Tomarse la fotografía para el anuario escolar se convirtió en la decisión más estresante de su vida. Podía sentir un tic nervioso a punto de salir a flote en su rostro mientras permanecía de pie en la larga de fila de estudiantes que esperaban su turno para ser fotografiados en el salón de actos. Un espacio idóneo para realizar diversidad de eventos de tipo teatral, académico y lúdico, contando con varias butacas para el público y un gran escenario. En la parte superior del escenario se encontraba la zona donde se estaba llevando a cabo la improvisada sesión fotográfica para el famoso anuario escolar.
Se miró a si mismo, vistiendo el característico uniforme de la institución. Camisa de un tono azul pálido, corbata vino, chaleco blanco de cuello en V, acompañado de unas franjas color negro acentuando la forma del cuello y rodeando los bordes de la prenda en la parte inferior, saco de color negro, un pantalón a cuadros color azul holandés con tintes blancos y azules de un tono más fuerte que el pantalón, y por último, tenis negros con la suela blanca y una ligera franja negra a los costados. Hubiera preferido usar otro tipo de ropa, pero no tuvo elección, debía apegarse al código de vestimenta.
Su suave cabello rubio le cubría la frente y parte de los ojos, yendo en contra de las indicaciones iniciales en las que se les pedía explícitamente que dejaran su rostro al descubierto. El organizador del anuario escolar se dio por vencido al ver que no era el único que había hecho caso omiso la instrucción, por lo que sonrió victorioso al salirse con la suya.
La fila se movió apenas unos centímetros. Se desesperó por haber sido uno de los últimos en llegar y porque los que estaban delante de él no dejaban de parlotear.
Para su mala suerte, todavía le faltaba mucho para pasar. La fila iniciaba en la parte central del escenario, bajaba por las escaleras y continuaba en el pasillo lateral donde se encontraban las butacas.
Dejó escapar un largo suspiro mientras movía insistentemente su pie sobre el piso de mármol. En cuestión de poco tiempo cumpliría cuarenta minutos de estar esperando, su paciencia se estaba agotando.
Asomó su cabeza fuera de la fila, enfocando sus ojos en el improvisado lugar que supuestamente les daría la mejor fotografía de sus vidas. Pudo apreciar brevemente la espalda de quien estaba tomando las fotografías porque el resto de alumnos que estaban delante de él también se asomaron, bloqueándole la vista. Frustrado, regresó a su lugar.
De un momento a otro la fila dejó de avanzar, estancándose. Puso los ojos en blanco cuando les anunciaron que tenían que hacer una pausa por un motivo que ya no quiso escuchar. Se cruzó de brazos, bastante inconforme. Su tarde destinada a dormir se había arruinado por ese retraso.
En un arrebato, despeinó su cabello, dejándolo completamente desordenado. No le importó en absoluto el resultado en el que quedó. Solo quería que le tomaran la absurda foto y lo dejaran en libertad.
La fila empezó a avanzar nuevamente y después de lo que le pareció una eternidad, llegó su turno. Caminó de mala gana hasta el banco de madera situado enfrente del ciclorama de fotografía y a en medio de las luces. Se agachó para dejar su mochila en el suelo y luego enderezó su postura, sentándose en el banco que le dio la impresión de que no era nada cómodo. Al sentarse y bajar la mirada, comprobó su hipótesis, era demasiado incómodo. Miró hacia adelante, dispuesto a poner su mejor sonrisa falsa para acabar con ese procedimiento de una vez por todas; no obstante, notó que el fotógrafo no estaba a la vista.
—Grandioso —murmuró con ironía, poniendo los ojos en blanco. Se cruzó de brazos mientras esperaba que el dichoso fotógrafo se dignara a aparecer. Si en el próximo minuto el responsable no daba señales de vida, se retiraría, llevándose consigo su dignidad.
Su pensamiento fue escuchado. El fotógrafo apareció, pero lejos de mostrar vergüenza o urgencia, llegó con absoluta indiferencia. Tomó la cámara de la mesa que le servía de apoyo en sus manos y se colocó frente a él. Por un momento se quedó pasmado al tener una vista de su rostro.
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Sharpness ₊⊹ Yechan x Jaehan (YCJH)
FanfictionUn fotógrafo y un estudiante escolar se dedican a buscar claridad en los detalles de la imagen inesperada de sus vidas que capturaron. ✉ By: dyzlyn. ✉ Ship: Yechan x Jaehan 》YCJH. ✉ Estatus: En proceso. ADVERTENCIA: ▪︎ Todo lo escrito aquí...