Wagner regresó a Canadá después de un mes en Estados Unidos. Ava lo acompañaba, y se sintió emocionado de volver a su hogar.
Al entrar por el portón de la escuela, Wagner se sintió confundido al ver a Rayle. No sabía cómo reaccionar.
Pero Ava estaba ahí para apoyarlo. "Estoy aquí para ti, Wagner", dijo, tomándolo de la mano.
Wagner se sintió agradecido por su apoyo. "Gracias, Ava".
Rayle se acercó a ellos, con una mirada indecisa. "Wagner... ¿cómo estás?"
Wagner se sintió incómodo, pero Ava intervino. "Hola, Rayle. Me llamo Ava".
Rayle se sorprendió al ver a Ava, pero se recuperó rápidamente. "Hola, Ava. Me alegra conocerte".
Ava sonrió. "Lo mismo digo, Rayle".
Wagner se sintió aliviado al ver que Ava y Rayle se llevaban bien. Tal vez, esto podría ayudar a cerrar el pasado.
Ava y Rayle comenzaron a hablar, y Wagner se dio cuenta de que se estaban convirtiendo en buenas amigas.
"Me alegra verte feliz, Wagner", dijo Rayle, sonriendo.
Wagner se sintió sorprendido por su comentario. "Gracias, Rayle. Estoy bien".
Ava se acercó a Wagner y lo besó en la mejilla. "Estoy aquí para ti, siempre".
Wagner se sintió emocionado por el futuro con Ava y su nueva amistad con Rayle.
Wagner llamó a Rayle al campus, y ella acudió sin saber qué esperar. Cuando llegó, Wagner la tomó de la mano y la llevó a un lugar apartado.
Sin decir una palabra, Wagner se acercó a Rayle y la besó apasionadamente. Rayle se sintió sorprendida, pero no pudo evitar responder a su beso.
Ava, que pasaba por allí, los vio y se detuvo. No se entristeció, ya que sabía que Wagner todavía tenía sentimientos por Rayle. Había intentado no enamorarse de él, pero era imposible no enamorarse de Wagner. Era un chico maravilloso.
Cuando terminó el beso, Wagner sonrió, pero Rayle le dio una cachetada.
"¿Por qué hiciste eso?", preguntó Wagner, sorprendido.
"Porque no puedes jugar con mis sentimientos", respondió Rayle. "Me dijiste que estabas con Ava, y ahora me besas. ¿Qué juego es este?"
Wagner se sintió confundido. "Rayle, lo siento. No sé qué pasó".
Rayle lo miró con lágrimas en los ojos. "Tú nunca me amaste, Wagner. Solo me usaste para satisfacer tus deseos".
Wagner se sintió herido por sus palabras. "Eso no es cierto, Rayle. Te amo".
Rayle se rió. "No, Wagner. No me amas. Solo te amas a ti mismo".
Ava se acercó a ellos, y Wagner se dio cuenta de que había lastimado a ambas.
"Lo siento, Ava", dijo Wagner. "No sé qué pasó".
Ava lo miró con tristeza. "Creo que debemos hablar, Wagner".
Ava llevó a Wagner a un lugar apartado, lejos del bullicio del campus. Lo miró con una sonrisa cálida y lo abrazó.
"Felicidades, Wagner", dijo Ava. "Aún puedes recuperar a Riley".
Wagner se sorprendió por sus palabras. "¿Qué quieres decir?"
Ava se separó de él y lo miró a los ojos. "Quiero decir que todavía tienes una oportunidad de arreglar las cosas con Riley. Ella te ama, Wagner".
Wagner sonrió, sintiendo una mezcla de emociones. "Gracias, Ava. Nunca nadie me ha ayudado como tú".
Ava sonrió de vuelta. "Eso es lo que hacen los amigos, Wagner. Te apoyan incondicionalmente".
Wagner se sintió conmovido por su gesto. "Eres increíble, Ava. No sé qué haría sin ti".
Ava se rió. "No necesitas hacer nada, Wagner. Solo sé feliz".
Wagner asintió, sintiendo una nueva esperanza. "Lo intentaré, Ava. Gracias a ti".
Ava lo abrazó de nuevo. "Estoy aquí para ti, Wagner. Siempre".
En ese momento, Wagner se dio cuenta de que Ava era más que una amiga. Era su ángel guardián, su apoyo incondicional.
"¿Ava?", dijo Wagner, con una voz suave.
"Sí, Wagner", respondió Ava.
"Gracias por creer en mí", dijo Wagner.
Ava sonrió. "Siempre creeré en ti, Wagner".
