Yo Antes de Ti «Wigetta»

Capítulo 8.

El día comenzaba normal en la escuela. Por lo menos normal para Frank y Alex, o Mangel y Rubén. Pero para Guillermo y Samuel se había transformado en algo incómodo el día que los dos se habían besado en los vestuarios y, si Samuel no se hubiera detenido podrían haber hecho más.
Aunque Samuel lo deseaba, lo deseaba con todas las ganas del mundo, y no se hallaba explicación alguna de por qué lo quería, pero es que algunas cosas solo suceden porque sí, y por más que busquemos jamás hayaremos un por qué.
—¿Vamos a seguir solo mirándonos? —le dijo Samuel deteniendo a Guillermo.
—Pensé que no querías hablar conmigo.
—Nos besamos. ¿Por qué no querría que me hablaras?
—No lo sé. Lo supuse.
Samuel llevó s Guillermo hasta los baños, y una vez ahí, le besó.
—Ahora supongo que no querrás hablarme.
Guillermo lo miró, le sonrió y lo abrazó.
—Lo siento, tienes razón.
—Está bien.
Se abrazaron de nuevo y juntos se dirigieron al salón de clases. Samuel estaba teniendo sentimientos encontrados. ¿Por qué Guillermo le parecía absolutamente guapo como si fuera una chica? Pero no lo sabía.
—Quieres salir, ¿cierto? —le dijo Luzu.
—Sí. Aveces quisiera olvidarme un segundo de todo.
Pero no sabía en qué plan se lo decía Luzu. Las clases siguieron muy normal. Con Frank y Alex en lo suyo y Rubén y Mangel hablando con Guillermo y Samuel.
Todos estaba felices. Mientras los días transcurrían Guillermo se veía de des en cuando con Samuel. Aveces en su casa, aveces en otros lados, siempre a escondidas de sus padres y de cualquier otra persona que no fueran sus amigos.
Alex algo que amaba más que a su historia era a Frank. Él había cambiado los asientos con Guillermo y ahora Frank y Alex se sentaban juntos, Frank realmente quería demasiado a Alex. Era una buena etapa.
Un día nuevo empezaba en la preparatoria de Madrid.
Todos habían llegado puntual a la clase, y se encontraban en los mismos lugares de siempre.
—Samuel de Luque, a la dirección. Samuel de Luque —se escuchó en el megáfono de ka escuela.
Guillermo volteó a ver a Samuel y este le sonrió, tomó su mano en señal de que no se preocupara. ¿Qué era lo que podía pasar?
Un vez dentro, se encontró con Alex y Luzu.
—¿Que sucede? —preguntó Samuel, inquieto.
—Van a ser trasladados a otro instituto —les dijo el director
Samuel se puso pálido como el talco, no sabia el porqué, así que se atrevió a preguntarlo.
—Tú y Guillermo Díaz tiene una relación, y eso está prohibido aquí.
—¿Qué? —Alex lo miró y agachó la mirada—. ¿Y Alex?
—Escribir historias obscenas esta contra las reglas. Por favor, acompañen a Luzu hasta la camioneta.
Los dos avanzaron con un maestro detras de ellos. Entonces, Frank y Guille se acercaron a toda prisa.
—¿Que pasa, Alex? —preguntó Frank desesperado.
—Fue la historia, lo lamento.
Guillermo no le dijo nada a Samuel, sabia el por que de la situación.
—Te quiero —le dijo Samuel.
—Yo también te quiero —le dijo Guille mientras se alejaban.
Guillermo miró desde la ventana del segundo piso como se subían a la camioneta.
Samuel tenía ganas de llorar, no lo vería más. En la camioneta sonaba la canción «Coming Down» de Dum Dum Girls y eso lo entristeció más.
—Querías salir, y vas a salir —le dijo Luzu.
—Sí, ¿qué te parece? —le contestó Samuel.
—Mira el lado bueno, no puedes cagarla más.
—Eso no lo sé, Luzu. Soy muy ingenioso.
—¿Te despediste de tu gente?
—¿Cual gente? —preguntó confundido.
—Tus amigos y tú novio Guille.
Samuel, al escuchar eso, se le partió el corazón, lo extrañaría demasiado, de hecho, ya comenzaba a extrñarlo.
—Guille no es mi novio. No se lo desearía. No se lo desearía a nadie.
Guillermo desde el segundo piso observaba como la camioneta se alejaba en el camino.

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Pobres Frank y Guille que se Han quedado solos u.u ¿volveran Alex y Samuel?