—Oye, Oli, ¿te encuentras bien?— Cooper se acerca a mí, susurrando, ya que Nicholas se encuentra en plena grabación.Suspiro apoyando una mano en mi frente y espero unos segundos para que todo regrese a la normalidad en mi cabeza. El mareo que acabo de experimentar fue lo suficientemente fuerte como para que necesite sentarme rápido, antes de sufrir una caída.
—Estoy bien— digo por fin, dedicándole una sonrisa a Cooper para tranquilizarlo —es solo que el calor me está haciendo peor de lo que pensé— me abanico con mi mano y cierro mis ojos, recostándome hacia atrás en la silla
—Espera aquí un segundo— se levanta rápidamente y se dirige a una cubeta con hielos, la cual tiene muchas botellas de agua por si alguien las necesita con urgencia —toma, preciosa, bebe un poco, te hará bien— regresa a sentarse a mi lado y me entrega la botella ya abierta.
—Gracias, Coop— bebo varios sorbos continuos de agua y dirijo mi mirada hacia donde se está grabando la escena de Nicholas, el cual se encuentra dentro de la piscina —me iré a casa— vuelvo a mirar a Cooper —no le digas nada a Nicholas porque no quiero preocuparlo, que finalice su trabajo tranquilo, ¿sí?— sonrío levemente y extiendo mi mano hacia su mejilla
Él me devuelve la sonrisa y asiente con la cabeza apoyando su mano sobre la mía.
—Ve tranquila, avísame si necesitas algo, por favor— deja un beso en mi mano y me ayuda a levantarme con cuidado —¿segura te sientes mejor?—
—Sí, estoy bien— tomo mi bolso, que lo había dejado sobre una mesa, y lo cuelgo en mi hombro —luego te veo— le doy un corto abrazo y dejo un beso en su mejilla, para luego irme hacia mi auto.
Recorro la ciudad con las dudas plantadas en mi mente y el miedo a flor de piel. Comienzo a intentar unir los hilos y todo parece tener sentido.
Tengo un atraso de hace casi un mes, pero no me ha parecido extraño porque siempre he sido irregular.
Mi apetito aumentó mucho, incluso durante la madrugada, lo cual jamás había ocurrido. Pero es algo que tampoco me preocupó demasiado.
Hasta que hace algunos días comencé a sentir muchísimos malestares, sin razón alguna.
La posibilidad siempre ha estado, eso es claro. Hubieron veces en las que no nos hemos cuidado y solo hemos tenido suerte de que no era mi momento fértil. Pero la racha de buena suerte, en algún momento llegaría a su fin.Debería comprar una prueba de embarazo.
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Entro a mi casa con la bolsa colgando en mi mano y comienzo a sentir los nervios colándose por mis poros.
Ni siquiera me he hecho el test y ya estoy pensando en los posibles resultados y qué sucedería con eso.¿Un bebé? Nicholas está en plena grabación del proyecto que es un gran sueño para él. Sé que su auge recién comienza y quizás un bebé podría arruinar todo si llega ahora mismo.
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Nicholas Chavez / One shots
Novela JuvenilBienvenidas/os a este pequeño lugar, donde van a poder dejar volar su imaginación con algunas cortas historias que tienen como protagonista a nuestro chico favorito 💋