Kaze no Shisha

Bajo las Estrellas EP #11

-La noche había caído con suavidad, y el cielo estrellado cubría el campamento como un manto brillante. Una fogata chisporroteaba en el centro, lanzando pequeñas llamaradas hacia el aire mientras el grupo se acomodaba alrededor. El aroma de la cena llenaba el ambiente, una mezcla de especias y hierbas que Isu había recogido durante el día. Por primera vez en días, todos parecían relajados, dejando de lado las preocupaciones de su viaje.-

– Ethan: 
-Con una sonrisa amplia mientras remueve el contenido de una olla con una cuchara-
"¡Listo! Creo que esta vez logré que no se queme… mucho." 
- Levantó la cuchara con orgullo, dejando ver una mezcla algo espesa, pero de aroma agradable.-

– Yumi: 
-Riendo mientras toma un pedazo de pan-
"Si no se quema, entonces no es cocina de Ethan. Creo que todos estamos esperando el toque 'especial' de carbón." 
- Yumi le guiñó un ojo mientras los demás reían. Siempre sabía cómo animar el ambiente, incluso si eso significaba molestar un poco a Ethan.-

– Sarah: 
-Con una mueca divertida, aunque no podía evitar lanzarle un comentario mordaz- 
"Bueno, al menos no es un desastre completo esta vez. Quién sabe, tal vez hasta sea comestible." 
- Aunque siempre parecía estar molesta con algo, en ese momento su tono era más relajado, casi bromista.-

– Ethan: 
-Frunciendo el ceño, pero sin perder la sonrisa- 
"¡Oigan! Estoy mejorando, ¿ok? La próxima vez cocinaré algo tan bueno que no podrán criticarme." 
- Aunque sus palabras eran un poco serias, la risa en su voz traicionaba lo mucho que disfrutaba de las bromas de los demás. -

– Suko: 
(Con una risa suave mientras se reclina contra un tronco) 
"No te preocupes, Ethan. A este ritmo, tal vez en unos… ¿diez años? podrías abrir tu propio restaurante." 
- Siempre sereno, Suko sabía exactamente cómo lanzar una broma sin parecer demasiado crítico, lo que hacía que todos se rieran sin sentirse atacados. -

– Isu: 
-Sonriendo mientras toma un cuenco lleno de comida, disfrutando de la calma del momento- 
"Al menos estamos todos juntos. La comida sabe mejor cuando estás rodeado de amigos." 
- Sus palabras, simples pero sinceras, lograron calmar las risas un poco, recordándoles a todos la importancia del momento que compartían. -

– Yumi: 
-Con un tono juguetón, pero con una sonrisa cálida hacia Isu-
"Siempre tan sabia, Isu. Pero no te emociones demasiado, la comida sigue siendo de Ethan." 
- Mientras hablaba, arrancó un pequeño pedazo de pan y lo arrojó hacia Ethan, quien fingió ofenderse. -

– Ethan: 
-Recogiendo el pedazo de pan del suelo y apuntando hacia Yumi con la cuchara- 
"¡Ya verás! Cuando termine de cocinar, tendrás que admitir que soy el mejor chef de este grupo." 
- Aunque sus palabras sonaban desafiantes, no podía dejar de sonreír. -

– Sarah: 
-Alzando una ceja mientras se sirve un poco de comida-
"Eso no es decir mucho. El único otro que ha intentado cocinar aquí es Suko, y casi incendia el campamento." 
- La mención del incidente arrancó una carcajada colectiva, incluso de Suko, que rara vez mostraba tanta emoción. -

– Suko: 
-Encogiéndose de hombros con una sonrisa despreocupada- 
"Tal vez el fuego era demasiado intenso para manejarlo. Pero al menos hice algo memorable." 
- Su comentario provocó más risas, relajando aún más el ambiente. -

-La conversación continuó entre risas y bromas, cada uno aportando algo al momento. A pesar de sus diferencias, en ese momento todos parecían conectados, como si la gravedad de sus responsabilidades se desvaneciera bajo la luz de las estrellas.-

-Después de comer, el grupo se recostó cerca de la fogata, mirando el cielo. Las llamas bailaban suavemente, proyectando sombras sobre sus rostros.-

– Isu: 
-Señalando una constelación con un dedo-
"¿Ven esas estrellas? Forman la figura de un río. En mi aldea decían que era un camino que los ancestros seguían para protegernos desde el más allá." 
- Su tono era sereno, casi hipnótico, y su historia capturó la atención del grupo. -

– Yumi: 
-Acostada boca arriba, con las manos detrás de la cabeza- 
"Yo nunca fui buena para encontrar formas en las estrellas. Para mí, solo son un montón de luces bonitas." 
- Aunque su tono era relajado, había un toque de melancolía en su voz, como si recordara algo distante.  -

– Sarah: 
-Suspirando mientras observa el cielo- 
"Bueno, al menos esta noche no hay nubes. Aunque me pregunto cuánto tiempo más estaremos vagando por aquí." 
- Su comentario, aunque parecía una queja, reflejaba un poco de cansancio. -

– Ethan: 
-Sonriendo mientras toma un palo y aviva la fogata-
"El tiempo que sea necesario, ¿no? Mientras estemos juntos, podremos manejar lo que venga." 
- Su optimismo parecía contagioso, y aunque nadie dijo nada, las expresiones de los demás se suavizaron un poco.- 

-De repente, el crujir de unas ramas en la distancia interrumpió el momento. Todos se tensaron al instante, sus miradas dirigidas hacia la oscuridad más allá de la luz de la fogata. -

– Yumi: 
-Susurrando mientras se pone de pie con agilidad- 
"¿Escucharon eso? No fue un animal." 

– Isu: 
-Frunciendo el ceño, pero manteniendo la calma- 
"Tal vez fue el viento… o alguien más." 

– Sarah: 
-Tomando una rama cercana como arma improvisada-
"No suena como algo que deberíamos ignorar. ¿Creen que sea un problema?" 

– Ethan: 
-Poniéndose de pie rápidamente, aunque con una expresión de incertidumbre- 
"Sea lo que sea, no vamos a dejar que nos tome por sorpresa. Estén atentos." 

-El grupo se quedó en silencio, sus sentidos alerta mientras intentaban identificar el origen del sonido. La tensión en el aire era palpable, y la calma de la noche se había transformado en un momento de incertidumbre. La fogata seguía crepitando, pero ahora parecía ser la única fuente de seguridad en medio de la oscuridad del bosque.-