Amor De Retiro

Capítulo 4: Supuestas amigas

Mi cabeza iba a explotar.

En este momento odiaba a mis amigas. No sabía si podía seguir llamándoles así.

Ro fue la única que no la cagó, y me dijo: -¡Shay, espera, sólo bromeabamos!- entonces Warren le respondió: -Creo que a ella no le gustan las bromas- y botó la basura y me siguió. Por suerte, Warren si sabía en qué momento me gustaba estar sola. En cuando se dio cuenta, tomó el lado opuesto por el que yo caminé mientras me dirigía a mi casa, demasiado enojada.

Era muy curioso como Warren conocía tanto de mi y yo de él no sabía nada. Él podría saber de mí, cosas que probablemente yo desconocía.

*Al día siguiente*

Desperté a las 6 de la mañana. Me dí una ducha y me vestí y me arreglé (aunque no se pueda hacer mucho por esta cara)

Tomé mi desayuno y como mi equipaje ya estaba hecho, lo puse en mi coche y conduje hasta la prepa.

-¿Bueno?- contesté una llamada.
-¿Shayl...?- una voz rara sonó del otro lado, pero la llamada se cortó.

A penas me dí cuenta, estaba a dos cuadras de la prepa. Venía tan pensativa que no me fijé y estaba por llegar.

En ente momento, no quiero ir a ningún retiro.

Me dirigí al campus y allá estaban mis "amigas" con Warren. Me paraliceé no podía creer que aún, después de lo de ayer, Warren siguiera hablando con ellas.

Me puse un gorro para ocultarme, supongo que el chisme había sido regado.

¡Oops! Demaciado tarde, ya me habían visto. ¿Alguna vez sería lo suficientemente ágil como para evitar que las personas que no quiero que me vean, no lo hagan?

Rose se me acercó:

-Shay, en verdad lo sentimos, supongo que soy con la que menos estas enojada, por eso vine. Además Lana y Ori me lo han pedido. Ya le explicamos todo a todos, en especial a Warren. Sabemos que n...- la interrumpi y le dije: -¿Cómo putas quieren que las perdone? No soy quien para que me pidan perdón, pero ¿sabes algo? Ese chico lo quiero en verdad, me gusta, no es que sólo lo quiera besar por ganar la apuesta, ¿está bien?

Supongo que la hice sentir muy mal porque ella no dijo nada y fue la única que puso la cara, pero yo también sufrí con todo lo que dijeron. Fui la más perjudicada.

Ro se fue pero en seguida vino Lana:

-Shaylene, lo lamento. ¡No me golpees! Sólo vine a decir que lamento lo que dije... Supongo que no me quieres escuchar, pero cuando quieras hacerlo, por favor buscame.

-No lo haré- respondí -Te vas a ocultar en Rose como ya lo haz hecho. Ya se que se sienten mal y todo eso no va a arreglar nada.

-No me ocultaré y jamás lo he hecho. Estoy harta de que tu puedas bromear y nosotras no podamos decir nada, ¿y eso por qué? ¿Es porque eres la única que en mucho tiempo no ha tenido un novio pero si unas buenas calificaciones? ¿es a caso porque todos los padres quisieran que tu fueses su hija?

Esto se me hizo muy ridículo e infantil.

-No se de que hablas. Es una tontería que combines las cosas. Son temas diferentes. El hecho de que seas una niña problema no significa que yo sea un ángel. Tu más que nadie lo sabes.

Lana se alejó de mí muy enojada. Pero, como si se estuviesen turnando para pedirme disculpas, llegó Ori.

Le dije de inmediato que no iba a hablar con nadie más. Entonces hizo cara de "Ok, Ok, ya me voy" y se fue.

Estaba realmente destrozada. En vez de estar con mis amigas, las canciones más tristes eran mi única compañía.

Me preguntaba por qué rayos cuando estoy triste se vienen todas mis preocupaciones y temores a mi mente, y antes de planear una hipótesis, Warren llegó al rescate de mis amigas.

Por alguna extraña razón, está vez no quería verlo ni en pintura.

-¿Shay, podemos hablar?