Engaño

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La vida es un pequeño laberinto. Hace que te pierdas, te equivoques, te confundas. Pero pese a todo esto, siempre de algún otro modo terminas encontrando la salida. Aunque esta, en más de una ocasión, parezca no existir...

-La vida.

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No puedo creer que después de todas las señales, no me haya dado cuenta. Claro, ahora entiendo cuando dicen que para poder valorar algo, primero tienes que perderlo.

Seguramente se preguntaran a que me refiero; es que era muy obvio, como ser tan tonta. Bueno, verán, después de aquello que sucedió con Jeremy, caí en una profunda mini "depresión" que duro alrededor de una semana (patético, lo sé) pero bueno que podía hacer, no tenía ni la energía ni las ganas de hacer algo. Me sorprende aun como fue que me las arregle para asistir a la universidad.

Pero como siempre, Ani -mi salvación- me saco de aquel laberinto, en el cual me había perdido.

Después de recuperar aquel chica que era, y aclarar algunas cosas, decidí ir a por respuestas, y la única persona que podía dármelas era la novia de mi hermano: Angy, quien como supuse era efectivamente la prima de Jeremy -ya pronto les diré como fue que logre que Angy confesara- en más, mejor se los diré ahora:

Resulta que la pelinegro, ni siquiera recordaba el nombre de su supuesto primo, y como mi hermano no andaba cerca como para ayudarla, le comencé a hacer una especie de encerradilla, en la cual le sacaba verdad por mentira. La verdad no fue gran cosa, vasto con que le preguntara el apellido de su primo, cuantos años tenía, y en qué país estaba viviendo.

Una vez que tenía esta parte del rompecabezas armado, decidí ir a por más piezas. Fue ahí cuando parte de mis preguntas, por fin obtuvieron respuestas.

Aproximadamente cuatro horas atrás:

-Aún hay algo que no entiendo, ¿qué motivos tenías para mentir?

-Eso es algo más difícil de explicar.

-Hay muchas cosas que me debes explicar, pero por el momento, quiero que me des las razones que tenías como para mentir acerca de tu primo.

-Noé, veras... Jeremy no es quien tú crees.

-Por supuesto que no lo es. Es un vil mentiroso rompe corazones.

-Tal vez -se detuvo y dirigió su mirada a mi hermano, quien le toma la mano-.Pero no me refiero a eso, sino más bien a su origen.

-Angy, la verdad es que no entiendo el punto al cual quieres llegar.

-¿Alguna vez te preguntaste por qué razón sus ojos cambiaban de color?

-Por supuesto, quien podría no preguntárselo. Pero ¿qué tiene que ver eso?

-Bueno, en primer lugar, come te habrás planteado alguna vez, no es normal ni humano, que una persona tenga el poder de cambiar el color de sus ojos -asiento con la cabeza.- Veras, a lo que me refiero es que... Hee... ¡hay no sé cómo decírtelo!

Rodé mis ojos -Angy, di lo que tengas que decir de una buena vez.

-¡Jeremy no es humano!-me quedé helada al escuchar aquello.

-Okay, Jeremy no es humano, y Batman es mi vecino que vive en la esquina.-dije irónicamente.

-Noemí, no seas así. Lo que Angy quiere decir, es que Jeremy no es...

-Humano, si ya capte lo que Angy dijo Thomas. No es necesario que lo repitas.-me puse de pie y me dirijo a la ventana del departamento de mi hermano, rodando los ojos.

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