Aburrida y desdichada, me encontraba aquel día.
Aquel día en el que se cumplió lo que quería.
Yacía sola en mi casa,
Como todos los días.
Con los auriculares puestos,
Solo mirando al suelo.
Cuando de repente, me dan ganas de dibujar.
De demostrar mi genialidad.
¿Mi inspiración?
Por supuesto la sociedad.
Hago leves trazos sin mirar atrás.
Primero uno pequeño,
Para ver si puedo parar.
Como si eso acortara la realidad...
Al no tener suficiente,
Sonriendo lo hago mas fuerte,
Pensando en lo que le dijeron
"Que te mueras"
si mal no recuerdo.
Hago un corte seco,
En el centro de mi muñeca,
Miro al techo,
intentando atinar en este corte certero.
Cuando bajo la vista,
Me encuentro lo que quería,
Mi sangre esparciéndose
Por todo mi cuerpo,
Tranquilidad.
Ya no siento nada mas.
Y antes de darme cuenta.
Me fundía en mis sueños,
Esos sueños en dónde la muerte solo era un final, y no un comienzo.
ESTÁS LEYENDO
Escritos de mi mente
PoesíaNadie se pone en tu lugar, todos juzgan a base de lo que piensan, lo que les dicen, lo que escuchan, pero nadie sabe lo difícil que es ser tu. Es difícil vivir sin esperanza, creyendo que todo está perdido, ¿verdad?