Un Peligroso Amor.

una estrella nace.

Narra Sofia:

Hoy es el día donde mi nuevo album salga a la luz, si el anterior fue amado ¿Por qué este no?.

—Este es y será un álbum exitoso hija.—Dijo mi padre, un exitoso empresario, y mafioso.

—¿Tu crees?  Falta poco para que salga a Youtube la primera canción.— Dije nerviosa, soy cantante y bailarina, soy famosa si así se puede decir.

—Claro que si chava.—Dijo el jardinero, Carlos, el ah sido uno de mis mejores amigos en la vida... Trabaja en la mansión aunque varias veces le dije para que dejara de hacerlo... Es alguien muy trabajador e independiente, digno de admirar.

—Bueno si ustedes lo dicen tenganlo por seguro que lo será.—Dije con una sonrisa confiada.—¿Cuantos hay en espera?—Dije mientras me quitaba la chaqueta.

—Hay... 12.305 usuarios en espera señorita.—Dijo el productor... Luis, el que me ayuda en todo, un señor muy amable y sobretodo profesional.

—¿Como dijo? ¿Escuché bien?— Dije emocionada.

—Si enana ¡12.305 usuarios esperan tu canción!—Dijo Carlos con una sonrisa.

Solo pude gritar y abrazar a Carlos y a mi papá, luego de unos saltitos emocionada, me dirijo a Luis, le agradecí, y lo abracé para ver qué en la cuenta regresiva quedaban 3 minutos.

—Que nervios... Solo espero que esto salga bien.—dije con una sonrisa nerviosa, pude sentir el brazo de Carlos rodeando mis hombros.

—¡Tranquila chavita, ya verás que saldrá bien!—Dijo mientras me ponía su mano en mi cabeza empezando a despeinarme.

—¡Idiota! ¡No!— Dije entre risas.

—3...2...1...— Dijo el productor anunciando que mi canción ya estaba en Youtube... Las vistas empezaron subiendo y los likes poco a poco subían de cantidad.

—A ver.... Vamos bien ¿no?—Dije mirando las vistas y los likes.

—Claro que si mi amor.—Dijo mi papá mientras aplaudía. Todos dentro de poco empezaron a aplaudir por el éxito.

—Ya ya... Que después lloro.—Dije mientras reía.—Gracias a todos, sin ustedes no se habría logrado esto.

—¡Eres una exitosa cantante chavita!— Dijo riendo.

—Felicidades princesita.—Dijo mi papá mientras me abrazaba.

—Gracias pa.—Dije soltando algunas lágrimas de felicidad.

Las horas pasaron y todo fue acordé lo planeamos, las vistas subiendo, y los likes por los cielos.

Estaba en mi cuarto, tenia un lindo vestido holgado pero un poco apretado en la cintura, unas botas, y mi pelo semi recogido. Estaba arreglando mi maquillaje cuando tocaron mi puerta.

—¿Si diga?—Dije en un tono amigable.

—Señorita, su padre la espera en su despacho.— Hablo a traves de la puerta Blanca, una sirvienta que ayudo a mi mamá a cuidarme y a criarme, a ella la considero otra mamá para mi.

—Okey nana, ¿puedes decirle que ya voy?—Dije mientras me peinaba un poco para salir.

—Claro mi niña, ya le digo.

Escuché pasos alejarse de la habitación, seguí peinandome, me puse un poco de perfume y sali de mi habitacion.

Baje las escaleras sientiendome feliz y llegué al despacho de mi padre, dónde toque la puerta antes de entrar.

—Permisito.—Apenas abrí la puerta pude ver un chico de espaldas a mi, estaba sentado, y se notaba que era más alto que yo, con un traje elegante.—¿Interrumpo algo? Puedo volver después.—Dije un poco extrañada.