El jardín del amor, donde se halla el terror

Capítulo tres.

Al abrir los ojos, pude ver a Luke durmiendo en una silla a mi lado, sujetaba mi mano y sonreí.

Me intenté levantar, pero solté un quejido de dolor al mover la pierna. Suspiré y Luke se despertó asustado.

-¿Estás bien? ¿Te duele algo? ¿Cómo está tu pierna? ¿Tenés hambre o sed?- empezó a preguntar rápido y me reí.

-Si, estoy bien, solo me duele un poco la pierna- observé la herida- creo que está mejor y no, no tengo hambre ni sed.

-Vale... Oye- estaba por decirme algo, pero se vió interrumpido, cuando Landon, Nath, Rowan y Abigail entraron.

-Ya despertó!!!- dijo Landon y me abrazó, sonreí y le acaricié el pelo.

-Sip.

-Tienes que tomar esto, es para la herida- Abigail me pasó una pastilla y una botella de agua.

-Muchas gracias- le sonreí y asintió.

-Si te empieza a salir mucha sangre de la herida, ven que te vuelvo a desinfectar la rodilla y te cambio la venda.

-Está bien -Se fue y me dejó sola con los chicos,  Luke me miró y me dejó un beso en la mejilla.

-¿Qué fue lo qué pasó?

-Bueno.... Estábamos haciendo nuestro plan, no era muy bueno, lo admito, pero capaz funcionaba. La cosa es que al intentarlo me lastimé la pierna y cuando salí, el dragón estaba tras mio, así que corrí y estuve haciendo eso hasta que se hizo de día y se fue. -el asintió y me abrazó.

-De verdad me preocupé.

-Estoy viva, que es lo importante.

Los chicos nos miraban con una sonrisa y los miré mal.

-Luke!!!- entró Luisa, yendo hacia él- Quiero hablar con vos- dijo sonriendo y él la miró.

-Claro, bonita -carraspeó antes de mirarme- Cuídate peque- se fue con Luisa y a mi me dejó con los chicos, que solo se acercaron a mi.

-¿Estás bien?- me preguntó Landon y asentí.

-Solo estoy cansada, iré a la cabaña -me levanté de la camilla improvisada y me fui a la cabaña.

¿Bonita?

Traté de no pensar mucho en eso y me acosté en la cama.

Estuve acostada un rato, hasta que me aburrí y fui con Landon.

-¿Estás mejor?- me miró y asentí- me alegro mucho- le sonreí y me senté a su lado.

-Si no fuera tan oscuro, sería un lugar muy lindo.

-Eso es cierto, lástima que no sea así.

Vimos pasar a Luke agarrado de la mano de Luisa y Landon me miró rápido.
Se nos acercaron, sonriendo y ella habló.

-Somos novios-Luke tenía la mano en su cintura y me miró.

-Que bueno -dijo Landon, levantándose y me agarró la mano- Vamos?

-Felicidades -los miré - Si, vamos -nos fuimos para el bosque y me senté en un tronco.

No debería sentirme así, ¿no?

Una semana después

Con Landon nos volvimos muy unidos, siempre estábamos juntos y me hacía reír, era divertido. También nos juntábamos con Rowan y Ruby. Éramos un grupo increíble.

Mi pierna estaba mucho mejor, pero me había quedado una cicatriz en la rodilla.

Ahora estaba arreglando la puerta de la cabaña, que se había roto.

-Mar-me llamaron y me di vuelta. Era Luke.

-¿Si?- volví a arreglar la puerta, sin mirarlo y suspiró.

-Quiero hablar con vos.

-Vos habla, yo escucho.

-Quiero saber si estás enojada conmigo.

-No tengo por qué -terminé de arreglar la puerta y sonreí.

-Por lo de Luisa.

-¿Qué pasa con ella?- me volteé para verlo.

-No sé.... Tal vez te molesta que esté con ella.

-No me interesa lo qué haces con tu vida. -agarré las cosas y las guardé- Y si me vas a hablar de eso, mejor me voy -lo miré una última vez antes de irme con Rowan. Ya se hacía de noche, lo que significaba que nos tendríamos que volver a quedar despiertos.

Cuando terminamos de prepararnos, ya era de noche y nos fuimos a sentar, como todas las noches, alrededor de la fogata.

Apoyé la cabeza en el hombro de Landon y sonrió, lo vi.

-Ustedes dos andan muy juntos últimamente-dijo Rowan, provocando que Landon y yo nos pongamos rojos.

-Eso no es cierto- está vez hablé yo y Landon me agarró la mano.

-Ajá! -señaló nuestras manos- Van a terminar juntos.

No pude evitar sonreír al notar que Rowan me decía que hacía linda pareja con todos.

Cuando escuchamos el ruido del dragón, nos levantamos rápido y empezamos a caminar por el lugar.

-Esto me da un poco de miedo -admitió Landon.

-No es para tanto -dijo el otro y me miraron.

-A mi no me da miedo- me encogí de hombros.

Aún agarrados de la mano, salimos corriendo al ver al dragón. Éramos un poco miedosos, pero no podíamos permitir que ahora nos mate.

-Hay que correr -Rowan apuntó a un hueco que había en un árbol. Era lo suficientemente grande para que entremos los tres, así que nos dirigimos hacia allí.
Cuando estuvimos "protegidos", Landon empezó a ver si el dragón seguía allí.
Sin que puedan detenerme, salí del hueco y me alejé de ellos.

-¿Qué haces? -Landon intentó tomar mi mano, pero no pudo. -Mar! Ven, por favor.

No le hice caso. No tenía un plan en específico y ahora empezaba a dudar.

Saqué la linterna de la mochila y empecé a apuntar por todos lados con la luz.

Estuve un buen rato así, hasta que el dragón apareció adelante mío y se me acercó lentamente, me quedé quieta esperando la muerte, pero nunca llegó. El dragón me miraba fijamente y cuando apareció el sol, se fue.

Los chicos vinieron corriendo hacia mi y Landon habló.

-Estás loca, Mar.- me abrazó y sonreí, permitiendo sentir su cuerpo contra el mío.

Luego de eso, nos fuimos hacia la cabaña a descansar.