Melisa Mendoza X Daniel Valencia (""Obsessed")

Capitulo 2 "Reencuentro"

Melisa:

Melisa: ¿Y bien? ¿No dirán nada? ¿O te quedarás callado? –Pregunte burlona–

Armando: No seas tonta, ¿Si? Mejor dame un abrazo, boba. –Dijo en un tono alegre–

Solo lo abrace, fue un abrazo que los dos estábamos necesitando, o por lo menos yo lo necesitaba, mi hermano es la persona más importante y después es mi padre.

Ellos son mi centro y yo soy su princesa, su "pequeña princesa", para ellos yo siempre seré una niña y no me molesta, si me cuidan es porque me quieren, además no me molesta ser protegida por las personas que más quiero.

Al separarnos del abrazo, mi hermano me hizo una seña de que pasará a la sala de juntas y eso fue lo que hice, pero al entrar, todas las miradas fueron a mi.

Melisa: Hola, hola.. –Dije alegre– Pero no me miren así, parece que vieron a un fantasma, mejor denme un abrazo. –Dije alegre–

Mi padre fue el primero en levantarse de su lugar, para abrazarme.

Roberto: Hija, que alegría me da verte, la verdad, me da mucho gusto que estés otra vez en Bogota –Dijo durante el abrazó–

Al separarme el tomo mis manos y solo le sonreí.

Melisa: A mi también me da mucho gusto estar otra vez aquí, de verdad, los extrañe a todos. –Sonrei– Es más, hasta extrañe al pesado de Daniel. –Dije en un tono burlón–

Me gire a ver a Daniel y el solo rodó los ojos, yo de que vas a caer Danielito, lindo.

La siguiente en abrazarme fue mi madre.

Margarita: Me da mucho que esté aquí otra vez, todos te extraños mucho –Dijo separándose del abrazo–

Melisa: También te extrañe, mamá. De verdad, a todos los extrañe. –Dije sonriente–

Quién me abrazó después, fue Marcela.

Marcela: Haz cambiando mucho, Melisa, todos te extraños, nos hacías mucha falta en EcoModa. –Dijo feliz–

Melisa: Me alegra que me extrañaran, por cierto, tengo mucho que contarte y se que tú a mí. –Me separe del abrazo– Porque ya se que te vas a casar con mi hermano y los felicito a los dos, me da mucho gusto por ambos, les deseo toda la felicidad –Dije amable–

Marcela: Muchas gracias. –Dijo alegre–

Armando: Gracias, Melisa. –Dijo sonriente–

Melisa: Lo digo con las mejores intenciones, no tienen que agradecer. –Respondi con una sonrisa en los labios–

Dios, de tanto sonreír me están doliendo las mejillas.

Daniel: Bueno, si es que se casan, porque dudo que pase, yo se que Marcela al final se le caerá la venda de los ojos, solo que  espero que no sea demasiado tarde. –Dijo irónico–

Melisa: Perdón, ¿Daniel siempre ha sido así? Porque.. la verdad hasta donde yo recuerdo, no era tan cretino –Dije irónicamente– Digo, no es por ofenderte Daniel, lo digo con las mejores intenciones, porque según yo, antes no eras así o tal vez no me daba cuenta, quién sabe. ¿No? –Dije mientras me encogía de hombros–

Daniel: Lo bueno es que no me querías ofender, ¿No? No quiero ni pensar en lo que me habrías dicho con tal de ofenderme –Contesto en un tono de amargura–

Melisa: Si te ofendí, te pido una disculpa, Daniel, de verdad es no era mi intención –Respondi cortésmente–

Bueno, en parte si lo quería molestar un poquito, pero ¿Ofender? No, no lo quería ofender.

A ti jama te ofendería, mi amor.

Mario: Mmm, bueno. –Se acercó a mi y me abrazó– Me da gusto verte de nuevo, me alegra que la luz de EcoModa, al fin este aquí –Dijo sonriente–

Melisa: Gracias, Calderón –Conteste amablemente–

Hugo: Pero si la luz de EcoModa soy yo, faltaba más. –Dijo fingiendo indignación–

Melisa: Hugo tiene razón, con sus diseños, el es la luz de EcoModa –Dije sonriente–

Hugo: Bueno.. puedo compartir eso con usted, los dos somos la luz de EcoModa. –Dijo alegre–

El se acercó a mi y me abrazo, correspondi al abrazó, al separarme, fui a saludar a Gutiérrez y Olarte.

Después me acerque a Daniel.

Melisa: Hola, Daniel. –Le dedique una calida sonrisa y le tendi la mano–

Daniel: Hola, Melisa. Bienvenida de nuevo. –El estrecho su mano con la mia–

Solo me quedé congelada unos segundos y después solté su mano, para dedicarle una última sonrisa y tomar asiento, junto a Hugo.

Dios, me dio la mano, me dio la mano.

¡AAAHHH!

NUNCA MÁS ME LA VOVLERE A LAVAR.

Por dios, Melisa. ¿Que tonterías estás diciendo? Se supone ya maduramos, no vamos a actuar como adolescentes enamoradas, con las hormonas alteradas. No, tienes que comportarte como una señorita de 22 años.

Tienes que mostrar serenidad, tranquilidad y disimular que te mueres por Daniel Valencia.

Ay, pero es que está como quiere, dios.. me encanta este hombre.

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Mis pensamientos estában al mil por hora, pero eso no me impedía prestar atención a la junta directiva.

Estudiamos como estaba EcoModa, mi padre dio un pequeño discurso y empezaron las votaciones.

Marcela, Camila, mi madre y Mario, votaron por Armando.

En cambio María Beatriz y mi padre, votaron por Daniel.

Roberto: Es tu turnó, Melisa. ¿A quien le das tu voto? –Dijo en un tono serio–

Mmhh, dios, que difícil decisión.

Melisa: Independientemente de a quién le de mi voto, termina ganando, Armando. –Respondi con serenidad–

Margarita: Lo sabemos, pero igual tienes que votar, Melisa. –Contesto–

Melisa: Si, lo sé. –Lance un suspiro– Quiero aclarar que ambas propuestas están muy bien hechas, la verdad. Daniel, tu propuesta es muy sólida y muy buena. –Le dije amablemente– Armando, la tuya también es muy buena propuesta, a mi criterio diría imposible y poco realista, pero muy buena –Lo mire–

Armando: ¿Y a quien le darás tu voto? ¿A Daniel? –Dijo con un tono de molestia–

Melisa: No, no se lo daré a Daniel, pero tampoco te lo daré a ti. Mira, acabo de regresar y no quiero problemas con nadie, porque si le doy el voto a Daniel, tendré problemas contigo, al igual si te lo doy a ti, estaría en una posible guerra con Daniel. –Dije con un toque de diplomacia– Así que yo prefiero, abstenerme de votar está vez, si es qué la junta me lo permite. –Dije cortésmente–

Hasta acá por hoy.
Jsjsjs. 💕