Una vida diferente

Capítulo 118: Blanco y rojo PT1

"Esfuérzate más."Personaje hablando.

"Más."Personaje pensando.

"Más aun."Biju hablando.

"Desgraciadamente el agua caliente no está funcionando por un problema con el gas pero muy pronto se va a solucionar."Dijo una anciana de avanzada edad de forma amigable.

"No es ningún problema, gracias."Agradeció Emerald con una sonrisa forzada en la cara.

"Si necesita algo por favor no dude en pedírmelo."Se despidió la mujer dándole un asentimiento de cabeza a la peliverde y pasando por su lado esta se fue lejos no sin antes echarle una mirada discreta a la ventana de la habitación qué tenía las cortinas cerradas.

Emerald Sustrai sintió un tic en la ceja al ver eso pero mantuvo la sonrisa forzada en su cara hasta que la anciana entrometida se fue lejos, una vez esta dobló el pasillo la sonrisa de la peliverde desaparecio dejando un molesto ceño fruncido en su rostro."Viejas chismosa de mierda. ¿Porque se meten en los asuntos de los demás?"Se dio la vuelta y se dirigió hacia la habitación abriendo la puerta la cerro detrás de si viendo con desdén lo pequeño que era el lugar.

Había una cama, un pequeño sofá, una mesita, un corto pasillo qué daba hacia la pequeña cocina y al lado estaba la puerta del baño. Lo que le recordaba..

"Ya puedes salir."Dijo Emerald en voz alta acercándose hacia la cama y dejándose caer de espaldas encima de esta cerrando los ojos.

La puerta del baño fue empujada y escucho varios quejidos, pasaron los segundos y los quejidos aumentaron. Emerald abrió los ojos con irritación y se levantó de la cama para dirigirse hacia donde estaba la puerta del baño, abrió esta con su mano derecha viendo al avergonzado y casi llorando Oscar Pine que agachó la mirada.

"Lo siento.. Trate de abrirla.."Se disculpo murmurando por lo bajo con las mejillas rojas de vergüenza.

La vista hizo que su corazón se ablandara con sus ojos viendo brevemente la falta de brazos del castaño. Soltando un pequeño gruñido paso por el lado de este y abrió el pequeño estante que se encontraba encima del lavado, no le tomo mucho encontrar un pequeño maletin con una cruz roja en medio el cual agarro y cerrando el estante estaba por salir del baño pero por el borde del ojo captó rastros de tierra encima del inodoro.

Decidiendo no comentar nada acerca de eso, para la fortuna y enorme agradecimiento de Oscar, se dirigió devuelta hacia la cama donde vio hacia el castaño con el ceño fruncido.

"Ve a sentarte."Incitó Ozpin con suavidad a lo que Oscar obedeció por inercia acercándose con timidez a la cama se sentó en el borde de esta.

De forma silenciosa Emerald abrió el botiquín de primeros auxilios y comenzó por el rostro de Oscar el cual seguía mostrando hinchadez por la golpiza que le había propinado Adam además de estar rojizo por la quemadura de Cinder.

"¿Quien crees que era?"Preguntó Oscar haciendo muecas mientras la morena le limpiaba los rastros de sangre y heridas con algodón y alcohol.

"Una vecina preocupada. O alguna persona curiosa de avanzada edad. Los extraños siempre llaman la atención en los pueblos que se encuentran fuera de los reinos."Contesto Ozpin obteniendo un asentimiento mental del castaño.

Su salvadora condujo durante toda la noche queriendo alejarse lo más posible de la tierra de la oscuridad. Oscar no sabía donde estaban ya que se había desmayado no mucho después de que Emerald se pusiera a conducir pero supuso que la peliverde no quería llamar la atención, lo había despertado y traído a aquel lugar de forma discreta y silenciosa abandonando el Bullhead a las afueras del pequeño pueblo en el que estaban. Se había preguntado porque lo había hecho pero rápidamente se dio cuenta de que la morena frente a él, la mujer que estaba sanando sus heridas, estaba tan aterrorizada y tensa como el.