Querido mejor amigo

Capítulo 48

Querido rastro de mi mejor amigo:

Me es raro escribirte después de que dije que no lo haría más; y más aún, si han pasado seis meses desde la última carta, y ahora, dos semanas después de eso. Aquí me tienes, escribiéndote de nuevo. O más bien, escribiendo al vacío, ya que, no has recibido ninguna de mis cartas, y posiblemente nunca lo harás.

Bien.

Blue, llegó como todas las mañanas y tardes.
Pero hoy, pidió permiso para que nos dejaran salir un par de horas. Iríamos a comer en un restaurante nuevo, y ¿la sorpresa? Fue HERMOSA.

Dentro del restaurante, a mano izquierda, había una librería. Es raro. Raro pero genial.

Después de comer, Blue pagó y nos dirigimos a el lado de la librería dentro del mismo.
Llegamos.  Vi que se dirigía a un estante y tomaba un libro. Se acercó a mi con ese libro en las manos y me dijo: "Este es tu libro favorito, y créeme, el mío también. Se que es raro, hemos hablado de algunos temas literarios, y probablemente no te haya mencionado que tu libro favorito también es mi libro favorito. Soy un desastre. Tengo un huracán en la mente, y  miles de vuelcos en el corazón cada que te miro. Te has hecho dueña de mi corazón, mente, espíritu, alma... No hago mas que pensar en ti, literalmente día y noche.  Pero basta, ya te habrá hartado con tanta habladuría y nada de actos. -Tomó mis manos y puso el libro en ellas-  Esta es una pequeña muestra de todo el amor que siento por ti, y quiero que sigamos juntos. SIEMPRE. Abre el libro por favor."

Lo miré extrañada, emocionada. Las lágrimas amenazaban con salir de mis ojos. De escaparse.

Abrí el libro. Había unas marcas en mis frases o citas favoritas. Pero, en mi súper  cita/frase favorita, había un cordón rojo que sobresalía, era como un separador pero no se veía el final del separador.
Lo tomé desde arriba, abrí el libro hasta esa página, y ¡WOW!
Finalmente una lágrima corrió por mi mejilla derecha.
Era un anillo de compromiso.

Blue lo tomó y se hincó frente a mi.
Me miró con esos ojos entre verde y café, esos ojos hermosos que me hacen perderme y olvidarme de los malos ratos, esos ojos que me vuelven loca y cursimente me enamoran.
Con su sonrisa encantadora, y con los ojos llenos de lágrimas me dijo finalmente: "Assil, eres la mujer más hermosa que he visto hasta estas alturas de mi vida, seguramente vendrán nuestras hijas o hijos y serán igual de hermosos que tu, y espero lo sean. Eres hermosa, linda, inocente, inteligente, pero también traviesa, loca, atrevida, así como valiente, fuerte, perseverante... -Se limpió una lagrima-
Eres  esa niña, esa chica, esa mujer que siempre había soñado; y que, de repente, llegó a mi vida.
Bien, está bien, ya no diré más, el fuerte sonrojo de tus mejillas y las lagrimas contenidas en tus ojos me lo dicen todo. También me amas, me quieres, me cuidas y proteges al igual que yo a ti, y sé que lo haremos hasta el fin de nuestras vidas, en la próxima y en las que Dios nos ponga enfrente.

Te amo. Te amo como no te imaginas ¿Te quieres casar conmigo?"

Lo levante de un tirón, lo abrace y lo besé.

"Claro que quiero casarme contigo"  -Respondí.

Las personas que nos estaban observando, empezaron a aplaudir a pesar de que nos encontrábamos en una biblioteca.

Nos besamos.

Ahora sé que pronto uniré aun mas mi vida con éste hombre tan hermoso, que me da todo lo que tiene y puede y hasta lo que no.

Lo amo. Me ama. Nos amamos.

-Una futura esposa anónima no tan anónima....