Nagyon Hiányzol

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En mi mente rondan pensamientos, 

 como olas que abrazan tulipanes en un mar sin fin. 

 Palabras nacen y mueren, y temo que ninguna tenga eco.


En la noche me pregunto, 

 si hay quien me extrañe en la oscuridad. 

 Si habrá comido bien, si ha hallado descanso. 

 Interrogantes que el viento lleva, pero en mi alma sé que está bien.


Veo corazones que se entrelazan, nuevos lazos que florecen con rapidez. 

 Duele el alma, quizás sea en vano, pero la visión del amor ajeno, brilla con un fulgor que no puedo negar.

En silencio apoyo desde lejos, tragando el amargo licor de la soledad. 

 Si las estrellas lo permiten, anhelo estar cerca de nuevo, para ser testigo y apoyo, de esos sueños que se forjan con ardor.

Rugido del Norte, Eco de FenrirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora