A la mayoría de la gente les gustan los viernes pero sinceramente yo odio todos los día de la semana, todos se sienten igual. Al menos el miércoles puedo vestirme de negro para honrar a mi serie favorita, American Horror Story. A la mayoría de las personas les gusta el viernes porque salen con sus amigos pero como yo no tengo amigos, además de mi papá, me quedo con él viendo series y películas, gran forma de empezar una nueva vida como adolescente. Ultimamente no he hablado tanto con Alex.
Necesito amigos y pensé, ¿Por qué no el chico maravilla?
Estamos juntos en muchas clases, eso hará hablar con él más fácil. Creo que me haría bien un poco de ayuda en este pueblo, tan solo llevo una semana y media aquí y creo que ya me metí en más problemas de los que podía escapar pero tengo que admitirlo, meterse en problemas y salirte con la tuya es lo máximo aunque no es nada fácil salirte de problemas cuando eres como yo.
Hace un par de días estaba en la escuela apunto de irme a mi casa y un chico, apareció de la nada y me empezó a molestar, yo lo ignoré pero creo que eso no funcionó, porque aunque suene raro me empezó a perseguir como un niño pequeño pero él no estaba solo, tenía como 3 amigos junto con él persiguiéndome a mi, "La nueva"; como ellos me decían a gritos. No se porque decidí salir corriendo también, creo que por el hecho de que no quería que me atraparan... no sabía que rayos me iban a hacer. De un momento a otro perdí el control y me puse de cuatro patas y empecé a correr tan rápido como pude pero sin notarlo mis colmillos empezaron a sobresalir de mi boca y mis uñas dejaron de ser uñas y se convirtieron en garras. Mi corazón empezó a latir tan rápido que pensé que de un momento a otro se saldría disparado de mi pecho. Cuando pensé haberlos perdido por completo había llegado a las canchas de fútbol y me escondí en los vestidores de hombres, pensando que no había nadie ahí porque ya era muy tarde y ese día no había entrenamientos de nada. De repente logré escuchar a alguien cantar en las duchas y la verdad cantaba muy bien pero en vez de descubrir quien era me escondí en uno de los lockers al escuchar los pasos agitados de alguien que venían hacía donde me encontraba.
La puerta de los vestidores se abrió y hasta ese instante no había notado que aquella persona que estaba cantando había parado, como si hubiera desaparecido.-Sal de donde estás pequeña. Es hora de tu novatada.- Los otros chicos empezaron a reír debido al comentario del que parecía el que mandaba.
-Bien dicho Ethan, la nueva tendrá que sufrir un poco si es que quiere sobrevivir aquí.- Volví a escuchar las carcajadas de los 4 idiotas, no saben con quien se están metiendo. Cuando estaba apunto de salir a defenderme, alguien me ganó la jugada.
-¿Ustedes qué hacen aquí estúpidos? ¿Vienen a tomarse una ducha juntos otra vez? Porque yo diría que les hace falta.- Me quedé atónita al pensar que alguien hubiera dicho algo así.
-¿A ti que te importa O'Connell? ¿No tienes alguien más quien molestar? Oh lo siento, se me olvidó que no tienes amigos.- Al parecer el chico se creía muy genial como para presumir que él si tiene "amigos". Él otro chico no respondió nada al respecto, tal vez es porque en realidad no tenga amigos.
-Chicos podemos hacer las cosas fáciles. Pueden irse como si esta conversación nunca haya existido o quédense 5 segundos más y terminarán en el hospital sin ni siquiera darse cuenta.-
-O la tercera opción, vete a la mier...- Ethan, como al parecer se llamaba el chico, no pudo terminar lo que iba a decir porque "O'Connell" lo empezó a golpear tan pronto decidió decir no a su oferta. Después de un par de minutos de suspenso de saber quien había ganado la pelea los golpes y los gritos había parado.
-Puedes salir del locker ahora, no creo que ahora te puedan lastimar estos idiotas.- No se como supo que estaba ahí pero ya había visto de lo que es capaz así que decidí salir del locker como si nada hubiera pasado.
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Until Death Do Us Part
Science FictionHayley McCall es una chica de 17 años, casi 18 que es diferente en cierto modo y cuando ella y su padre se mudan a Tolwer, un pueblo en medio de la nada, por cierto accidente que Hayley tuvo, todo cambia y mejora. Ella conoce a Alex Lahey, un chico...