ᴄʜᴏᴏꜱᴇ ʟᴏᴠᴇ ♡! ||ʙʟʟᴋ

"¿Romance Entre Sae y ___?".

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___ estaba viendo su celular, pasando de una aplicación a otra, aún algo absorta en sus pensamientos después de la charla con Reo. Sin embargo, sus reflexiones fueron interrumpidas cuando oyó la puerta abrirse una vez más. Alzó la vista, esperando ver a algún otro de los chicos conocidos, y se sorprendió al ver a Hiori asomándose tímidamente.

"Perdona, ¿te interrumpo?" preguntó con su tono suave y educado, como si no quisiera molestar.

Ella guardó el celular y le sonrió. "Para nada, Hiori. ¿Necesitas algo?"

Él se acercó, rascándose la nuca con una ligera incomodidad. "Bueno, me duele un poco la muñeca desde el entrenamiento de hoy, y pensé en venir aquí para que lo revisaras."

___ lo hizo sentarse en una de las camillas y comenzó a examinar su muñeca con cuidado. Mientras lo hacía, notó que Hiori la miraba en silencio, como si quisiera decir algo pero no encontrara las palabras.

Finalmente, él se animó. "Es solo que... me he dado cuenta de que pasas mucho tiempo aquí con nosotros, cuidándonos a todos. Y no sé si alguien te lo dice seguido, pero... se nota cuánto te importamos."

___ lo miró sorprendida, sus palabras le parecían honestas y sinceras, y le dio una sonrisa de agradecimiento. "Bueno, para eso estoy aquí. Y aunque a veces sea difícil, ustedes hacen que mi trabajo sea más especial."

Hiori asintió, pensativo. "Es que a veces me pregunto si te tomas un momento para descansar tú misma. Cuidas de todos nosotros, pero... ¿alguien se preocupa por ti?"

Ella rió un poco, sorprendida por su perspicacia. "Bueno, la verdad es que no me lo he planteado mucho últimamente. Creo que ustedes se han vuelto una prioridad para mí."

Hiori pareció reflexionar sobre eso, y luego la miró con una expresión decidida, casi como si hubiera tomado una resolución en ese momento. "Si alguna vez necesitas un respiro... o simplemente hablar, puedes contar conmigo."

___ sintió un cálido alivio por sus palabras y asintió, tocando su hombro en un gesto amistoso. "Gracias, Hiori. Lo tendré en cuenta."

Ambos se quedaron en silencio unos instantes, en un ambiente tranquilo y reconfortante. Cuando terminó de revisarle la muñeca, Hiori suspiró, aliviado, y se quedó un poco más, conversando con ella de manera casual y relajada. Era como si ese momento en la enfermería les brindara un pequeño respiro del ritmo acelerado de Blue Lock, un recordatorio de que, en medio de todo, aún podían compartir momentos de paz y comprensión.

Después de un rato de conversación relajada, Hiori miró su muñeca y probó moverla lentamente, agradecido de que el dolor hubiera disminuido. Pero en lugar de levantarse para marcharse, se quedó sentado, mirándola con una expresión que mostraba un atisbo de curiosidad.

"___, ¿qué te motivó a venir aquí, a Blue Lock?" preguntó de repente, con una genuina curiosidad en sus ojos.

___ se sorprendió un poco por la pregunta. La mayoría de los chicos venían a la enfermería solo para curarse o descansar, pero pocos se interesaban en ella y en sus razones. Hiori, sin embargo, parecía realmente interesado.

"Bueno... la verdad es que mi carrera siempre ha estado enfocada en ayudar a los demás," respondió, recordando su camino hasta allí. "Y cuando me ofrecieron trabajar en Blue Lock, pensé que sería un desafío interesante. No es lo mismo trabajar en una clínica común que en un lugar como este, donde todos están en constante competencia."

Hiori asintió, como si comprendiera. "Es cierto... este lugar es único. Pero supongo que también debe ser agotador. Todos estamos compitiendo todo el tiempo, tratando de destacar, y a veces eso puede ser... solitario."