ArgBra

pasado

Dos niños se miraban y se saludaban con un abrazo, hace mucho que no se veían y estaban realmente felices de recontrarse una vez más, habían otros niños, todos hijos de imperios poderosos en su epoca, los otros niños jugaban entre si mientras eran vigilados por las colonias mayores, sus padres estaban en una reunion para discutir sobre sus diferencias en cuanto a divisiones territoriales se tratara.

Argentina y Brasil, antes conocidos por otros nombres se escaparon de la vigilancias de los más grandes y se alejaron de los demás jovenes para poder jugar juntos.

__Plata ¡mira!__dijo el pequeño de habla portuguesa, apuntando a un conejo que por ahí pasaba.

Argentina se acercó y corrió para intentar atrapar el conejo, por supuesto el animal se fue corriendo ante un movimiento brusco.

__aw...__se quejó y dió un pisotón__¡se escapó! ¡Iba a llamarlo bigotes!

Brasil rió y se acercó a su amigo, jalandolo hacía atras y tirandolo al suelo, obligandolo a sentarse en el pasto.

__estoy cansado de tanto correr, acostemonos en el pasto__dijo el brasileño, acostandose a su lado, Argentina accedió y se recostó.

Todo quedó en silencio entre ambos, miraron el cielo admirando las nubes y discutiendo que forma tenía cada una, mientras tanto, el de habla portuguesa no paraba de mirar al de habla hispana, y mientras este contaba sobre lo mucho que disfrutaba de atrapar insectos no podía parar de observarlo y analizar cada detalle de su rostro.

__¿Cruz?__Argentina movió su hombro__¿estás bien?

__mejor que nunca...__Brasil le sonrió e iba a decir algo pero una voz aguda desde lo lejos lo interrumpió, ambos niños miraron de donde venía el sonido, desde la distancia vieron a cierto britanico arrastrando del brazo a su hijo adolescente, quien protestaba en queja.

__I can't believe you did that! We were very late! (¡No puedo creer que hicieras eso! ¡Estamos llegando muy tarde!)__le gritó al menor quien no paraba de quejarse y protestar mientras era llevado con fuerza del brazo por su padre, Reino Unido era conocido en ese tiempo por ser un "raro" al menos para los estandares de la epoca, apezar de ser biológicamente una mujer le gustaba vestirse como hombre y se quejaba cuando alguien se refería a él como una dama, la gente solía tenerle miedo así que esa regla de no referirselo de forma famenina estaba muy marcado en la cabeza de todos, nadie queria despertar su caracter.

__ese señor es muy raro...__dijo Brasil, mirando la escena con una mueca de burla__mi mamá dice que me mantenga alejado, es muy agresivo segun parece ¿no crees?__se dió la vuelta para mirar a Argentina, pero lo notó algo distraido__¿Plata?

__es muy lindo__declaró con simpleza, Brasil sintió un poco de celos ante eso pero rápidamente fue desplazado__¡juguemos a las escondidas!

Y desde ahí terminó aquel raro momento, ambos siguieron creciendo y sierto enamoramiento tanto por parte de Brasil como de Argentina seguía creciendo, solo que el del argentino no exactamente hacía el brasileño.

Ambos amigos se veían cada mucho tiempo pero su amistad seguía siendo fuerte al igual que los sentimientos que arrastraba Brasil desde pequeño, era algo inquebrantable.

Hasta que un día recibió una invitación de boda que se sintió como un golpe directo al corazón.

Miraba el trozo de papel en sus manos, no pudiendo creer lo que tenía delante, su mejor amigo iba a casarse, en ese momento debería estar feliz por él pero no podía estarlo, más a sabiendas que él no era el afortunado que tenía la suerte de tener al argentino a su lado, lo siguiente que hizo fue enviar una carta confirmando su inasistencia poniendo una excusa vaga.

Argentina recibió aquello y cuando se le fue leída se sintió destrozado, realmente esperaba tener a una de las personas más importantes para él en su día especial, pero aquella tristeza se fue cuando Reino Unido lo consoló.

20 años pasaron sin contacto más que un par de llamadas de vez en cuando. ¿La razon de por que Brasil fue a visitarlo despues de tanto tiempo? Simple, se decidió que no perdería más tiempo e intentaria conquistar a Argentina, iba aprovechar que el británico estaba muerto y que el argentino probablemente ya lo hubiera superado despues de dos años.

Y ahí estaba, admirando al dueño de la casa con sus azulados ojos brillando en enamoramiento, Argentina hablaba sobre sus actividades del día mientras ambos estaban al aire libre, tal cual como cuando eran niños.

Pero esta vez no perdería la oportunidad, juraba por su vida que iba a lograr conquistarlo ahora más que nunca que Reino Unido no estaba estorbando.