•Contrato de matrimonio• (YiZhan)

Capitulo 13

Al ser besado así de la nada confundió al ser entero de Xiao Zhan, su única respuesta fue
ampliar sus ojos y mirar boquiabierto la proximidad entre él y Wang Yibo.
Wang Yibo presionó sus labios castamente sobre los del hombre más joven sin profundizar más, simplemente manteniéndolos apretados contra los del chico. Sin embargo, ese simple toque
desencadenó un estruendoso golpe en el corazón del joven y su mente se encendió así misma.
Una forma de intimidad sin precedentes, para él, sintió como una mano que se extendía hacia adentro, rasgaba su caparazón protector para agitar su corazón.
El hombre acarició suavemente los labios de Xiao Zhan antes de retirarse, luego arrojó el
pequeño libro de nuevo a las manos abiertas del muchacho. Echando un vistazo al otro,  todavía atascado en su aturdimiento y dijo: "Como había dicho, mi sello."
BANG---
Esas palabras actuaron como un interruptor, sacando a Xiao Zhan de su estado de
estupefacción, además de obligar a su rostro a quedar cubierto de sonrojo. Al darse cuenta de que estaba cara a cara con ese hombre, giró la cabeza hacia la ventana que daba al exterior.
"Pollo. [1]" bromeó Wang Yibo.
En esa fracción de segundo, Xiao Zhan, inseguro de si se debió a un estallido de coraje surgido
de la rabia [3] que brotaba en lo profundo de su interior, volteó su cabeza hacia la dirección de Wang Yibo y frunció los labios con una inquebrantable mirada fulminante dirigida hacia el otro hombre.

Wang Yibo, en respuesta a la acción del hombre más joven, preguntó con sorpresa: "¿Por qué no estás diciendo nada todavía? ¿Sigues tan enfadado?"
Tocó esos labios suaves. Wang Yibo aún carecía de alguna apariencia, incluso cuando Xiao Zhan se retiró para retomar su postura anterior y mirar más allá de la ventana del auto. Con él sentado en una posición así, Wang Yibo no pudo ver correctamente su expresión, solo logró ver su cuello originalmente pálido, ahora parecía como si estuviera manchado de sangre por lo rojo
que se había vuelto.
¿Xiao Zhan lo había besado? ¡¿Le había besado por su propia voluntad?!
Cuando esa comprensión finalmente golpeó a Wang Yibo, un choque de electricidad se
extendió rápidamente desde sus oídos, dejándole en un estado de total saciedad [4], sus labios aún hormigueaban con un poco de dolor de donde Xiao Zhan había chocado con él. Ahora miraba intensamente las orejas enrojecidas del chico, hasta el punto en que casi podía imaginar lo suaves que parecían ser, completamente incapaz de detener su mano cuando se extendía para
tocar los lóbulos enrojecidos. Pero, justo cuando su brazo colgaba extendido, el fuerte sonido de una bocina lo interrumpió.
El semáforo se había puesto verde.
"...Maldición, resulta que eres más que un tigre, ¿eh? [2]"Al final, solo Wang Yibo puede decir tales palabras con tal resolución.

Aún emocionado por las acciones del hombre no hace mucho tiempo, el cerebro de Xiao Zhan estaba en llamas y después de lo que él mismo había hecho, se sintió absolutamente tonto. Su corazón también se había convertido en un pequeño volcán en explosión, cuyo magma se agitaba, deseando mucho sumergirlo.
Había besado a Wang Yibo.
Había besado a Wang Yibo, voluntariamente.
¡Oh Dios mío! ¡¡Él realmente eligió besar a Wang Yibo!!
¡El corazón del muchacho se inundó con su acción! No solo eso, sino también el beso de
Wang Yibo y su propio beso iniciado, ambos sorprendentemente sin tener una onza de disgusto detrás de ellos. Su único sentimiento en ese momento era solo que sus labios se calentaban excesivamente, y que únicamente por ese toque, se había incendiado.

Tras esto, ninguno de estos dos hombres habló una sola palabra durante el resto de
su viaje a la mansión de la familia Wang.
Sabiendo que era el día en que los dos hombres habían ido a registrar su matrimonio, Wang Suya
hizo que el chef preparara algunas comidas. También consciente de los recientes problemas estomacales de Xiao Zhan, instó especialmente al chef a que prepare algo de gachas para aprovechar la recuperación del estómago del chico.
"Ah-Zhan, no estás comiendo lo suficiente. Solo han pasado unos pocos días desde la última vez que te vi, y cada parte de ti es más delgada." Wang Suya reprendió: "No sabía que así es como Ah-Yibo cuida a los demás."