La chispa de Beacon Hills

La Captura

Stiles se encontraba en el callejón detrás de la escuela, mirando a su alrededor mientras esperaba a Scott. La brisa fresca del atardecer le hizo sentir que algo no estaba bien. De repente, un fuerte golpe resonó en su espalda y todo se volvió negro. Cuando despertó, estaba encadenado en un sótano frío y húmedo, el olor a metal y humedad llenando el aire.

"Bienvenido, Stilinski," la voz de Gerard sonó como un eco aterrador en el espacio. Stiles levantó la vista, sus ojos se adaptaron a la penumbra, y vio la figura del cazador, que se acercaba con una sonrisa malévola. "Creía que era hora de que tuvieras una charla sobre los secretos de tu pequeño grupo de amigos."

Los días se convirtieron en semanas, y las torturas de Gerard fueron constantes. Stiles enfrentó interrogatorios brutales, pero cada vez que Gerard intentaba quebrantar su voluntad, Stiles se aferraba al recuerdo de Lydia, su risa y su calidez, como un salvavidas en medio de la tormenta. "No le diré nada," respondía con firmeza, aunque la presión se intensificaba.