Lo único que me rodeaba ahora eran árboles. Árboles, el sol brillando a través de sus ramas y los cadáveres de bestias que alguna vez vivieron. "Ni siquiera pudieron atravesar mi 'Escudo'". Me sequé el sudor que se acumulaba en mi frente. Estoy bastante seguro de que necesitaba un nombre mejor para ese hechizo. Por lo general, dejo que mis hijos nombren los hechizos que se me ocurren. En parte, esa es la razón por la que algunos de ellos son particularmente nerviosos en su esquema de nombres. Probablemente sería mejor no preguntarle nombres a Sieg, pero él seguía dándomelos, así que no es que no los usaría. Aún así, aprendí rápidamente que su sentido de los nombres era terrible después de que le pregunté por primera vez: ahora no están aquí para nombrarlos.
Sólo soy yo.
Para ser justos con las bestias, no podían esperar hacer nada conmigo. Después de todo, el hechizo podría bloquear una espada arrojada con touki(aura de batalla) por parte de un Rey del Norte. "Aun así, el hecho de que tenga que pensar en luchar contra estas cosas es una molestia". Yo era débil. Débil en comparación con cómo había estado antes de morir. Estos animales serían objeto de burla y desechados como una broma frente a alguien como Eris y nada más que una molestia para Doga, quien simplemente los habría ahuyentado. Incluso ahora, me di cuenta de que tenía más maná del que alguna vez tuve dentro de mi cuerpo. Me daba miedo intentar controlarlo todo, pero necesitaba poder hacerlo. Necesitaba ser más fuerte para poder proteger a la familia que tenía.
Me froté los ojos, tratando de aliviar la visión borrosa. Estaba cansado... terriblemente cansado. Sylphiette tenía razón cuando me regañó por no dormir. A lo sumo, había estado tomando simples siestas durante los últimos meses. Tiendes a terminar de esta manera usando magia de observación constante y manteniendo un hechizo defensivo prácticamente las veinticuatro horas del día. Me di cuenta de que mi cuerpo apenas estaba funcionando en ese momento, pero esto fue todo lo que pude hacer al final del día. Estuve prácticamente conectado desde que me desperté hasta que finalmente logré descansar una hora, pero necesitaba hacer esto.
¿Que se suponía que debía hacer? ¿Bajar la guardia cuando supe que ese bastardo del Hombre-Dios se estaba vengado de mí? Hitogami ya me había enviado un asesino, entonces, ¿qué le impedía enviar otro? ¿Qué pasaría si Aleksander entrara en mi casa y me masacrara? No tendría ninguna posibilidad contra el Dios del Norte en mi estado. No importaba cuánto maná tuviera; Todavía no tenía ningún touki(aura de batalla), y todo lo que necesitaría Alek para matarme era un golpe sólido, un golpe que seguramente recibiría.
Todo lo que podía hacer era intentar proteger a la gente de la aldea lo mejor que pudiera. Era lo mínimo que podía hacer si matar un par de bestias ayudara a la milicia formada por los aldeanos, y lo haría en un abrir y cerrar de ojos si matar a un Rey del Norte significara no volver a ver morir a Paul. Si salvaguardar esta aldea de cualquier ataque significara que mi cuerpo se desmoronara, continuaría, pero sé que tengo límites.
Y sé que los estoy alcanzando.
La razón por la que estoy en el bosque, en verdad, es para aliviar mi estrés. Estaba aquí por una cosa sencilla: ayudar a aliviar la carga que llevaba.
Agarré el pergamino en mi mano. Su grueso pergamino cedió poco a mi agarre. Tenía un poco de polvo y no era un pergamino que alguien pudiera mirar y desear robar. Era viejo y podía desmoronarse en cualquier momento, pero sabía lo que era. Es un pergamino de invocación, de notable calidad y complejidad. Uno escrito por un antiguo demonio y que me regaló el Dios Dragón. Convocaría a un familiar, no a un guardián. Esta sería la solución a mis últimas noches de insomnio. Puede que haya usado las cabezas de Nuckelgard para asustar a ese bastardo de Darius y someterlo, pero eso no sería suficiente para quitarme de encima a Hombre-Dios. Lo sabía. Era un bastardo persistente al final del día, y la única forma de sacarlo de mi rastro era arruinar sus planes de nuevo.
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Mushoku Tensei - Re: Comienzo: una reencarnación llena de trabajo
FanfictionRudeus vivió su vida como quería. Hubo altibajos, pero quedó satisfecho con cómo terminó. Entonces, ¿por qué todavía estaba despierto? ¿Por qué estaba de regreso en la casa en la que había comenzado hacía tantos años? Cuando pensó en todo lo que hab...