Ciro es una científica creada a partir de cadáveres de pacientes de su abuelo, que la envía a trabajar en el laboratorio de la base principal que él había fundado cuando joven, para que esta sea sus ojos y oídos en el lugar. Pero comenzará a tener p...
El Gran Líder, amo de la creación y de la existencia, alabado sea desde que nos conquistó y dominó nuestras tierras para traernos la paz y la justicia que necesitábamos en el mundo. El Gran Líder, aburrido de la corrupción de los países latinoamericanos, se unió a la política para traer mejoras y unión a los pequeños países que no están desarrollados e incluso parecen primitivos ante las grandes potencias, que solo los usan para extraer recursos y obtener beneficios. Pero desde que llegó el Líder, todo cambió.
Con su ejército de mutantes y criaturas mágicas, y con sus aliados de los diferentes países del continente que lo siguen lealmente, junto a sus Generales Letales, que él mismo modificó con puño y sangre para conquistarnos, no hay rodeos: o lo sigues, o desapareces.
Al inicio, no muchos estaban de acuerdo con su mandato totalitarista. El Gran Monarca inició grandes guerras en Latinoamérica para restablecer su poder, acabando con pequeños pueblos indígenas y culturas antiguas que, según él, ya no servían y eran obsoletas. Así se lo dijo a su general mayor, quien había exterminado a su propio pueblo por la misma razón.
Aquel gran hombre, carismático, amable y empático, llevó la guerra y ejecutó diferentes golpes de Estado a lo largo del continente. La guerra se extendió por años, hasta que llegó a un acuerdo con las grandes potencias: él se quedaría solo con los países "primitivos". Sin embargo, aceptó ese trato y no lo cumplió, pues días después realizó una invasión a otros continentes y países aledaños. El ataque fue tan masivo que expandió aún más su territorio, dividiendo la Tierra en dos partes: Las Grandes Potencias y las del Gran Líder.
Su mandato, que ha durado años, nunca ha sido interrumpido. Aunque hubo intentos, todos fallaron. Una pequeña revolución se instaló en la zona del conquistador, realizando pequeños atentados cada vez que podían. Las grandes potencias también intentaban atacar cuando les era posible. Una gran noche, el Líder decidió conquistar algunos planetas externos, solo por aburrimiento y para adquirir más conocimiento. Y lo logró: dos pequeños planetas quedaron a su disposición. No solo eso, también hizo un tratado con otros seres interestelares, obteniendo nuevas tecnologías que utilizaba mayormente para torturar o crear atentados contra sus enemigos.
Actualmente, existen tres bases militares importantes. Una está en el país donde empezó todo, cerca de la playa, totalmente contaminada, y comandada por el temible General Clawscoot. La segunda está al otro lado del mundo, en los países asiáticos, en una zona radioactiva, y es controlada por la hermana de Clawscoot. La tercera se encuentra en la zona ártica, oculta y difícil de hallar, comandada por un oso polar y sus pingüinos lunáticos. Aunque estas son las bases más importantes, existen otras de menor rango: bases, laboratorios, aviones, barcos, etc. Todo un gran ejército a su disposición.
Pero, en fin, el Líder es nuestro gran gobernante y soberano. No veremos su historia, sino las consecuencias después de años de lucha. Su general ya estaba viejo y cansado, y no rendía tanto como antes. Lo dejó en la base mientras pensaba en un nuevo plan para dominar el mundo. Pero esto quizá no sea lo esperado.
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