nailon negro—. Mira lo que tengo para tí.

—Sí, eres un excelente esclavo.

—¿Entonces?

—No te preocupes, cuando dobles esa esquina verás los resultados.

—Debo agradecerte, siempre he vivido agradecido — su tono fue bajando.

—Odio tus excusas, aún sigo queriendo el alma de tus hijas.

—Todos menos eso... Por favor— te lo suplico.

—Los resultados serían mejores, incluso te librarás de mí.

—Prefiero ver mis canas antes que entregar a mis hijas... Lo siento.

...Narra la autora...

Flora y Kunal se preparaban para atrapar al traidor. Está vez no van a usar una persona, sino un animal, van a sacrificar un león viejo que tiene el circo.

—¿Cuál es el plan?— preguntó Flora curiosa.

—La persona que nos vio seguramente espera que nosotros actuemos, debe estar al tanto de nuestros pasos. Propongo que... escuchame...vamos a pasar cerca de todos los miembros y solo uno nos va a perseguir.

—¿Entonces?— continuó ella.

—Dejame terminar, Por favor. Yo voy a seguir el camino y tú te vas a esconder de una manera que puedas ver sí alguien me persigue.

—Ahora quiero que escuches mi propuesta.

—¡Suéltala!—ordenó.

—¿Qué te parece si le hacemos morir en su propio acto?

—Interesante... pero no podemos tomar decisiones sin Eugenio.

Flora se escondió en un árbol, Kunal fue en busca del animal que fue sacrificado. Desde un principio ella sabía quien era, lo leyó entre las cartas, pero quería asegurarse de que sus sospechas eran ciertas. Kunal iba con el animal en su lomo de una forma misteriosa, quería llamar la atención del "pequeño héroe". Todos estaban reunidos en grupo, Isaac miró a Sasha, ella se veía aterrada mientras apretaba sus manos y suspiraba agitada.

Jorge fue el único que mordió el anzuelo y persiguió a Kunal sigilosamente. Su ubicación siempre fue discreta,aún así Flora pudo vislumbrarle. Cuando Jorge vió al león suspiró aliviado, creía que era el cadáver de una persona. Sin embargo, un escalofrío recorrió su espinazo y su piel tomó una temperatura baja.

—¿Qué haces aquí?— sorprendió Patricia.

Jorge pegó un brinco, ella solo le regaló una sonrisa burlona.

—¿Qué hace Kunal?— preguntó confusa.

—Creo que está soltando un león muerto— soltó nervioso.

—Como a Carlos— murmuró Patricia.

—¿Qué?

—Nada, solo fue una estupidez.

Jorge tomó del brazo a Patricia y le agitó un poco.

—¿Entonces no soy el único que presencio su crimen?—dijo Jorge mirándole a los ojos.

—No, yo iba a encontrarme con el maestro de ceremonia y vi como ellos salían, supe que era Carlos cuando se encontró su cuerpo o bueno, esas fueron mis sospechas.