Habían pasado cinco décadas desde que el reino de Liora se cubriera de sombras y sufrimiento. La paz que antaño fue símbolo de sus tierras, era ahora un frágil equilibrio. Las leyendas sobre la gran guerra contra el Gran Mago de las Sombras aún resonaban entre susurros y canciones, como advertencia de los tiempos oscuros que podían regresar. Sin embargo, ese oscuro capítulo parecía ahora más cercano que nunca.
La reina Kelly había convocado a un caballero, uno de los más leales y valientes de su guardia. Max Verstappen, un joven de 26 años, esperaba en la sala del trono, tratando de ocultar su inquietud bajo una expresión de calma y respeto. Max había oído los rumores que susurraban las gentes de Liora: decían que el amuleto de Sergio, el mismo que usaba en los días en que era llamado el Gran Mago de las Sombras, había comenzado a brillar nuevamente. Según las viejas leyendas, ese destello significaba que Sergio, el poderoso y temido hechicero que en el pasado devastó el reino y traicionó a su mentor y al rey, había despertado. Su despertar era, para algunos, una advertencia; para otros, una esperanza.
El silencio de la sala del trono fue roto por los pasos de la Reina Kelly. Vestida con ropas de un azul profundo, y adornada con joyas brillantes, parecía emanar un aura de poder y serenidad. Pero aquellos que la conocían sabían que tras sus ojos claros y su sonrisa se ocultaba una mente calculadora y decidida.
—Caballero Max, —comenzó la reina, con una voz firme—, es un honor contar contigo para esta misión. Lo que te encomendaré no es una tarea común. Requiere de lealtad, valentía y... la capacidad de actuar más allá del miedo.
Max era alto y de complexión atlética, con cabello castaño claro y ojos de un azul intenso que reflejaban determinación. Su armadura, desgastada por los años de servicio, mostraba el compromiso de un hombre que había trabajado duro para ganar su puesto. Sin ningún rastro de magia en su sangre, algo que era casi inaudito en el reino, Max había tenido que abrirse camino como guerrero, forjando su lugar en la guardia real con esfuerzo y sacrificio. No era extraño que se mostrara incrédulo cuando la reina le explicó la naturaleza de su misión.
Max inclinó la cabeza en señal de respeto, pero el leve fruncimiento en su entrecejo dejaba ver su duda. ¿Qué podía ser tan importante como para que la misma reina le hablara de este modo? Sabía que el reino estaba en una situación delicada; los rumores de guerra con el reino vecino no eran infundados, y él había escuchado a otros caballeros especular que el enemigo podía estar planeando un ataque.
—Estoy a su servicio, mi reina —respondió Max, con voz firme.
Kelly lo miró con una mezcla de gravedad y compasión, como si entendiera el peso que estaba por poner sobre sus hombros.
—Debes entrar al Bosque de Arcania y encontrar a Sergio, el Gran Mago de las Sombras —declaró, cada palabra pesada de significado—. Liora necesita su poder... o al menos, una oportunidad de entender sus intenciones.
Max sintió un escalofrío. Las historias sobre Sergio siempre le habían causado curiosidad, y a la vez, cierto temor. Se decía que había sido el mago más talentoso de su generación, capaz de controlar las cinco grandes magias, un poder reservado solo a los elegidos. Pero su ambición, o quizás su incapacidad para soportar tanta fuerza, lo había convertido en un ser oscuro que casi destruyó Liora. Él había traicionado al rey Nelson y asesinado a Jos, su propio mentor, el gran líder de la asociación de magos y un héroe venerado. Sin embargo, Jos también era el ancestro directo de Max, un vínculo que pocos conocían y que él mismo prefería mantener en secreto, pues carecía del poder mágico que todo descendiente de Jos debería tener.
Max, al no poseer ni un mínimo de magia, había tenido que esforzarse el doble para convertirse en caballero. A pesar de que los actuales habitantes de Liora solían tener al menos un atisbo de magia, en él parecía no haber rastro alguno de ese don. La falta de poderes siempre había sido un motivo de duda y de burla por parte de algunos, pero en lugar de doblegarse, Max había utilizado esa debilidad como motivación, convirtiéndose en uno de los guerreros más fuertes de la corte.
ESTÁS LEYENDO
El gran mago de Liora ~ Chestappen
FanfictionUn siglo ha pasado desde la noche en que el mago prodigio Sergio desató su poder y sumió al reino de Liora en caos y destrucción. Desde entonces, el amuleto que alguna vez portó ha permanecido en el reino, sin brillo... hasta hoy. Ahora, el respland...