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El decir que hace cinco minutos un chico con el que apenas hablaba acababa de salvarle la vida es poco. Hyunjin conducía su motocicleta delante del auto de Felix, guiandolo hacia su casa. 


El rubio observó el camino con interés, su Hyung nunca comentó sobre de qué iría el trabajo, de igual forma Felix no se negó, lo necesitaba más que a nada en ese momento, el dinero no llueve del cielo, ni mucho menos para él. 


El pelirojo frenó de manera lenta dirigiendo su vehículo hacia una entrada. Del bolsillo de su chaqueta negra sacó un control, claro, rejas eléctricas. Esperando a que se abrieran, Felix llegó detrás de él. 


— ¿Y si piensa vender mi cuerpo?— Pensó el rubio en voz alta— No joder, quién pagaría por ésto. 


Negó ante su estúpido pensamiento y notó que Hyunjin había desaparecido de su vista, aceleró un poco y se adentró por  el único camino para finalizar ante una casa... Normal, no era el edificio más monstruoso que alguna vez vió, pero de igual forma era mucho más grande que su pequeño apartamento. 


— ¡Hey! chick. 


— No me llames así.— Hyunjin soltó una risa, era de aquellas contagiosas, Felix dió todo de él para no reír también. 


Ya había bajado de su moto, esperaba al rubio en la entrada jugando con sus llaves, el más enano no tardó en llegar hacia allí luego de apagar el motor del auto. 


— Min-ki, kkami y Makki te caerán bien, chick. Por favor trata de cuidarlos. 


— ¿Eh? Minqué, kkamiqué y Makki?— Observó al mayor confundido. 


— ¿Necesitas dinero?— Felix asintió— Entre el trabajo y la universidad no tengo mucho tiempo para cuidar como quiero a mis preciados bebés, así que... ¿Eres buen niñero de mascotas? 


Hyunjin adentró la llave en el cerrojo y la puerta respondió abriéndose, el curioso de Felix asomó su cabeza confundido. Su piel se erizó. 


— ¿¡Qué diablos, Hyunjin!?— El nombrado le guiñó un ojo y entró por la puerta siendo un imán para los perrunos del hogar— ¿¡perros!? Tu madre. 


—¿Por qué?— Tomó en brazos a su bebé Kkami regalándole caricias, como respuesta recibió suaves ronroneos— Son perfectos, mira— Acercó al perruno hacia Felix y éste retrocedió alarmado. 


— ¡Que no me toque! No me gustan los perro. 


— ¿Alergia?— Felix negó— ¿Entonces? Te pagaré bien. 


El más bajo lo observó, formó un puchero inconsciente. Hyunjin tenía razón, si trabajase en un restaurante (cosa que no podía, el tiempo para él era limitado) colapsaría e incluso la paga no sería tan buena como ésta. No le gustaban para nada, pero su hermana lo necesitaba. 


— ¿Sabes qué? Tienes razón... Dame el jodido perro— El castaño frunció el entrecejo y extendió a su tesorito, ¿De verdad Felix lo llamó "jodido perro"? 


Felix extendió sus manos con esperanza de poder lograrlo, en un falso movimiento pareció tomarlo y a esa velocidad lo soltó, por suerte para el pobre animal, Hyunjin en ningún momento lo soltó por completo, no se fiaba de Felix aún. 


— No sé qué tienes, Felix. Pero es un perro y la peor parte de esto... Es mío, son míos y mis bebés. No te pido que los beses, a Min-ki no le gustan los extraños. Tu Trabajo es cuidarlos, cambiarles la comida, el agua, limpiar el cajón de arena, llevarlos al veterinario, salgo de aquí a las 8 de la mañana y hay días donde llego muy tarde, ellos son animales muy independientes, pero no puedo dejarlos por allí nada más, ya los malacostumbré. Te pago bien porque son lo más bonito que tengo. 


— B.. bien, lo haré.— Su voz tembló un poco y el rostro de Hyunjin se relajó, dejó a Kkami en el suelo. 


— Sígueme— el más alto se giró dándole la espalda, comenzó a caminar. Felix lo siguió sin despegar la vista de la figura deHyunjin, no negaba lo guapo que era, quizás podría soportar a esas tres bolas de pelo despreciables un tiempo— Aquí tienes el alimento, Min-ki como del paquete verde, Kkami y Makki del rojo. Los platos de agua allí— apuntaba todo llamando la atención del contrario— Cuando terminas de subir las escaleras, encontrarás una puerta con un pequeño cartel, dentro están las cajas de arena, los juguetes también. El número del veterinario está en el refrigerador y listo. ¿Cómo te ves? 


— Como un idiota, pero supongo que no tengo opción...— Felix estaba muy inquieto, ésto Hyunjin lo notó, aún no eran muy cercanos como para saber el por qué de las cosas, pero esperaba que no dañara a sus perros, si eso sucedía no dudaría en matarlo. 


Por su parte, el más bajo solo quería salir de allí, desaparecer y evitar a esas tres cosas con patas. Al principio disimuló todo bien, casi. Pero ahora él no estaba cómodo, quería llorar. 


Chick... ¿Todo en orden?— Minho sirvió un vaso de agua y se lo dió. 


— Em sí, ¿Cuándo empiezo? 


— Mañana, te dejaré las llaves en la plantera y tú me dirás cómo prefieres la paga, si la quieres semanal, mensual... 


Felix asintió bebiendo del pequeño vasito. 


Si bien Hyunjin sólo necesitaba un niñero, pero ya no era solo eso, ¿Qué era lo que sucedía con Felix? ¿Por qué no buscaba otro trabajo si tenía la oportunidad? ¿Cuál era la necesidad de tanto dinero? Sería interesante averiguarlo.

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No soy buena adaptando jeje, pero aver, necesito un tiempo para volver a escribir, no me vendría nada mal hacer esto...°°

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𝗔𝗨𝗧𝗢𝗥(𝗔) 𝗢𝗥𝗜𝗚𝗜𝗡𝗔𝗟: SpearGb

F*cking Claws.[Hyunlix] ADAPTACIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora