‹ 𝐈𝐕 › Realización.

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─ Lance, ¿Pollo o cerdo? ─ preguntó el mayor desde la cocina; sin respuesta: ─ Cerdo

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─ Lance, ¿Pollo o cerdo? ─ preguntó el mayor desde la cocina; sin respuesta: ─ Cerdo. Carlos y Carola, ¿Ustedes? ─

─ Pollo. ─

La mañana siguiente de la salida a un antro resultó ser tediosa. Sergio cómo no había tomado mucho disponía de energía, a comparación de sus amigos que no querían ni moverse. Lance se mantenía recostado (dormido) en uno de los sillones del apartamento, Carlos por otra parte trataba de entender lo que decía en su laptop, Carola quería morir ahora. Ninguno tenía las ganas para viajar a otro país o a las oficinas.

─ Cabrón, me explota la puta cabeza, ¿No puedes darnos el día? ─ se quedó el español mirando a su mejor amigo.

─ Carlos, eres el menos indicado para pedir un día libre, recién volviste de vacaciones. ─ Lance murmuró bajo.

─ ¿Piensas darme descanso, Pérez? El hecho de ser tu amiga no significa que puedas explotarme laboralmente. ─ la mujer se quejó ahora. Sergio suspiró.

─ Son bastante odiosos, ¿Sabían? Les doy el día a los tres, duerman todo lo que quieran. ─ cerró pasándole a cada uno su plato de almuerzo con su jugo.

Cada uno estaba en su mundo cuándo comían juntos, el moreno contestaba mensajes y correos aún pendientes. Al terminar, el mismo canadiense fué el que se ofreció para lavar los utensilios usados, acción que los sorprendió. Eso sucedía rara vez, por no decir nunca.

─ Lancellot, si tienes mucha migraña en el cajón derecho hay pastillas. ─

─ No entiendo cómo tienes migraña si ni siquiera tomaste, freson. ─ Carlos se burló del menor. Lance se tensó.

Los tres miraban fijamente al castaño, quién no quería ni mover su pecho al respirar: ─ Stroll, ¿Qué nos ocultas? ─

Terminó de lavar el sartén para darse vuelta y encarar, quería dejar el tema de lado para hacer la sorpresa cómo era debido, pero parece que tener al español cómo mejor amigo era tener que ser menos obvio frente a él. Todo un idiota y chismoso, agradecía el no haber ido de visita con George o ya todos en la parrilla sabrían también.

─ Fernando y yo hablamos.. Ambos ya estamos listos para lo siguiente. Puede que esté esperando a el primer hijo. ─

Las reacciones no tardaron en llegar, el chillido de emoción de Carola fué lo suficientemente alto cómo para hacer reaccionar a los otros dos. Corrieron hasta el menor para abrazarlo, Sergio seguía sin creerlo, su primer bebé al fin tendría un bebé con su hermano. Debía tener otra charla intimidante con el español, lo último que quería era arruinar dos grandes amistades.

─ Juro que todo irá bien. ¿Estás bien con eso? ─ cuestionó Lance cuándo el latino llegó a abrazarlo.

─ Eso debería preguntarte a tí, yo no seré quién cargará un bebé dentro. ─ los 4 rieron abrazándose una vez más.

𝐔𝐍𝐓𝐎𝐔𝐂𝐇𝐀𝐁𝐋𝐄 | chestappenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora