Narrador
Laurens sentía que era una mala idea, pero todo lo hacía para complacer a su bello esposo y padre de su pequeña Maggie. Su matrimonio había comenzado en gran manera y ella no deseaba decepcionarlo, quería complacerlo y que mejor manera de comenzar con una de sus fantasías, a pesar que Laurens se repetía en su mente que era una mala idea y más caminando afueras del edificio donde viven con sólo un abrigo, desnuda, siendo guiada por una cuerda qué se enganchada en una correa posicionada en su cuello.
Él la había echo caminar casi diez vueltas al edificio con sus orificios llenos de juguetes, para Lauren eso era una tortura , una deliciosa tortura.
—¿Dónde quiere mi nena que la folle?
—Ahí..—Señala aquel asiento delantero a las afueras del penthouse. El ángulo daba a ver casi la calle, cualquier auto podría ver que sucedía, y eso excitaba a la mujer más. Ella se había abierto con Christopher dejando de lado su timidez, comenzó a experimentar muchas cosas que quedo aceptando qué era una ninfomana, solo con su esposo.
Él al oírla, sonríe en grande. Camina y se sienta en el asiento. Con una rapidez, la bestia de ojos tormenta quito lo que estorbaba mostrando su erección qué suplicaba por atención.
—Ven aquí, nena.
Ella quito lo único que cubría su cuerpo y fue hasta su esposo desbordando sensualidad y seguridad. Eso vuelve loco a Christopher de gran manera que al tenerla frente suya, la atrae y con brusquedad saca aquel tortuoso juguete del interior de su mujer para remplazarlo con su verga.
—¡Oh..!/mierda nena.—ambos gimieron ante la intromisión de Christopher. Él por la suavidad en que lo recibía el interior de Laurens, y ella por el tamaño de su esposo, era tan grande que de una sola la volvía loca a tal manera de emborracharla de placer.
Quien iba a imaginar que esa noche loca, les iba a dar el regalo más hermoso y más anhelado por nuestro coronel.
Christopher
Por fin la tengo aquí, por fin mi pequeña Aurora esta aquí, tanto tiempo, tanto tiempo aguante no solo para tener a mi esposa, si no a Maggie y ahora mi hermosa Aurora, no dejaba de ver a ambas a Laurens cansada luego del parto sosteniendo a nuestra pequeña hija mientras la mira con amor.
Si imaginarlo fue hermoso, verlo, sentirlo y vivirlo es mejor.
—Es hermosa, cielo..
La respiración se me atasca por como me ha llamado. El recuerdo de ese apodo en mi sueño me hace creer que al ella decirlo estoy por buen camino.
—¿Cómo me llamaste, nena?—repitelo, repitelo, hermosa.
—Cielo? —Cierro mis ojos con fuerza y ella se inquieta por mi reacción. —si no quieres..—la interrumpó.
—Acabas de dar a luz y estas buscando que te preñee de nuevo, mujer?
No es el momento
No es el puto momento.
Esos putos demonios de satan pueden esperar.
Su sonrojo me da mil vidas, ni siquiera puedo alejarme de ella, maldita sea. Me tiene en la palma de su mano.
Así es estar enamorado? Carajo.
Dos años después.
No lo cumpli, me deje cegar y preñe a Laurens, ahora veo a esos gemelos del diablo dormir, pero no me confío, cuando estén más grandecitos andarán con sus cosas. Lo presiento.
—Christopher, son las dos de la mañana amor, ellos están dormidos ¿Qué haces?
—Esperando.
Ella me mira con rareza, no lo entenderías amor, estoy esperando que dejen de actuar como niños normales, esos bebés a mi no me toman por estúpidos.
—Sí los miras de esa manera, así no crecerán.
—Lo harán, en un abrir y cerrar de ojos tendrán ocho meses. —como los imagine.
—Entonces, ¿Por qué los vigilas así?
—Espero el cambio.—entrecierra sus ojos tratando de descifrar lo que intento decir.
—No comprendo, cielo.
No, no!
Maldita seas, mujer
Cierro mis ojos ante la ola de placer que viene desde mi espalda y baja por todo mi cuerpo —Luna, que te he dicho de ese apodo.
Ella sonríe con inocencia.—No lo recuerdo.
El cosquilleo comienza a aparecer y siento mi entrepierna despertar solo por ella.
—Deberías, porque a pocos meses de recuperarte del parto de Aurora, te preñe de estos mocosos.
Ella se acerca y coloca su mano en mi desnudo pecho. Me quiere distraer de la misión principal, joder. —pues.. esperemos a que me recupere para que cumplas tus palabras.
—Te amo, hermosa.
—También te amo, Chris.
Me inclino para capturar esos labios qué me tienen tan obsesionado hasta que..
—¡Waaah!
Mierda, mocosos de lucifer.
...
Bueno esta pequeña historia de mi loca imaginación a finalizado!
Se que no estamos acostumbradas a un Christopher romántico, pero creo que era necesario.
❤️🔥❤️🔥
Hijos
Margareth (Scott) Morgan 3 años
Aurora Athenea Morgan 1 año.
Christopher Reece + Christopher Alexander 2 meses.
Créditos de imágenes utilizadas a sus respectivos autores.
Vviancy fuera!
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BAILARINA (Christopher Morgan + Laurens Caistar)
FanfictionUna historia de sueño.. ( Trilogía: Pecados placentero ) Crédito ' Eva Muñoz ' Minific ✔️ Imagen de portada, crédito a su autor!