El Efecto del Espejo

Capitulo 2: La sombra del pasado

Capítulo 2:  La sombra del pasado

Ariadna salió del centro de rehabilitación con la mente en blanco.  La conversación con Luciano la había dejado aturdida.  Sus palabras, su mirada, su conocimiento de la pulsera... todo era un enigma que la perseguía.

Mientras pedaleaba por la ciudad, las nubes grises se habían transformado en una lluvia torrencial.  El viento golpeaba su rostro,  y la lluvia la empapaba hasta los huesos.  Pero el frío no era nada comparado con la sensación de inquietud que la invadía.

Al llegar a su apartamento,  se dirigió directamente a su habitación.  Necesitaba un poco de paz,  un poco de tranquilidad.

Tomó la pulsera de su muñeca y la observó con atención.  Era una pulsera de hilo rojo,  con nudos que formaban un patrón complejo.  No recordaba cómo la había conseguido,  pero la había guardado durante años,  como un amuleto.

¿Cómo sabía Luciano sobre ella?  ¿Y qué significaba su frase "quizá no en esta vida"?

Ariadna se sintió atrapada en una red de preguntas sin respuestas.  Era como si su pasado la estuviera alcanzando,  como si un fantasma de su infancia estuviera a punto de revelarse.

Decidió buscar información sobre Luciano.  Se sentó frente a su computadora y revisó la carpeta de pacientes del centro.  Pero no encontró nada que pudiera darle una pista sobre su pasado.  Solo datos básicos:  nombre, edad, diagnóstico:  trastorno de personalidad.

"Trastorno de personalidad,"  murmuró Ariadna.  "Eso no explica nada."

Decidió que tenía que hablar con el doctor Gutiérrez.  Él tenía que saber algo más sobre Luciano.

Al día siguiente,  Ariadna llegó al centro de rehabilitación con la determinación de obtener respuestas.

Encontró al doctor Gutiérrez en su oficina.  Él la recibió con la misma mirada fría de siempre.

—Doctor,  necesito hablar con usted sobre Luciano.

—Ya veo.  ¿Qué te preocupa?

—Lo que me dijo ayer.  ¿Cómo sabía sobre la pulsera?  ¿Por qué me dijo que mi nombre le suena familiar?

Gutiérrez la miró con atención.  Sus ojos eran como los de un lobo,  penetrantes y llenos de secretos.

—Luciano es un caso complejo,  Ariadna.

—Lo sé.  Pero necesito entenderlo.

—No es tan simple como parece.

—Doctor,  por favor.  Necesito saber qué está pasando.

Gutiérrez suspiró.

—Te diré lo que sé.  Luciano llegó al centro hace dos años.  Su historia es confusa.  Su familia lo abandonó cuando era niño.  Creció en un orfanato,  donde sufrió abusos.

—¿Abusos?

—Sí.  Físicos y psicológicos.

—¿Y cómo llegó al centro?

—Lo encontraron vagando por la calle,  en estado de shock.  No hablaba,  no se movía.

—Pero ahora...

—Ahora es un manipulador.  Un maestro del engaño.

—¿Y la pulsera?

—No sé cómo la conoce.

Ariadna sintió que el miedo la invadía.  ¿Qué estaba pasando?  ¿Cómo podía Luciano saber tanto sobre ella?  ¿Y qué significaba su conexión con su pasado?

—Doctor,  ¿hay algo más que deba saber?

Gutiérrez la miró fijamente.

—Sí,  Ariadna.  Hay algo más.

—Dígame.

—Luciano...  tiene un don.

—¿Un don?

—Sí.  Un don para ver el pasado.

Ariadna sintió que el mundo se le venía encima.

—¿Qué quiere decir?

—Quiere decir que puede ver lo que has olvidado.

de repente Ariadna sintió como un escalofrío recorre por todo su cuerpo

_¿Lo que habré olvidado?

_¿Que quiere decir con eso?

- ya lo sabrás a su debido tiempo

Cuando salió de oficina del doctor
Se había quedado con más preguntas que respuestas que tenía que resolver

¿Que que ver Luciano con mí pasado ?

¿Quería decir con la frase en quizas otra vida?

En eso sus pensamientos fueron interompidos por su  compañero de trabajo
Tomas