Otro mundo. (En Pausa)

Cambiando algo.

Reece y Regina vieron todo en cámara lenta. No hubo un segundo de tiempo para reaccionar aparte de abrazar al otro e intentarlo cubrir.

Dos manos blancas y delicadas aparecieron de la nada los agarró de la ropa y los estiró.

Para cuando se dieron cuenta ellos estaban sentados en un sofá azul pastel.

-Qué...?

Andy cerró rápidamente el portal.

Del otro lado, el auto había explotado luego de tantos disparos.

El coronel y el ministro recibieron la noticia y sintieron que el aire se les iba por completo.

Andrea sabía que estas personas eran muy importantes para su prometido así que le llamó.

Christopher vio su celular respiró profundo y contestó.

-Amor?

Andy se sintió triste al oír la ronca voz de su novio. Sabía que le había afectado la noticia.

-Ellos están aquí.

-Qué?

-Tu tío y tu abuela. Ellos están aquí en el apartamento.

-Voy para allá.

Christopher agarró a Alex y lo llevó hasta su auto. Ellos también habían sido atacados y su vehículo quedó inservible.

Condujo a gran velocidad hasta la casa de Andy. Se bajó y dejó a Alex atrás.

El ministro no entendía nada pero igual lo siguió.

Christopher y el ministro subieron al ascensor en silencio.

Alex aún estaba procesando la muerte de su madre y hermano.

Christopher salió del ascensor y fue directo a poner la contraseña del apartamento. La puerta se desbloqueó y abrió la puerta con brusquedad.

-Reece!

Alex se quedó confundido en la puerta.

-Abuela.

-Haz enloquecido? Ellos...

Todas sus palabras fueron tragadas al ver a su hermano abrazar a Christopher.

-Reece?

-Ven dale un abrazo a tu hermano favorito.

-Reece!

Alex se acercó y lo abrazó con fuerza.

-Deja de lloriquear.

Regina abrazó con fuerza a Christopher.

-Creí que habías muerto.

-Pero no fue así.

Ella también creyó que iba a morir.

Alex se separó de Reece y se acercó a su madre.

-Mamá, me alegro tanto que estés viva.

Cerró fuertemente los ojos y recargó su frente por el hombro de la mujer mayor.

Ellos se sentaron en el sofá y hablaron por un tiempo.

Christopher observó las tazas de té.

-Y Andy?

-No lo sé. Dejó las tazas y se fue.

Christopher se levantó del sofá y subió las escaleras rumbo a la habitación.

Abrió la puerta y vio a Andy acostado en la cama matrimonial.

-Andy?

-Hola, Chris.

Christopher subió a la cama y abrazó al otro chico.

-Qué haces aquí? Creí que estarías abajo.

-Supuse que necesitarían tiempo en familia.

-Tú también deberías de estar ahí.

Él negó.

-Ellos no son mi familia.

-Qué?

-¿Por qué tengo que considerar familia a unas personas que no me ven así?

El coronel recordó las palabras de su abuela.

-Ella no lo decía en serio.

-Pero yo me tomé sus palabras como la verdad. La comida está lista puedes invitarlos a comer si quieres.

-Les diré que se vayan si te molesta.

-No me molesta.

Christopher suspiró y besó la mejilla regordeta de su omega.

-Ya comiste?

-Lo haré luego.

El coronel se levantó de la cama y salió de la habitación.

-Tienen hambre? Andy preparó algo para comer.

-Dónde está ella?

-En la habitación.

-Por qué no baja?

-Crees que él se siente cómodo con ustedes luego de lo que pasó? Es mejor que mantegan la distancia, él es tan importante para mí tal vez incluso más que ustedes.

-Qué es ella? Cómo carajos nos trajo aquí?

-No tengo porqué decirles nada.

Christopher fue al comedor y vio dos platos en la mesa.

Suspiró y puso más platos.

Sirvió un poco y lo puso en una bandeja.

-Ya vuelvo.

Andy sonrió al ver a Christopher ingresar con una bandeja en manos.

-No debiste molestarte.

-No puedo dejarles sin comer.

Andy se sentó en la cama y recibió con gusto la bandeja con comida.

-Gracias.

Christopher volvió al comedor.

-Qué cosa es ella?

-Alex, cuida tu boca si no quieres que te la reviente. Él salvó a Reece y a la abuela, sé agradecido y no hagas preguntas innecesarias.

Christopher se sirvió un poco de comida en su plato y se sentó.

-No quiere hablar con nosotros?

-No. Si los salvó fue porque son mi familia.

-Es peligrosa?

-No. Sino hacen nada que no deban hacer, él no será peligroso.

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Andy se llenó de confusión ante la persona que la había llamado.

Él había salido de su apartamento para ir a la mansión cuando lo llamaron.

-Andrea, verdad?

-Sí. Qué necesitas?

-Tienes tiempo?

-No. Necesitas...?

-Quiero decirte que Chris y yo tenemos algo de historia.

La mujer esperó una reacción de parte de Andy, que obviamente no tuvo.

-Y?

-Yo fui una de las mujeres de Christopher. Pero yo fui especial, él me dijo que me amaba.

-Lo sé. Yo sé todo de Christopher, hasta el número de glóbulos blancos en su cuerpo. No necesitas contarme algo que ya sé.

Andy le sonrió suavemente.

-Fuera cuales fuera tus intenciones al decirme esto, no te va a funcionar porque literalmente yo sé TODO de Christopher.

Andy se subió a su auto y el guardia cerró la puerta.

La mujer miró sorprendida como se iba el auto.

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