Hasta lo imposible

Capítulo 1 "Donde todo comenzó"

Sentía su teléfono sonar insistentemente sobre la mesita a un costado de su cama, había decidido aislarse de todos luego de sentir la humillación de aquel rechazo por parte de su amigo, había creído que sus palabras, actitudes y cariño hacia él era un indicio de coqueteo a su persona, pero qué iba a saber Hyunjin si aquel había sido su primer flechazo, su primer enamoramiento adolescente.

A tan solo 10 días de terminar las clases se había dado el valor de hacer una declaración con todas sus letras a Lee Felix, su amigo de la infancia, llevaban 13 años de amistad y un sin fin de aventuras en su espaldas, momentos maravillosos que por su culpa habían sido destruidos y quemados en aquellos hechos del día anterior.

Hyunjin recordaba los acontecimientos como si estuvieran en bucle sobre su piel.

Flash back~

Desde la mañana tomó aquel lienzo que había preparado por semanas para ese momento, se colocó el conjunto más apropiado que le permitiera la ocasión y metió a su bolso una carta que había escrito el día anterior listo para salir a la escuela, bajó con entusiasmo y una rapidez ágil hasta la cocina donde su madre había dejado su desayuno con una nota.

"Te dejé el desayuno preparado y comida lista para 3 días, con tu padre nos iremos donde tus abuelos, te llamaremos para contarte cómo se encuentran, que tengas un hermoso día hijo, te amamos".

Con una sonrisa dulce tomó la nota para pegarla en el mueble de los platos antes de comer su desayuno, luego se dirigió al baño para lavar sus dientes antes de salir disparado de su casa al notar que se le hacía tarde si quería ser el primero en llegar, durante su camino a la escuela escuchaba la música favorita de su ángel, apodo entregado por su yo de 8 años al contrario.

Demoró unos 15 minutos en llegar hasta su escuela y luego a su salón, con la emoción en su piel y la ansiedad aumentando con cada latido desenfrenado de su corazón, no es que fuera a ser algo malo o demasiado vergonzoso, simplemente dejaría el regalo en el pupitre de Felix y le entregaría la carta en persona, era un plan perfecto, más cuando había cumplido con su cometido, ser el primero en llegar.

Dejó las cosas en el primer pupitre junto a la ventana y se resguardó en la comodidad del suyo siendo el último de la fila, esperando a la hora en que llegara él, su espera fue eterna mientras sus ojos se cerraban y sus manos buscaban con desesperación sostener su barbilla en alto, entonces cayó dormido viendo a sus compañeros de clases entrar despreocupados.

Despertó alarmado minutos después cuando notó a toda la clase agrupada en el lugar de Felix haciendo un escándalo de risas enternecidas por lo que se veía era una declaración, mientras el rubio sostenía el lienzo en sus manos, un bello retrato de su persona resaltando sus pecas con acuarela simulando una galaxia maravillosa llena de estrellas, dejando sin aire a sus pulmones por el caos que le producía verse de aquella forma, entonces entre pasos torpes debido a lo aturdido que se encontraba Hyunjin por despertar en aquellas circunstancias, se acercó al contrario y extendió la carta, algo arrugada por el ajetreado viaje en su bolso, logrando que el más bajo soltara todo el aire contenido hasta ese momento antes de aceptar la carta y abrirla con las manos temblorosas.

"Mi querido Ángel,

Hoy 04 de noviembre he decidido dejar de lado el miedo y escribir mis sentimientos sobre este papel.

Me gustas desde pequeños, cuando vi tus hermosas pecas adornar aquella tímida sonrisa en casa de mis padres, podría unir cada una de ellas con un bolígrafo y crear infinitas constelaciones hermosas, cada una con tu nombre grabado en ellas.

Adoro tus ojos, aquellos que vi iluminarse de emoción contándome tus alegrías, llenándose de tristeza en tus dolencias y mirándome tan fijamente cuando compartimos tiempo juntos, adoro tus manos las cuales sostuvieron mi cuerpo en momentos difíciles y abrazaron mis penas y felicidades desde pequeños, así mismo podría continuar una lista infinitas de cualidades y características que adoro de ti, pero prefiero retratar mis sentimientos en hoja y lienzo, en palabras escritas y pintura.