7

35 2 1
                                    

Rose

Los ensayos para el recital de La Bella y la Bestia serán lunes, miércoles y viernes de seis a ocho de la noche, y domingos de nueve a once de la mañana. El tiempo es justo, así que Darwin, el coreógrafo, no tolerará las tardanzas bajo ninguna excusa.

—Empezaremos hoy con unos movimientos de prueba, quiero ver de qué están hechas. Que hayan sido aceptadas en la audición no quiere decir que se queden hasta el final.

Aquello llena de murmullos el salón de baile; en cierto modo es bueno, hará que nos esforcemos; por otro lado, puede dar lugar a riñas. Le creo cuando alude a que estamos en una fase de prueba, aquí no somos tantas personas como para llevar a cabo una presentación de tal magnitud, así que supongo que en algún momento conoceremos al resto de los participantes.

Del grupo, reconozco a las cinco que pasaron en la audición en la cual participé, el resto deben ser de otros distritos. Comienzo a creer que esto es más grande que lo que me dieron a entender y no sé si las demás están al tanto. Gretchen mencionó un recital e intuí que sería como en otras ocasiones, algo pequeño en nuestro distrito.

Es tal vez porque estamos en el último año y quiere que tengamos la oportunidad de ser vistas. Siendo parte de la escuela pública de arte no tenemos muchas posibilidades de costear las mejores academias, dependemos de becas y patrocinadores.

Tendré que esforzarme el doble. Una beca que me lleve a una academia o universidad fuera de Los Ángeles sería más que bienvenida, por fin sería libre y...

—¡Rose! —Me sobresalto con el chillido susurrado en mi oído, se trata de Josie, la única otra chica de mi escuela que pasó la audición; la miro y sus ojos gritan que vea en cierta dirección, al hacerlo descubro a Darwin impaciente, debió haberme llamado varias veces.

«Jodidamente fantástico, qué buena manera de empezar las cosas por aquí».

Me asomo hasta donde se encuentra de pie, con la cara en alto y lista para un regaño. Es alto y delgado, pero bien constituido, se mueve naturalmente como alguien que ha practicado ballet durante toda su vida, su pelo negro y lacio es largo, lo lleva atado en lo alto de su cabeza en moño, su piel es blanca como la leche, sus ojos con negros y me observan de arriba abajo, gira en torno a mí y chasquea la lengua, «¿qué estará pensando?, ¿estoy lo bastante en forma? Me descuidé en las últimas semanas por las golpizas».

—Ecarté —comanda retrocediendo, actúo por instinto; Gretchen nos da órdenes así de repente y estoy acostumbrada—. Chaînes. — Desde la posición hago el giro sin desplazarme—. Déboulés —instruye y acato sin problemas—. Attitude turn. —Elevo mi pierna izquierda noventa grados manteniendo mi rodilla doblada en arco y giro repetidas veces—. Croise devant. —Me detengo en dicha postura sin perder el equilibrio—. Vuelve con el resto.

Intento descifrar su expresión cuando me giro y lo encaro, no parece deslumbrado; y tampoco yo con estos pasos.

—Lo hiciste bien —elogia Josie cuando me deslizo en el suelo, la miro con una ceja en lo alto.

—¿Quieres algo de mí? ¿Qué haces hablándome? —espeto con mayor brusquedad de la que pretendía; hace una mueca y luce apenada—. No hagas eso, no me engañas, sé cómo eres en realidad —corto su actuación al instante, su rostro cambia a una sonrisa amplia, se sitúa a mi lado y no parece afectada por como la trato.

—Sé que nunca hablamos, pero no tengo nada en tu contra —se explica—. Eres la única a quien conozco aquí.

—No me conoces.

—La única persona que me es familiar, ¿contenta? Relájate un poco. No busco ser tu mejor amiga, simplemente llevar la fiesta en paz mientras seamos parte de lo que sea que sea esto. —Estrecho mis ojos—. Lo que dije es verdad. Escucha, sé que tienes una opinión de mí, soy superficial y falsa, todos lo dicen.

Quédate Conmigo Esta Noche [Disponible En Físico]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora