El preludio del caos

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Capítulo 4. El preludio del caos.

—La fuente... —murmuró Aizawa con frialdad, mientras un tic nervioso se reflejaba en uno de sus ojos. —Y ustedes... —miró directamente a cuatro jóvenes que se encontraban frente a él, dos de ellos estaban empapados y los otros dos tenían antecedentes de caer en la misma fuente.

Aizawa se encontraba asistiendo a la exhibición en representación del instituto y había llevado a Eri a ver a Izuku, pues la niña parecía ser fan del pequeño artista.

—La fuente. —volvió a repetir siniestramente el maestro, conteniendo la ira.

—¡Y nosotros...! —soltó Denki con atrevimiento mientras sonreía pícaramente. —¡Auch! —se quejó al recibir un golpe en la cabeza.

Aizawa había enrollado una revista en sus manos y luego lo había golpeado. —¡¿Quién —bramó—, les ha dicho que —golpeó a Kirishima en la cabeza —pueden bañarse en —golpeó a Midoriya —una fuente pública?! —gritó, golpeando la cabeza de Bakugo.

Katsuki hizo una mueca mientras contenía sus ganas de matar al pelo de mierda y al pikachu.

—Fue un accidente. —dijo apenado Kirishima, igual de empapado que Denki.

—No creo en los accidentes, todo ocurre por una razón. —dijo con tranquilidad un anciano al lado del profesor. Era Torino. —Ahora, lo importante es llevar a este dúo en "estado de negación" a cambiarse de ropa antes que se resfríen. —señaló divertido a Eijiro y Denki.

—Si, por culpa de él estoy muy mojado... —se quejó Denki, señalando al pelirrojo.

Esas palabras hicieron sonrojar a Kirishima, pero se puso aún más colorado cuando vio a Kaminari levantar su camisa para escurrirla con sus manos, exhibiendo la parte baja de su abdomen. —¡¿Qué haces?! —se apresuró, bajándole la camisa y cubriéndolo.

—Escurrir mi camisa y... ¡No te pedí tu ayuda! —se quejó Denki molesto.

—No seas necio y...

Aizawa volvió a golpearlos en la cabeza a los dos, regañándolos de nuevo.

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—Castigados otra vez. —dijo Izuko con tristeza.

—La vieja bruja gritará bastante. —comentó Katsuki, pensando en su madre.

El ruido de la puerta al abrirse los interrumpió. Era Kirishima, vistiendo una camiseta con un estampado caricaturesco del rostro de un tiburón en el pecho, que se encontraba estirada debido a los pectorales del pelirrojo, deformando la imagen, y con una frase debajo del dibujo que rezaba: "Mami, ¿qué tú quiere'? Aquí llegó tu tiburón".

—No puedo creer que no hubiese algo mejor. —se quejó Kirishima con pena.

—Eso te pasa por burlarte de mí. —se mofó Bakugo, recordando como se rieron cuando le pasó lo mismo con el ridículo abrigo.

—No se ve mal. —dijo Izuku, intentando hacer sentir mejor a Kirishima. —Resalta tus... —sus mejillas se sonrojaron. —Pectorales. —murmuró mirando el rostro estirado y deformado del tiburón.

Bakugo frunció el ceño, mirando fijamente a Izuku, el cual solo desvió la mirada con nerviosismo.

—¡Pues yo no me quejo! —vociferó Denki al salir, vistiendo una camiseta sin estampado. Sin embargo, al adelantarse y caminar, Kirishima y los demás se percataron de que la camiseta si tenía un estampado en la espalda que decía: "Esto está más caliente que el rabo de un Charmander", y señalaba con una flecha hacia abajo. Para colmo, justo en el momento que todos leían eso, Denki se agachaba buscando su celular en su mochila, el cual no dejaba de sonar. Mostrando su trasero.

Si yo fuera tú: El festivalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora