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♡‧₊˚ Una recopilación de One Shots qué me encontré en AO3.
♡‧₊˚ Dejaré el crédito a los respectivos autores.
♡‧₊˚ Recuerden solo son cubitos.
♡‧₊˚ Nuevo capítulo cada domingo.
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dio mio este cap esta un poco largo mis dedosauuuuuuuu
ʀᴇꜱᴜᴍᴇɴ: Lo q sigue
ᴀᴜᴛᴏʀ(ᴀ): Hentaineko1313
ᴇɴʟᴀᴄᴇ ➨➨➨ ...
El vínculo de Philza con la muerte era complicado; desafiaba el orden natural de la existencia. Otras almas podían beber del agua limpia de la fuente de la Muerte y olvidar sus penas y males. Él bebía y aún llevaba las cicatrices de sus vidas; eso moldeaba su alma en una forma única para él y solo para él. Tal vez esa haya sido la razón por la que la Muerte se interesó tanto en la difícil situación de Philza.
A menudo se quedaba a su lado, atraída por el encanto de sus recuerdos y la calidez de su presencia. Conversaban durante horas, posiblemente días, y nunca se aburrían el uno del otro. Ya fuera para hablar de la existencia en constante cambio fuera de su reino o para compartir historias de mundos olvidados hacía mucho tiempo, cada vez se acercaban más. Era algo que Philza incluso se atrevía a esperar con ilusión.
Sin embargo, eso no le facilitó el renacimiento, ni la Muerte tenía una respuesta a por qué era así. Cada nueva vida traía consigo las mismas luchas y el mismo dolor. Anhelaba un respiro, una oportunidad de descansar y escapar de la marea incesante. Sin embargo, con cada vida que pasaba, el mundo parecía volverse más cruel y menos amable.
La muerte se mostró comprensiva, pero le dijo que no podía concederle ese deseo, que si su antigua alma era arrastrada a otro cuerpo, tendría que dejarlo ir. Le dolió oír eso y le rompió el corazón aún más. Se sintió agradecido cuando el destino lo arrancó de nuevo de sus garras. Tal vez finalmente tendría algo de paz.
Y al principio, esta nueva vida parecía ser lo que necesitaba para sanar. Su nuevo padre era un viejo militar que deseaba un hijo al que pudiera entrenar como reemplazo. Cuando Philza era un omega, nada cambió en su rutina ni en su entrenamiento. Su padre decía que Alfa u Omega un chico debía saber pelear. Fue la primera vez que Philza sintió el peso del maldito levantamiento secundario. Entrenó cada vez más duro, cuando era un adolescente finalmente venció a los estudiantes Alfa más duros de su padre. Se sentía orgulloso en esos momentos, esto era lo que anhelaba.
Entonces los pretendientes habían comenzado a llegar. Al principio Philza pensó que era una broma, ¿cómo podría ser entregado a cualquiera de ellos, todos habían caído ante su fuerza? Su padre le dijo que debería sentirse afortunado, no muchos omegas de su clase recibían estas ofertas. El miedo lo llenó ante esas palabras, su padre no solo le había estado permitiendo la libertad. Había estado entrenando a Philza para una novedad, una mejor moneda de cambio. Funcionó.
Los alfas de todo el mundo oyeron hablar de la exótica ave rubia con alas de sombra que solo aceptaría al amante más fuerte. Los reyes extranjeros pidieron verla, los señores lejanos enviaron dinero con la esperanza de ganarse el favor del padre de Philza. Philza había planeado huir, incluso hizo las valijas para irse. Su padre debió saberlo, encontró sus provisiones. Después de la cena de la noche en que planeaba huir, se quedó dormido de repente. Cuando despertó, su vida había cambiado para peor.
