• Festejo especial. (Charles Leclerc)

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Malena recibió un mensaje en su teléfono. La carrera de Monza había finalizado y Charles Leclerc el flamante ganador quería festejar con ella en la suite del hotel.

Malena sonrió al leer el mensaje en su teléfono. La emoción de la carrera aún resonaba en su interior, y la idea de celebrar con Charles Leclerc, era irresistible.

"¿En la suite del hotel?", pensó Malena, sintiendo un escalofrío en la espalda. Sabía que esa noche podría ser inolvidable.

Respondió rápidamente.

"¿A qué hora? Estoy lista para celebrar tu victoria"

Charles respondió.

"Ahora mismo. Te envío un coche para que te lleve al hotel. Estaré esperándote en la suite"

Malena se sintió emocionada y un poco nerviosa. Se preparó rápidamente, eligiendo un vestido elegante y sensual, y se dirigió al lobby del hotel.

El coche de Charles la esperaba, y pronto se encontró en la suite del hotel, rodeada de lujo y privacidad.

Al abrir la puerta, Charles la recibió con una sonrisa radiante y una botella de champán en la mano.

- Malena, eres la indicada para celebrar esta noche.-  dijo, mientras la besaba en la mejilla.

Malena se sintió envuelta en la magia de la noche, y supo que esa sería una velada inolvidable.

- Felicidades Charles... que honor ser parte de tu festejo...- Dijo Malena rozando sus labios al oído de Charles.

Malena se sentó en el sillón, sintiendo el suave terciopelo bajo su piel. Charles se sentó a su lado, muy cerca, y le entregó la copa de champán.

- Por ti. Por tu victoria.-  dijo Malena, sonriendo, mientras chocaban copas.

Charles sonrió, y su mirada profunda se encontró con la de Malena. Bebieron en silencio, disfrutando del momento.

Charles se inclinó hacia Malena, su rostro cerca del suyo.

- Solo pense en estar contigo. Solo contigo.

Malena sintió un escalofrío en la espalda. La proximidad de Charles, su voz suave y su mirada intensa la estaban envolviendo en una atmósfera de pasión.

- Que lindo que pensaras en mi...- dijo Malena, su voz baja y seductora.

Charles sonrió, y su mano se deslizó por la pierna de Malena.

Charles toma el rostro de Malena entre sus manos y la besa con intensidad. Malena responde con igual pasión, envolviendo sus brazos alrededor de su cuello. El champán y la música de fondo se olvidan mientras se pierden en el momento.

La beso se vuelve más profundo y apasionado, reflejando la atracción que han estado reprimiendo. Malena se siente atraída por la seguridad y la pasión de Charles, mientras que él se siente cautivado por su belleza y su personalidad.

De repente, Charles levanta a Malena y la lleva hacia la cama, sin dejar de besarla. La habitación se vuelve más íntima, con la luz tenue...

- Solo pensaba en tenerte esta noche...- dijo Charles apenas separándose de ella.

Malena poco a poco empieza a sacar su vestido,  las manos de Charles acariciaban poco a poco su piel.

Malena estaba preparada para su noche con Charles, no era la primera vez que estaban juntos y el siempre le daba las mejores noches.

Charles la besó apasionadamente,  sus manos pasaban por la piel suave de Malena, ella estaba completamente entregada al placer.

Charles empezó a rozar los pechos de Malena,  ella soltó un suspiro,  ese hombre podía ponerla vulnerable en cuestión de segundos.

Malena paso su mano por el pecho de Charles, bajando poco a poco...

- Quiero que me hagas el amor...- dijo Malena rozando sus labios con los de Charles.

La noche se convirtió en un susurro de intimidad, la luna brillando sobre el agua como testigo silencioso.

Charles la miró, sus ojos azules ardientes de deseo. Tomó su rostro entre sus manos, su beso apasionado y posesivo.

Malena se sintió envuelta en su calor, su corazón latiendo al unísono con el de él.

- Quiero sentirte.- susurró Charles, su aliento cálido en su oído.

Malena se estremeció, su cuerpo respondiendo a su tocó.

- Hazme tuya.- repitió, su voz apenas audible.

- Eres mía.- susurró Charles, su voz llena de emoción.

Charles comenzó a besar su cuello, bajando poco a poco, sus manos jugaban con la piel de Malena, poco a poco el fue entrando en ella.

Malena arqueo su espalda del placer...

- Charles...- Dijo entre gemidos.

El la miró, amaba cuando decía su nombre... Charles empezó a acelerar sus movimientos,  profundos y marcados como si fuera una obra musical.

Los pechos de Malena saltaban con cada movimiento,  Charles no podía evitar mirarla.

- Quiero más de ti.- Dijo Charles.

Malena se preparó sabía que su momento había llegado.

Charles se acostó en la cama Malena sabía muy bien lo que debía hacer. Se subió sobre el pero dándole la espalda. Comenzó a moverse como a él le gustaba, dejando a la vista su cola perfecta.

- Dios... cada día eres más impresionante mujer...

- Amo hacerlo contigo...

Malena comenzó a moverse con más ritmo, Charles la miraba desde el espejo que tenia en frente. No podía creer en la belleza y salvajismo de esa mujer.

Charles la tomó de la cintura y acompañaba sus movimientos,  Malena cada vez se sentía más complacida... sin pensarlo soltó un orgasmo intenso...

- Ven aquí, esto todavía no termina preciosa...

Malena se arrodillo en la cama y abrió su boca, Charles estaba a punto de perder la cordura.

Ella tomó la base de su pene con su mano derecha y hacia leves movimientos.  Con su lengua comenzaba a humedecer toda su longitud.
Charles con los ojos cerrados solo podía abandonarse al placer.

Malena lo metió enteró en su boca, hasta su garganta,  comenzó a subir y bajar su boca y Charles se sentía en el paraiso..

- Dios.... eres la mejor...

Malena lo miraba fijamente, los ojos de Charles estaban cerrados hasta que por arte de magia los abrió y se encontró con un espectáculo maravilloso.

La boca de Malena llena de él, generando un placer extremo. Era algo que a él le encantaba.

Malena estuvo largos minutos con su boca llena de él hasta que empezó a acelerar su ritmo provocado en Charles un placer indescriptible. 

- Lo haces de maravilla.- dijo apenas respirando.

Malena seguía moviendo sus labios hasta que Charles dejo salir todo dentro de su boca.
Le dedico una mirada perversa mientras tragaba  todo sin dejar escapar una gota.

Charles estaba exhausto, mientras el se recuperaba, ella se cambiaba, sabía que su noche había terminado.

- No te vayas, tengo algo para ti.

Malena lo miró extraña.
Charles saca de su valija una pequeña caja...

- Para ti. Me gustó y lo compré, para nuestro próximo encuentro.

Malena tomó la caja, era lencería, exótica y de color rojo como la pasión que había cuando estaban juntos. Charles sabia como mantener la llama entre ellos.

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⏰ Última actualización: 17 hours ago ⏰

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