CAPITULO 06|

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Los siguientes dias no hubo mucho que decir, no hicieron mucho, el ambiente estaba tan tenso en la casa, Pascale se habia negado a hablar sobre lo que sucedio en la cena, pero eso no negaba que se estaba comportanto horrible con Charles, incluso no le hablaba demasiado. Carlos notaba este incomodo ambiente por lo que como un vil cobarde que ama su vida, se alejo tantito llevandose consigo a Ollie. No, no, no, él no era quien para decir algo de la situacion y era algo que Leclerc hombre y Leclerc mujer debian arreglar.

Ademas, por alguna razon Charles andaba tenso, no se acercaba mucho y como no tenian visitas ni siquiera se habian hablado bien, no entendia ni por que cacas estaba sucediendo eso. Hasta el domingo siguiente sucedio algo rentable, algo que sirve como anecdota. Esa mañana de domingo no eran ni las perras ocho de la mañana cuando Pascale llego golpeando la puerta ruidosamente, Carlos se levanto rapido, eso era algo que le habia quedado de ser policia el estar atento, al primer golpe se levanto, corrio a la cama y se envolvio en las cobijas con aun muy dormido Charles.

Se tapo, abrazo a Charles por la cintura sintiendo como el hombre se acercaba mas, demasiado.

Trato de no ponerse nervioso.

— Adelante — dijo. Tal vez debio despertar a Charles, pero tampoco entendia como es que no se habia despertado por los golpes.

— Oh hijo, ¿aun esta dormido? — pregunto la mujer, Sainz asintio — Despiertale, dile que iremos a misa hoy a las ocho.

Carlos solo asintio viendo irse a la mujer, no dijo nada, solto a Charles pero entre dormido se acerco mas, se permitio adimirarlo por un solo segundo, queria guardarlo en una cajita y no sacarlo de ahi protegiendolo de todo y todos.

— Charles — le susurro — Luna, luna, luna mia.

— No, cinco minutos mas — dijo acurrucado

— No, levantate ya vino tu mamá. quiere que vayamos a misa. — aviso

Despues de Charles renegando mientras se levantaba e iba directamente al baño, Carlos se dedico a buscar su ropa, saco una polo negra, la combino con un pantalon negro, botas tipo militar y un cinto. Dejo la ropa doblada en el sillon y para cuando Charles salio con una toalla enredada en la cintura entro él. Se ducho.

— ¿Nos combinamos? — pregunto Charles sin entrar al baño.

La pregunta lo saco de onda pero asintio, sin embargo se sintio tonto cuando se dio cuenta que Charles no estaba viendo eso. Abrio los ojos y para su horrible mala suerte le cayo shampoo en el ojo, sin quererlo y por instinto grito. Escucho la puerta abrirse y entro un muy alterado Charles.

— ¿Que paso? — dijo rapido sin importarle, con el vapor saliendo de la ducha no sabia exactamente donde estaba.

— Jabon — dijo — en ojo.

Charles se rio, con su mano y sin ver mas de lo necesario, guio a Charles hasta la cascada donde enjuago, eso se veia raro, Carlos, morenos alto, bien musculoso y muy mojado por la ducha y en cambio Charles era mas bajo, tenia aun la toalla enredada en la cintura y era mas blanco que Carlos.

La puerta sono y alguien entro.

— Charles, ¿estas aqui? Tu mamá me dijo que estarias aqui. — llamo alguien, conocia esa voz

— Ivan — susurro Charles.

Carlos no entendio por que pero Charles se metio a la ducha tambien, Carlos se hizo a una esquinita.

— ¿Estas en el baño? — pregunto de nuevo Ivan. Carlos seguia sin entender, se enjuago la cabeza mientras Charles hablaba bajito. — Voy a entrar.

— Sal, sal tu — dijo practicamente escondiendose detras de Carlos, quien seguia sin entender pero obedecio, solo saco su cabeza por entre la puerta de la ducha.

Ivan se sorprendio de verlo ahi.

— Amigo, te equivocaste de habitacion, vete. — le ordeno. El chico trato de hablar pero lo volvio a interrumpir. — Solo vete.

Supo que salio por que escucho la puerta entonces se relajo.

Pero fue peor cuando cayo en cuenta la situacion en la que estaba con Carlos.

— ¿Que fue eso, luna? — pregunto

— Mi ex — respondio con una bonita sonrisa nerviosa.

Carlos alzo las cejas con una sonrisa.

— ¿Que paso como para que te pusieras asi? — pregunto Carlos acercandose.

La mirada de Leclerc se mantenia en sus ojos, al menos eso lo agradecia.

— Bueno, no es exactamente la definicion de ex bueno. Inutil a decir verdad. — se sincero

— Espero no digas eso cuando terminemos — aviso Carlos.

La mirada de Charles se nublo: — Nop, de ti no tengo nada que quejarme.

Carlos asintio, por alguna razon sintio el lugar mas pequeño, comenzo a sofocarse pero no le dio importancia. La tension era muy palpable, Charles no despego su mirada del rostro contrario y por primera vez Carlos inicio el beso, Leclerc no respondio bien los primeros segundos, pero despues lo hizo, las manos de Charles fueron a su cuello acercandolo más.

— Mgh — escucho el pequeño sonido soltado por Leclerc que solo logro calentarlo mas. — Mierda, Sol.

Carlos bajo sus labios al cuello del de Mónaco y reposo ahi con solo besos. La cordura volvio a él.

— Si, no tendre nada de que quejarme de ti. — reanudó Charles con una sonrisa, la carcajada de Carlos le erizo la piel.

— Salte, perdere la cordura — dijo Carlos separandose, Leclerc asintio saliendo de la ducha, tomo una toalla seca y por fin salio. — Maldita sea, Charles.

Cuando salio de la ducha y se cambio se dio cuenta que Charles ya estaba vestido, un poco parecido a él por lo que combinaban perfecto. Salieron de la habitacion, pero Charles lo detuvo.

— ¿Que pasa, Luna? — pregunto deteniendose

— Te tengo un regalo, chiquito. Mas bien parte de tu pago. — susurro. Carlos no entendio, se suponia que su pago era el viaje y la boda, no necesitaba nada mas, por lo que iba a reclamar pero Charles lo interrumpio — No, solo recibelo.

Le entrego un reloj, un reloj bonito y que se veia caro, no quiso decir mas, solo beso la frente de Charles con una sonrisa.

— Gracias, luna mia. — dijo. 

Luna y Sol no pueden estar juntos | CHARLOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora