Alessa Real Belleza

Día 18

No es que me de miedo eso de ligar, simplemente es cuestión de lógica. Si no sabes hablar con otras personas ¿Cómo esperas ligar con ellas? La mayoría aprende a ligar a partir de los 13 o 14 años. En el caso de que la persona tenga habilidades sociales, carisma, y claro, cara.

Basados en mi historial de chicas, podrán tener contexto de porqué me asusta que Alessa me termine odiando.

Cuando me llegaron las hormonas tenía 13 años, en ese momento como el buen bruto que era, pensé que podría con una chica rubia que era DOS AÑOS MAYOR que yo.

Ahora que lo pienso, no sé con qué criterio pensé que podría hacer algo, pero de verdad fue con mi cara de niño pensando que sería simple en tanto no hiciera comentarios morbosos o dijera malas palabras. Cuando se enteró de lo que trataba de hacer me dio una cachetada bien fuerte, más que al tipo que le tocó la falda durante un descanso, y no me enojé con ella, porque sé que lo merecía.

La siguiente fue en uno de esos programas desmoralizadores para acceder a la preparatoria. Había mucha gente con carisma y belleza, yo creía que tenía carisma igual que mi hermano lo creía. Tuvimos amigos, de los cuales, actualmente sobrevive muy apenas esta Lupe. Pero ese montón, una de las chicas, pelirroja, me volvía loco.

La suerte quiso que solo le hablara una vez y después no regresó. Luego aparecieron como tres chicas de las cuales conseguí sus números y ninguna me respondió, si fingieron interés, pues lo hicieron de forma excelente porque es para aplaudir esa credibilidad con la que me hablaron. Ese asunto me dio risa en su momento. Porque hasta Emilio trató (medio trató en realidad) comunicándose con una chica que también padecía fobia social, se comunicaban de espaldas por medio de cartas hasta que el programa acabó y ni siquiera se despidieron.

(Me pregunto si no se habrá basado en ella para esas cartas sin destinatario).

Después llegó la prepa, y fue cuando me dieron mis cuadros ansiosos, por primera vez vi que las personas tóxicas no lo son abiertamente, sino que se esconden en una capa de buena moral y cuando ya no hay forma de que puedas escapar, te chupan la sangre.

Toda esa ira hizo que me enojara al punto en que mi estómago se abrió como si reventaras una bolsa y terminé en el hospital con una úlcera por estrés. Cosa que no ha cambiado mucho, pero deseo realmente que tal cosa no llegue a pasar de nuevo, que te cierren una herida de estómago no es nada agradable ni sencillo.

En todo ese tiempo, vi a personas que parecían buenas, que sonaban buenas, pero que resultaron ser lo peor del mundo, gente tóxica, excesivamente dramática, cruel, narcisista, egoísta, posesiva, a la cual, si no eres lo que ellos esperan, no te darán su "valioso tiempo".

Cosa que me enoja como no tienen idea.

Cuando adquirí ese mal humor, empezaba a contestar de forma un poco más fría, y cuando revelaban sus intenciones, me enojaba que fueran tan bonitas y que tuvieran el corazón tan podrido.

Por fortuna, y gracias a lo que yo sé de Alessa, ella no es así, pero que tengan piedad de mí si me entero de algo fuera de su locura que no debí enterarme porque, o por el señor, no quiero otro dolor en mi estómago y menos tener que volver al hospital por otra ulcera.

Ahora que ya saben todo esto, sabrán porqué me da miedo que me guste Alessa, y porqué, debería ser un error.

Dos horas después.

Ok, creo que tengo la solución. Si no pienso en ella ni en cosas románticas, no tendré que molestarme. Y si no hago caso a cuando le guste un chico o cuando haya bailes y esas cosas cursis que me molestan tanto, creo que todo estará en orden.

Ok, ya lo tengo. Es fácil ¿No?

Espero que lo sea.