𝗢𝗰𝗲𝗮𝗻 𝗘𝘆𝗲𝘀 ⇌ Kookmin

ᴘᴀʀᴛᴇ ❶❷

Después de otro día agotador, Jimin se obliga a tomar una ducha. Se tira contra la cama preparándose para dormir y termina encontrando con una sorpresa (no por primera vez en los últimos días) que Jeongguk le envió un mensaje de texto. Tiene que leerlo tres veces antes de que su mente decodifique que de hecho, el chico le está hablando a él.

Jeongguk:

Nos vemos en las piscinas

Yo:

¿Por qué?

Jeongguk:

Para terminar lo que empezamos

La respuesta es ambigua, pero de nuevo, lo que no pasa con Jeon Jeongguk es que el chico es complejo como el sistema solar, Jimin solo reza para no caer en ninguno de sus agujeros negros otra vez, la herida de la última vez aún no está completamente cerrada, lo que sirve como prueba de su descuido.

En el fondo, sabe que no es buena idea estar solo con Jeongguk, ya que es una receta inevitable para el caos. Pero la curiosidad y la expectativa hacen un buen trabajo al hacerle olvidar el sentimiento de dolor que sintió la última vez que chocaron.

Al final, su tendencia masoquista parece decidir acabar con su dilema. Jimin se mueve mucho más rápido de lo que le gustaría admitir, y antes de que se dé cuenta, está parado frente a las puertas del lugar un poco más tarde, con el atardecer aclarando el final de la tarde.

Las únicas luces en la habitación parecen provenir de las piscinas que vibran con un atractivo tono azul bebé. Jimin se asusta cuando la puerta se abre de repente y revela a Jeongguk. Siente que su inquietud se apodera de él rápidamente cuando recuerda el contexto en el que se encuentran los dos.

El silencio es lo único que comparten durante mucho tiempo, incluso después de sentarse juntos en la piscina, con los teléfonos y las billeteras lejos de la pareja para evitar accidentes. Muchas cosas esperan ser dichas, pero parece que no hay suficientes palabras para describir sus sentimientos, por lo que ninguno de los dos abre la boca, sin saber por dónde empezar.

"Lo siento" Jeongguk finalmente rompe el código de silencio - su voz resonó en el lugar - y Jimin se sorprende porque de todas las cosas que esperaba que el otro dijera, no anticipó lo más simple.

"¿Por qué?".

"Por todo" dice Jeongguk en voz baja y se establece nuevamente el silencio entre los dos "No soy el más excelente en momentos sociales" suspira "lo que..., ya sabes..., me lleva a malentendidos" Jeongguk se rasca el cabello y Jimin puede ver que es difícil para el chico elegir sus palabras.

"Abro la boca para decir algo, cualquier cosa, pero..." medita frunciendo el ceño "pero en cambio, sale algo completamente diferente".

"No me ayudes con el hecho de que no me gustan las confrontaciones", completa Jeongguk, sorprendiendo nuevamente a Jimin. "No fue mi intención herir tus sentimientos", mira a Jimin, mordiéndose el labio inferior, "es que la mayoría de las veces no puedo expresarme bien, lo siento, no debería haber descargado mi frustración contigo".

Hay algo en el chico y en su tono melancólico, como si lo hubiera hecho muchas veces antes. La explicación es vaga y el ceño fruncido en el rostro del chico sugiere que las palabras elegidas no transmitieron todo el significado que él quería. Jimin sabe que debe ser difícil para Jeongguk dejar de lado su orgullo y explicarse.

"Sé que te gusto, hyung"

Recordar esa frase provoca punzadas en el pecho de Jimin.

Jimin probablemente debería estar de acuerdo y finalmente decir que sí, de hecho, hirió sus sentimientos, lo hizo sentir inadecuado, ansioso y menospreciado. Probablemente debería maldecir a Jeongguk en sus próximas dos vidas o golpearlo en la cara; pero Jimin nunca fue del tipo que demuestra violencia, que guarda rencor.